El camino hacia tí. [[CORRIGIENDO]]

Capítulo 14. "ICHIGO ICHIE" II

Las horas pasaban rápidamente en aquel lugar, había accedido a beber un par de copas de vino, pero a causa de mi poca experiencia aquello fue suficiente para tambalearme de vez en cuando.

— Debiste decirme que no sabías tomar, ese vino es muy fuerte Kathe.

Me dice Gambino de pie y detrás de mí mientras apostaba ahora en el blackjack.

— Lo siento, pensé que era algún jugo o refresco, era muy dulce.

Respondo mirando atentamente como jugaba pues me había convencido de participar en la siguiente ronda.

Una vez que ambos ganamos al menos una ronda ahí nos fuimos a un reservado junto a otro par de hombres, los negocios comienzan.

— Mi fido di te Gambino. Tuo padre è stato un buon compagno nella bella Italia.

Expresa un hombre mayor mientras movía con delicadeza una copa de vino, al parecer ese hombre conocía al padre de Carlo.

— Lo apprezzo signore, gli affari in Italia vanno bene anche adesso ma voglio fare qualcosa per me, andare avanti con il mio cognome e non andare avanti semplicemente per il mio cognome... E se non è un problema... preferisco continuare il discorso in spagnolo.

Escuchar a Carlo Gambino hablar con ese acento Italiano me provocó un ligero escalofrío, el hombre hablaba el español de una forma tan fluida y natural que de no ser por su apellido nadie podría saber que era un Italiano.

— Vai avanti, è degna di fiducia?

Pregunta él hombre frente a nosotros dirigiendo su vista a mi por lo que asumo que debería irme, sin embargo Carlo lleva su mano a mi barbilla para hacer que lo mire a los ojos, de nuevo los nervios me recorren y tan solo lo miro sin saber que hacer, su mirada parece indecisa por un breve momento

— Claro... es de fiar, trabaja para mi y en realidad está para ayudarme así que podemos hablar sin problema alguno.

Escucharlo decir eso sobre mi hace que mi corazón se encoja, este hombre realmente confiaba en mi? No debería hacerlo, yo estaba aquí para vigilarlo... pero realmente quería ayudarlo.

— Excelente Carlo. — Habla aquel hombre sin poder ocultar un notable acento italiano que los diferenciaba— Entonces te ofrezco algo que te encantará, ¿conoces el muelle? Es una de mis muchas propiedades aquí, pero obviamente no es esencial para mí, podría venderla.

Al escuchar aquello Carlo sonríe, claramente él la querría comprar.

— Me gustaría hacer ese trato con usted, además los negocios van muy bien y ahora que usted será el proveedor directo créame que estoy dispuesto a cerrar el trato.

— Bueno, eres un hombre inteligente Carlo, estoy seguro de que lo lograrás, el muelle será tuyo por... quince millones, dinero limpio por supuesto

Carlo lo duda un poco pero finalmente acepta, pagaría varios millones de euros por aquella propiedad, sin embargo eso no me parecía muy bien, después de todo era necesario revisar un montón de papeleo antes de cerrar un trato por esa cantidad.

— Señor Carlo, creo que...

Intentó advertirle, pero me hace callar al colocar su mano sobre mi pierna, claramente era una indicación para que no hablara y aunque eso me hiciera enojar en realidad preferí esperar a que acabarán de hablar.

— Entonces estará de acuerdo en reunirnos en otro momento para discutir los términos y firmar los documentos necesarios.

Dice Carlo tomando un poco más de whisky.