HAYLEY
Me levanté super temprano para alistarme para al viaje con los chicos, levanté a Cristian en el camino que dormía plácidamente en su cama al lado de la mía.
Sí...la venganza es dulce..., ¿Qué se siente pollito?
Me puse una polera blanca y un buzo negro cómodo junto a unas zapatillas blancas y me hice un moño alto en el cabello, mientras me maquillaba ligeramente.
Total, yo soy hermosa tal y como me vista.
Bajo lista con mi maleta y me acerco hacia donde está mi mamá haciendo un jugo de fresas.
Awww seguro se puso sentimental al saber que me voy.
Me acerco para abrazarla por detrás y agradecerle, pero entonces ella toma el jugo preparado y se lo bebe de un trago.
Al cabo que ni quería...
-Ay dios!, Hayley no me asustes así, que no te das cuenta que me puedes causar un infarto con esa cara.-exclama mi madre terminándose su vaso de jugo.
-Eres cruel, no me hiciste jugo a mí, pero hay un dios que todo lo ve, todo lo ve, y me has abandonado bien feo en este mundo cruel...-termino cantándole.
Ella me mira con cara de ¿por qué carajos no aborte?
-Mejor apúrate loca, prepárate algo ligero para comer y ve saliendo que tus chicos están esperando afuera.
-¡Rayos!
Corro a prepararme algunos panes con mermelada y y una manzanilla caliente.
Termino de comer y salgo disparada hacia afuera.
-¡ADIÓS MADRE, NO ME EXTRAÑES!.-grito desde la puerta
-No pensaba hacerlo.-dice relajada mientras acaricia el lomo de Cristian y se sientan juntos en el sofá a ver Grey's Anatomy.
Bueno al cabo que ni quería su amor...
Tomo mi bolsa que no recuerdo que pesara tanto y mi maleta y me dirijo hacia el auto donde están esperando mis novios.
-¡Hola amores!-digo acercándome y besando a cada uno
-Alguien está emocionada hoy.-dice Ayron mientras me abraza y me besa.
-Buenos días diosa.-dice Lorcan abrazándome igual
-Buenos días linda.-continua Marcos repitiendo la acción de sus hermanos.
-Buenos días princesa, es hora, vámonos.-dice Patrick mientras mete mi maleta al auto.
Me acerco al amargado de Antoni, lo beso y le muerdo el labio inferior.
-Buenos días amargado.
-Buenos días enana.-contesta enfureciéndome en segundos
¿Yo enana?, ¿Esquiusmi?
-No me digas así o no hay más besos.-le digo con el ceño fruncido
-Tu me vas a besar quieras o no preciosa.-dice con su mano tomando mi cintura.
-¿Así?, ya veremos.-le digo mordiendo su mentón suavemente y lamiéndolo consiguiendo que gruña, me separo y subo al auto con los demás.
Lo veo subir atrás molesto y yo suelto una pequeña risita.
Veinte minutos más tarde llegamos al aeropuerto y esperamos todos a abordar.
Decido abrir mi bolsa ya que estoy cansada de su inusual peso y me sorprendo con lo que veo.
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Los hijos Crasfort
RomantikHayley, una chica fuerte, decidida, graciosa, sin intensiones en el amor, más que el sexo casual, conoce a los hermanos Crasfort, cinco chicos perfectamente guapos y millonarios que se interesan en ella para algo más que una sesión de sexo casual. ¿...