Hoy es el día que he estado esperando durante todo el año. ¡Por fin me voy de vacaciones!
Ya lo tengo todo preparado y dentro de 1 hora nos vamos. Ahora mismo me encuentro ayudando a mi hermana: terminando de preparar sus cosas, se las ha dejado para lo último, como normalmente hace. Pero hay un pequeño problema: la maleta se resiste a cerrarse.
No sé qué es lo que tanto necesita llevarse para que no quepa en la maleta. Deberíamos haberlo previsto, Rose es, bueno, es Rose. No se siente cómoda en un sitio si no se lleva algo que le dé el ambiente de su habitación y esta vez ha decidido llevarse casi toda esta.
Me siento un poco estúpida sentada encima de la maleta intentando aplastar el inmenso bulto de ropa y demás cosas mientras Rose intenta sin mucho éxito cerrar la cremallera. Suspiro de desesperación.
Creo que vamos a necesitar la ayuda de Jack para cerrar esta maldita maleta.
Cuando lo llamamos se demora bastante en venir a ayudarnos, últimamente está serio y muy raro. Se peleó con Leila y creo que lo dejaron. No es, que digamos, sea la mejor forma de empezar las vacaciones de verano, pero voy hacer todo lo posible porque se lo pase genial y se olvide de eso. No me gusta verlo así.
- Tenemos un 1.07: la maleta no se cierra.- digo haciendo un último esfuerzo.
- ¿Rose, que llevas ahí?- pregunta Jack.- Parece que va a explotar.
- Llevo lo básico ¿vale?
- ¿Y qué es para ti lo básico?- pregunto bajándome de la maleta.
- Pues toda la ropa de verano, el ordenador, mi preciada almohada, mis libros de lectura...
- Ya de por si es un milagro que haya cabido todo eso en esa pequeña maleta.- comenta mi hermano.
Rose se encoge de hombros:
- Bueno, pero ayúdanos.
- Vale.
Rose y yo intentamos chafar el bulto otra vez mientras Jack cierra la cremallera. Por fin, una cosa menos.
- No era tan difícil ¿veis?- dice señalando con la cabeza la maleta.
- ¿En serio?- lo miro incrédula.- Has podido cerrarla porque nosotras dos te hemos ayudado.
- Eso es verdad, no te des todos los méritos.- apoya mi hermana.
- Vale, vale, pequeñas tigresas.- se ríe.- Bajemos esto al hall.
Rose decide ir a caballito sobre Jack y gritar ''Corre papá oso'' mientras este baja las escaleras cargado con su maleta y yo voy detrás cargando con la mía y la de Rose.
Mis padres están en la cocina sentados a la mesa desayunando, les damos los buenos días y pasamos a sentarnos a la mesa nosotros también.
El desayuno de hoy está formado por: un vaso de leche, otro de zumo y dos tostadas, todo hecho por mamá. Mmm... echaba de menos los desayunos de mamá.
- Chicos, ¿lo tenéis todo preparado?- pregunta mi padre después de darle un sorbo a su café y dejar de leer el periódico de hoy.
- Sí, al final hemos podido solucionar el problema con la maleta de Rose con un poco de la ayuda de Jack.
- Culpa mía.- dice mi hermana con una sonrisita.
- Tú y tu manía de llevarte casi toda tu habitación cada vez que nos vamos de viaje ¿no?- adivina mi madre.
- Has dado en el clavo.- responde Jack.
- No puedo dormir bien si no llevo mi almohada. Además vamos a pasar casi todo el verano allí, tengo que llevarme toda la ropa que necesite ¿no? Y por último ¿qué lectora puede vivir 2 meses sin sus libros?- se queja.
Nos reímos. Esta pequeñaja que tengo como hermana es lo mejor.
- De acuerdo, de acuerdo, tú ganas.- se rinde papá.- Jack, Annie ¿habéis cogido vuestros arcos?
- Sí, lo tenemos todo preparado.- responde mi hermano.
- Supongo que ahora tendremos que pasar recoger a Leila.- dice mamá mientras friega los vasos.
- Eh... no, no hace falta.- contesta.
- ¿Y eso? ¿Ha pasado algo?
- Sí, bueno... Leila y yo nos peleamos y ya nos estamos juntos.- responde sin quitar la vista de su último trozo de tostada, como si fuera lo más interesante del mundo.
- Oh, lo siento mucho.- mi madre corre a abrazarlo.
- Tranquilo, la vida sigue.- le anima mi padre dándole una palmada en la espalda.
- Todavía te quedan tres mujeres que no te van a fallar.- dice mi patito.
- Claro, no te librarás de nosotras tan fácilmente.- le prometo.
- Y también tienes un hombre que te puede dar consejos para ligar.- dice mi padre guiñándole el ojo.
- ¡Raymond!- exclama mi madre.
* * * * * * * * * * * * * * * * *
Al poco rato ya estamos todos montados en el coche camino a la casa del lago de los Grey. Según he podido cotillear por ahí son tres hermanos: un chico, es el mayor, con la edad de Jack, la mediana es una chica de mi edad y la pequeña otra niña de la edad de Rose.
Recibo un mensaje de Kate diciendo que viene detrás de nosotros en el coche con sus padres y Elliot.
Los padres de Elliot no han podido venir porque estaban liados con unos asuntos en la ciudad. Pero intentarán venir a mediados de mes.
¡Van a ser las mejores vacaciones de mi vida!
El camino se me hace corto ya que mi hermana pequeña y yo no paramos de cantar en todo el trayecto las canciones que van saliendo en la emisora de la radio. Mi madre se anima y va tatareando y haciendo palmas; papá va silbando y Jack tocando lo que se supone que es una batería improvisada con los asientos.
Ahora sí, podéis pensar que mi familia no es del todo normal, pero es la mejor familia.
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¿Por qué cuando por fin soy feliz todo se desmorona? (Anastasia y Christian)
FanfictionFanfic FSOG