Harry ha vivido siete años junto a sus tíos, años en lo que lo único que ha conocido son insultos, golpes, despreció y dolor, mucho dolor.
Ha perdido la infantil esperanza de que alguien lo salve, sin embargo, una mañana aparece un hombre que dice c...
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|°| El cumpleaños de muerte |°|
Harry amaba a su equipo de quidditch, en serio que lo hacía. Eran divertidos y, cuando Cedric o Heidi no podían ayudarles con sus sesiones de estudio, no faltaba algun integrante de ellos que se animará a hacerlo, peeeero, eso no evito que pensará en dejar un escarbato en cada uno de sus dormitorios para que se los destruyera y les robará todo lo que les pareciera brillante, tal vez dos para Heidi quien fue la que tuvo la osadía de entrar a su dormitorio e interrumpir su muy sagrado sueño libre de pesadillas y libre de la realidad donde tenía que esconderse de Lockhart y Creevey...
Habían sido unos días incomodos para el azabache, entre el profesor intentando tomarle del hombro a todas horas y darle consejos de "fama", más el pequeño Gryffindor, que comenzaba a asustarle con su exagerada admiración...
Dejando eso de lado, no podía creer que estuviera siendo arrastrado por todo el equipo hacia el campo de Quidditch, ni siquiera había salido el sol de todo. ¿Qué les pasaba?, Cedric, que parecía haber sido despertado también, le dio una mirada de disculpa mientras Heidi los jalaba a ambos, siguiendo a Malcom Preece, uno de los golpeadores y Tamsin Applebee, el capitán.
—¿Quieren espiar el entrenamiento de Gryffindor? —preguntó con un deje de indignación cuando se vio arrastrado debajo de las gradas.
—¡Oye! Mhsmh — Cedric le tapo la boca a Heidi, evitando que gritara y fueran descubiertos.
—Me creo un capitán muy capaz, gracias. No necesitamos de esas tácticas sucias— se ofendió Applebee.
Harry no pudo evitar alzar una ceja en su dirección, viendo de a él al campo de Quidditch donde se podía ver al equipo de los leones reunidos.
—Escuche a Flint decir que les iba a arruinar el entrenamiento a Wood y...
—¿Nos trajeron porque quieren ver una riña entre ellos? —la voz indignada de Cedric detuvo la explicación de Preece.
—No, el menciono que.... Shh mejor vean ustedes, no puedo creer que el rumor sea cierto, estamos jodidos.
Todos los de equipo dirigieron sus miradas al campo y vieron llegar al equipo de Slytherin, Harry no entendió del todo a que se refería Heidi hasta que esta le extendió unos binoculares y ver a 7 Nimbus 2001 hizo que su deseo de meterles un escarbato a cada uno, disminuyera.
—¿qué les pasa?, pueden tener incluso un dragón con ellos y ni así podrían superar nuestra táctica de equipo y, —Cedric le paso el brazo por lo hombros— al mejor buscador del Hogwarts. Ustedes saben que no me gusta hablar mal de nadie, pero es claro que Harry no necesita de una mejor escoba para derrotar a Malfoy, quien como pueden ver, se tuvo que comprar el puesto.
—Eso, eso. Tienes razón, hablare con la profesora Sprout y comenzaré a apartar el campo de Quidditch en cada oportunidad que tengamos. Pueden regresar a dormir o lo que quieran.
