Por la noche, Leo no había mejorado mucho pero podía mantenerse despierto y de pie. Estaban por dirigirse a los muelles, su padre les había dicho que un cargamento estaba por llegar y tenían que ir a vigilar. Leo estaba preparándose para salir cuando alguien toco la puerta, al mirar vio que se trataba de Karai. -¿Estas seguro de que puedes salir? No te ves bien.
-La fiebre bajo, estaré bien- respondió sin mirarla, en realidad aun le dolía la garganta y tenia unos pocos escalofríos, pero no podía darse el lujo de quedarse a solas con su padre. Se giro para mirar a su hermana, ella estaba preocupada, su corazón se calentó al verla hacia años que solo recibía miradas frías y sin emociones de su parte. -Me quedare cerca si te hace sentir mejor.
Karai suspiro, pero asintió. -Esta bien. Aun así, preferiría que te quedaras.
-Ambos sabemos que no puedo, soy un ninja del pie- dijo con resignación, no tenia opción.
Karai se acerco y puso su mano en su frente, pareció un poco aliviada. -Parece que tienes razón, esta bien- estaba por irse pero se detuvo cerrando la puerta. -¿Has descubierto algo? ¿Sobre los chicos?
Leo negó con la cabeza. -Como dije hay muchos chicos en la escuela, es difícil saberlo- dijo mirándola. -Además, no es que pueda hablar con la gente. Todos me evitan como la peste- "incluso los adultos" pensó.
Karai asintió, le dio una sonrisa triste. -Bien, ya lo sabes, si algo mas te resulta familiar...
-Te lo diré- dijo con una pequeña sonrisa.
-Te veré abajo- se fue dejándolo solo. Leo se pregunto si su hermana sabia que escondía algo, supuso que no. Termino de vestirse, tomo su katana y estaba por salir de su habitación. Antes de hacerlo su puerta se abrió una vez mas, supo que no era Karai, ella últimamente tocaba. Levanto la mirada para encontrar a su padre esta vez. Se paro derecho e hizo una reverencia. -Padre.
Oroku no dijo nada, solo miro al adolescente frente a él. Leo estaba nervioso, no sabia que era lo que quería esta vez su padre. Paso en silencio un momento hasta que su padre hablo. -Leonardo, Hun me dijo que te escucho hablando con Karai algo interesante sobre los chicos de Hamato- Leo se tenso. -Te daré la oportunidad de decirme.
Leo asintió, eso no era una solicitud. -Karai me pregunto sobre mi comportamiento la otra noche, ella dijo que parecía que conocía a esos chicos.
-¿Y lo haces?- pregunto mirándolo.
Leo respiro hondo tratando de calmarse y miro a su padre a los ojos. -No, es como le dije a ella, solo me parecen familiares.
-¿Estas seguro de eso?- su voz era mas dura, tal vez para hacer que Leo le temiera pero el chico no lo dejo. -¿Incluso en la escuela?
-Si, seguro- dijo aun mirando sus ojos. -Incluso en la escuela, nadie se me acerca.
Su padre no dijo nada, se quedo ahí pensando un momento. -¿Y que hay de los que no lo hacen?- pregunto después mirando a Leo. El chico parecía confundido. -¿Que pasa con los chicos que te invitaron a salir el otro día?
Leo trato de mantenerse calmado. -No han vuelto a hablarme, no estoy seguro de haberlos visto en la escuela- era mentira, solo esperaba que su padre no se diera cuenta de eso.
-¿Es así?- su voz se volvió fría. -Es extraño que ellos se te acercaran, después de todo, todos te evitan pero por alguna razón ellos no- su padre empezó a dar vueltas su alrededor. -Podría encontrar un par de razones, una de ellas es que saben quien soy y fueron enviados por Hamato para vigilarte o solo están buscando beneficiarse de ti, no seria la primera vez.
Su corazón se encogió, su padre se refería al incidente en Japón. -Tal vez solo querían ser amables, soy el chico nuevo.
-Leonardo, tu y yo sabemos que nadie quisiera estar cerca de ti en su sano juicio, siempre habrá una razón- su padre se paro frente a él de nuevo. -Nadie, absolutamente nadie se acercaría a ti. Eres un Oroku, hijo de destructor, nadie quiere saben nada sobre nosotros- Leo bajo la mirada, su pecho le dolía, mentira sus amigos estaban con él porque querían estar ahí, a su lado, no le mentirían ¿verdad? -Además, ¿quien querría acercarse a un mocoso estúpido y patético? es normal que te eviten como una peste- Oroku tomo con fuerza el mentón de Leo y lo hizo mirarlo a los ojos. -Preguntare de nuevo, ¿estas seguro de que no los conoces?
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TMNT humanos
FanfictionOroku Leonardo, hijo del gran destructor. Se muda con su familia, su padre Oroku Saki y su hermana mayor Karai, a Nueva York, sin saber las razones de su padre. Al llegar se encuentra con tres hermanos y su vida cambia, esa vida llena de oscuridad...