Estos últimos días había notado a su pareja demasiado cansado, tenía un semblante distinto, parecía como si Camus no hubiera descansado en días pero no lo entendía.
Aunque Dégel no contaba con esa pequeña travesura que Kardia le hizo hace varios días...
Cualquier locura por parte del griego era aceptable pero esta vez si llevó sus travesuras más allá que solo una simple broma.
Nadie sabía en realidad que fue Kardia quien le hizo el favor a Dégel de hacer pequeños agujeros con ayuda de una aguja a los preservativos que regularmente Dégel usaba con Camus para evitar llevarse una sorpresa.
Ahora esa travesura tuvo consecuencias, Dégel y Camus no sabían lo que les esperaba...
- No tengo apetito.
Nuevamente Camus negaba el plato de comida que Dégel le ofrecía. Comenzaba a preocuparse por su salud.
- Mon amour debes comer algo, así solo lograrás enfermarte.
Insistió Dégel ofreciéndole un poco de fruta en el tenedor esperando que su pareja aceptara sin embargo Camus solo se limitó hacer a un lado la mano de su pareja.
- No me dejas otra alternativa más que llevarte al médico.
- Es algo que se me pasará pronto descuida Dégel...
Camus se levantó de la silla para poder subir a la recámara, pero de manera repentina sintió un leve mareo.
Logró apoyarse del contorno de la mesa, de manera inmediata Dégel se levantó de su lugar para poder tomar a su pareja de la cintura.
- Llevas días actuando muy extraño, sin falta te llevaré a consulta para que puedan hacerte una revisión. No me gusta verte así.
Dégel se aseguró de llevar en el bolsillo de su pantalón su cartera, le ayudo a Camus a caminar hasta la puerta para poder llevarlo al auto.
En todo el trayecto del camino, Camus permanencia con los párpados cerrados, no sabía por qué pero se sentía cansado, sin ganas de moverse, todo lo asociaba a sus días de trabajo.
Cuando llegaron ambos pasaron a la consulta, el médico en turno le hizo una revisión general, sin embargo no encontró problema alguno.
Al final optó por hacer unos análisis de sangre que fueron realizados por su asistente, tuvieron que esperar unos treinta minutos para que la joven les entregará un sobre blanco donde venía la respuesta final.
Dégel la tomó con curiosidad por qué la joven asistente sonrió cuando les hizo entrega de los resultados.
Poco a poco fue sacando ese papel doblado para ver el veredicto final.
Sus manos comenzaron a temblar al leerlo, podía esperar cualquier cosa pero esto era algo nuevo para Camus y sobre todo para el.
- ¿Todo está bien Dégel? - Cuestionó Camus al ver que Dégel se había quedado sin palabras después de conocer el resultado final.
- Yo...
- No me asustes por favor.
Dégel dejó caer el papel en el suelo, aventó el sobre vacío lejos de él y tomó a su pareja de la cintura para elevarlo un poco mientras daba vueltas junto con él, parecía un pequeño niño que acababa de recibir un regalo.
- ¡Camus mi amor, seremos padres!
Este grito fue lo suficientemente fuerte para llamar la atención de los demás pacientes que esperaban ser atendidos.
Algunos los observaban con felicidad, otros más con indiferencia y otros quizá hasta con molestia; pero algo era seguro y es que Dégel estaba feliz por aquella noticia.
- ¿Que? Esto no... - Titubeo nervioso Camus - Tu, yo...
Dégel colocó su dedo índice sobre los labios de su pareja, con ternura llevo uno de sus mechones detrás de su oreja.
- Es lo mejor que me ha pasado, cuidare de ti, de nuestra pequeña familia.
❄️💖❄️💖❄️💖❄️❄️💖❄️💖❄️💖❄️💖❄️💖
ESTÁS LEYENDO
Cuidaré de ti
Fanfiction(Aprendiendo a ser padres) Dégel y Camus deben prepararse para una pequeña inesperada llegada; poco a poco los dos aprenderán esa labor de ser padres, descubriendo que no es fácil pero tampoco imposible para Dégel quien debe aprender a entender los...
