Mónica
La resplandeciente luz de la bombilla me hizo abrir los ojos viendo a Melanie en la entrada.
—Son las doce y media de la tarde tienes que ducharte
No quería y no tenía ganas de levantarme.
—No me siento bien
—¿Que te duele?
Más bien que no me duele.
—Hagamos algo. Si te levantas y te duchas te dejare salir del cuarto
Inmediatamente me quite la almohada de encima para verla a la cara.
—¿Me dejaras salir?
—Solo a la sala
{Eso es un avance}
Cojeando me levanté de la cama y con ayuda de Melanie fui al baño. Me duche y mientras lo hacía no puede evitar pensar en aquella persona con la que hable por la puerta.
{¿Habrá llamado a Natasha?}
Me asusté mucho cuando aquel vestía llegó a mi cuarto. Pensé que había descubierto la conversación que tuve. Pero parece que no ya que no lo menciono siquiera.
Lo que más me abruma de todo esto es que no sé si ya Natasha sabe de mi paradero, quiero pensar que si, tener esperanza. Pero si supiera ya estuviera aquí con toda la puta policía.
{Creo que aquel chico se arrepintió}
—¡Mónica!, ¿ya terminaste?—Gritó Melanie del otro lado
—Ya casi
Salí del baño con una toalla alrededor de mi cuerpo. Regrese a mi cuarto donde me cambié de ropa a un vestido verde.
—Las últimas semanas de este mes has dejado de gritar y comportarte agresiva podrás comer conmigo en la cocina, pero—Se detuvo y me observó atentamente—No puedes salir de aquí
—Entiendo, solo comeré y nada más
Melanie abrió la puerta dejándome salir primero, me guío hasta el fondo del pasillo donde tal y como lo había imaginado está la sala junto a la cocina y algo que atrapó mi atención.
Una puerta metálica.
{Esa debe ser la salida}
ESTÁS LEYENDO
Mafia Rusa {editando}
RomanceQue resuene en las calles, que murmuren de boca en boca. Que en el infierno y cielo se escuche. El Boss de la Mafia Rusa tiene una debilidad con nombre y apellido: Mónica Méndes Herrera. ¿Quién diría que el diablo se enamoraría de un Ángel?. Uno a q...