𝐓𝐡𝐞 𝐖𝐡𝐢𝐬𝐭𝐥𝐞𝐬. [✓]

Things of destiny.

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Estaba yendo a la universidad con Jayla mientras hablábamos sobre estupideces como. “¿Que va primero? ¿El huevo o la gallina?” Hablábamos sobre preguntas sin sentido, las respuestas y opciones que tendríamos.

Algo extraño en verdad.

Eran aproximadamente las siete de la mañana, íbamos a buena hora y temprano a la universidad.

Sasha siempre venía con nosotras para dejarla a la escuela, pero esta vez ella se sentía “mal” aunque era pésima fingiendo. Aún así no quise perder tiempo y salí de la urbanización.

Y aquí andamos. Hablando estupideces aleatorias.

Así que para dejar de hablar tonterías sin sentido quise hacer una pregunta para dejar la conversación rara de una vez.

-- Bueno, dejando al huevo, la gallina, el cereal y el plato... -- ella me miró con sospecha.

-- ¿Y ahora qué me vas a decir? -- se cruzó de brazos.

-- ¿Qué pasó con el tal Jacob? -- ella hizo una confundida mientras veía a otro lado. Otra persona que es pésima fingiendo. -- Sabes de qué hablo Jayla, no te hagas la que no sabes nada. -- reí.

-- Me escrito con él varias veces. Ayer me pasó un mensaje si podíamos ver hoy en la tarde, pero no le respondí. -- bajó su mirada y yo la vi con molestia.

-- No lo puedo creer, Jayla. -- rodé los ojos. -- ¡Tienes oportunidad con él! ¿Por qué simplemente no lo aceptas y ya?

-- No es fácil cuando lo que siento por él no está claro, Garret. -- habló obvia.

-- Yo te ayudaré a que le contestes. Hoy lo tienes que ver si o si. -- dije mientras veía la universidad desde lejos, ya estábamos llegando.

Ella hizo una mueca, obviamente sabía el porqué. A Jayla le incomodaba tener que hablar de sus “amores” o “pretendientes” si así se le podía llamar.
Ella sí ha tenido novios, varios, en toda su vida, pero le da miedo conocer a más personas y no hacerlo correctamente.

-- Él está en clases de arte. Dijo que quería ser modelo y que tenía algo pendiente con Luis, así que creo que hoy irá a nuestra clase. -- dijo mientras veía al cielo con una sonrisa.

La verdad, es que no la entiendo.

Simplemente la ignoré con suspiro y regresamos nuestras vistas al camino, y desde lejos pude ver a Ethan, quién esperaba alguien mientras veía la hora de su celular.

-- Por cierto, ¿que hay entre tú y él? -- señaló con la cabeza a Ethan desde lejos.

-- Nada, solo somos amigos. -- fruncí mis labios con simpleza.

-- ¿Y qué hay con el de la urbanización? -- hizo una sonrisa pícara.

-- ¿De quién hablas, loca? -- pregunté haciendo una cara exageradamente confundida.

-- Tú sabes de quién hablo.

¿Aidan?

-- Ooooh, ya entiendo. ¿Hablas de Aidan? -- ella asintió confundida. Al parecer no se sabía su nombre.