Cuidaré de ti

Amamantar

Cuando lo llevaron a la habitación donde se quedaría a esperar su alta en el hospital, lo primero que hicieron las enfermeras fue llevar a sus dos pequeños quienes ya regresaban perfectamente bañaditos y usando los mamelucos que Dégel y Camus compraron de último momento antes de que se presentara los síntomas del parto.

Después de estar un par de horas en la sala de recuperación, Dégel se encontraba también ocupado terminando de realizar los trámites correspondientes y de hacer los pagos pertinentes de la hospitalización.

- ¡Pero miren que belleza!

Halagó Mystoria entrando a la habitación justo cuando las enfermeras llevaron en unas pequeñas cunas a los gemelos.

- Son hermosos - Respondió Camus sonriendo al ver que su mamá llegó justamente a la hora de la visita.

- Me alegra ver qué todo saliera bien Camus. Tu padre está feliz de ver qué tú esposo está al tanto de ti y de tus pequeños.

- No puedo negar que Dégel es un amor con nosotros, creo que no puedo más si es todo lo que necesito en mi vida.

Mystoria podía notar en su hijo esa chispa de felicidad en el rostro de Camus, estaba por agregar algo más a su emotiva plática pero uno de los gemelitos comenzó a llorar pidiendo el calor reconfortante de su mami.

- No hagas esfuerzo cariño, en seguida te lo paso, necesita comer - Mystoria se acercó al pequeña cuna para tomarlo entre sus brazos y llevarlo a los de Camus.

Sonrió con satisfacción al ver que era demasiado lindo, aunque todos los rasgos eran principalmente de su progenitor.

- Ambos con el cabello verde, Dégel no puede negar que sean suyos.

- Lo mismo digo yo... - Hizo una mueca burlona - Nueve meses sufriendo los dolores para que se parezcan a su padre.

- Pero los pequeños tienen excelentes genes, ustedes dos son muy lindos que la belleza de sus gemelitos no se compara con nada - Agregó Mystoria ayudando a su hijo para que Camus comenzara por primera vez a amamantar a su pequeño retoño.

- Son una ternurita - Susurró Camus cobijando a su pequeño gemelito, mientras observaba con mejor detenimiento su rostro - Bienvenido mi querido Shun.

Aquel pequeño bebé movía su rostro de un lado para otro buscando a su mami, con cautela lo fue guiando hasta uno de sus pezones para poder amamantarlo antes de que despertara su pequeña y comenzara a  llorar por querer también las atenciones de su mami.

- Tu suegra ha comprado un recolector de leche para que puedas usarlo cuando los dos bebés no te dejen dar un respiro.

- Garnet me parecía ser una mujer muy enojona y con pocas ganas de socializar, ahora me doy cuenta que es una buena persona - Añadió Camus acariciando la cabeza de su pequeño mientras seguía disfrutando de la leche que el cuerpo de su mami producía - Algo me decía que me faltaba cosas por comprar ahora me doy cuenta que ese detalle me faltó.

- No te preocupes, también los padres de Dégel tratan de ayudar en lo que se puede. Desde que entraste al hospital Dégel no tiene cabeza para pensar las cosas con calma, hace unas cosas por otras, es normal ahora que son padres... Los dos irán descubriendo cosas muy maravillosas en compañía de sus gemelitos.

- Debo admitir que siento un poco de temor, se ven tan pequeños y frágiles que no sé si pueda realizar mi labor como madre de mis gemelitos.

Mystoria se dió cuenta de la preocupación de su hijo, se acercó para colocar su mano sobre su hombro y le sonrió para darle un poco de confianza.

- Lo harán bien, solo recuerden que esto es de dos y se tienen el uno al otro. Nuestros nietos tienen unos padres encantadores que darían todo por ellos.

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