Fuiste un Error |Tom Hiddleston| [EN EDICIÓN]

27. Positivo O Negativo.

Todo estaba saliendo como lo estaba queriendo, como lo había pensado.

Mi departamento ya estaba completamente en orden, Harry me llevó de compras por lo que faltaba y comida para llenar la gran nevera que ahora estaba en mi cocina. Las dos habitaciones extra ya estaban listas también, y la mía estaba casi igual a como la tenía antes.

Había ya hecho el pago total de mi departamento, ahora que por el momento no compraría un auto, podría ocupar ese dinero para pagar el costo total del departamento y aún  sobraba un poco más en el banco para gastos y pagos a futuro. Ya tenía mis escrituras e incluso planeaba invitar a mamá próximamente a quedarse conmigo y a Henry si le permitían sus horarios.

También realicé una visita al hospital el viernes, me entregarón mi credencial de acceso y mis uniformes además de mi equipo medico, estetoscopio, baumanometro, termómetro, oximetro y  glucometro, que eran para mi uso personal y tener siempre conmigo. Y un kit completo extra para cuando este en el hospital.

Había conocido de forma rápida a la jefa de enfermeras del área de cardiología, nos presentamos de forma rápida y me dio una bienvenida digamosla cálida.

Durante el fin de semana terminé de ordenar por aquí y por allá en el departamento y trataba de descansar lo más que podía.

No había salido con Harry, ha tenido días ocupados en el hospital, así que me siento libre en la comodidad de mi nuevo departamento. Estaba sentada en la sala, mirando una película en la la televisión mientras que avanzaba la noche. Abrí una bolsa de papitas que había comprado mientras avanzaba la película. Me sentía un poco nerviosa por iniciar mañana a primera hora mi nuevo trabajo, con mi primera guardia de veinticuatro horas.

Ya tenía el uniforme listo en un gancho y los tenis limpios. Una chamarra por la hora en la que entraba y un bolso donde mañana mismo dejaría en mi casillero lo mismo que tenía en el hotel. Toallitas húmedas, desodorante, cepillo dental, pasta, una cosmetiquera pequeña, cepillo, y ligas para cabello. Otro uniforme limpio por si llegara a ensuciar el que llevaba puesto. Todo estaba listo.

Me levanté del sofá apagando la televisión, llevé la bolsa de las frituras y la cerré con un ganchito especial que vi en el supermercado y lo guardé dentro del alacenero. Tomé la aspiradora de mano y la pasé rápidamente por el sofá, acomodando los cojines y apagando la luz para ir directamente a la habitación.

Me pusé el pijama luego de hacer mi rutina de noche, abrí el edredón y prendí las luces que colgaban de la cabecera de la cama, las cuales fueron un detalle de Harry para que tuviera una luz al dormir.

Apagué la luz general de la habitación con el apagador que está aún lado de la cama y me acuné dentro de la sabana quedando profundamente dormida.

Desperté por el sonido del despertador, eran las cinco de la mañana del lunes, de una nueva etapa que tanto había anhelado. 

Me levanté sin mucha vuelta y me senté en el borde de la cama.  Tallé ligeramente mis ojos y pestañé para acostumbrarme a la luz cuando la encendí. 

Me levanté quitando el edredón, las sábanas, y las almohadas para comenzar a acomodarlas. 

Había dormido tan cómoda éstos  últimos días, la calefacción ayuda mucho a que la habitación se mantenga calentita por las noches. Coloqué las sábanas, y luego el edredón, las almohadas y por último los cojines de decoración. Levanté mis pantuflas y me adentré al baño directamente a tomar una ducha. Los departamentos funcionaban por medio de caldera, así que había agua caliente para usar prácticamente todo el día.

Tomé un baño, no prolongando el tiempo como a veces suelo hacerlo,  pero no tan corto, de forma que me sentía cómoda. Exprimí un poco mi cabello y pasé la toalla por mi cuerpo hasta secarlo y después coloqué una bata.