Mi Turno

Mi Turno. 12.

- No puede ser que yo me haya hecho una película en la cabeza...

- RENJUN RENJUN RENJUN... POR FIN DESPERTASTE, POR FIN, MAMÁ VA A ESTAR MUY CONTENTA CUANDO SE ENTERE- recibí a mi hermano con un gran cariño y entusiasmo.

- Creo yo que estoy viviendo en una realidad paralela... Es como si nada de esto estuviera pasando y yo...

- Olvida eso, pues tío Min ya dio a luz a un niño y también es doncel, es un mes y 9 días más chico que Eric, por cierto, está cada vez más hermoso- lo miré con alegría y nostalgia.

- ¿Mi hijo?- asintió y siguió sonriendo y yo me puse a llorar.

- Sé que quieres estar con tu hijo, lo sé pero debes recuperarte para poder ir a verlo y estar con él, mira mamá me la mandó ayer, mira- me entregó su teléfono y miré una foto que tenía en el teléfono, lloré más.

Es mi hijo... Mi pequeño hijo, cuanto lo extraño, cuanta falta me hace mi hijo, no quiero ni puedo vivir sin él.

- Quiero ir a Osnova, no importa si no me dan autorización para viajar, iré a ver a mi hijo- seguí llorando.

- ¿Porqué tienes chupetones y marcas de dientes por todo el cuello?- llevé mis manos a mi cuello y lo miré con miedo.

- No sé de que me hablas...

- Renj...

- Mi amor, vamos a cenar... ¡Oh! Qué sorpresa verte, Mingyu, ¿quieres cenar con nosotros?- mi hermano solo negó y suspiró.

- Gracias por la invitación Jeno, tengo cosas que hacer, me iré ahora- se fue sin mirar atrás, suspiré y dejé que Jeno me abrace.

- Quiero ir a Osnova, quiero estar con mi hijo, no importa si no me dejan ir, yo iré- me abrazó más y dejó un beso en mi cabeza.

- Dentro de una semana nos iremos a Osnova, también quiero estar con mis hijos, Jaemin está allá y Eric... Mi pequeña Adara, también junto a tus padres, así que mañana vamos a la consulta y hablaremos con el doctor- asentí pero no me siento aliviado, me siento muy mal, nervioso.

- No tengo hambre, vamos a dormir, cuanto antes durmamos, antes amanecerá- Jeno se rió y me llevó a la habitación.

Nos quedamos dormidos, hasta que la alarma de Jeno sonó y poco a poco me fui despertando, el también despertó y nos metimos a bañar, ambos nos arreglamos y nos dirigimos a su auto para poder ir al hospital.

En todo el camino rumbo al hospital, me tomó de la mano, y varias veces dejaba besos en el dorso de mi mano, la acariciaba y me volteaba a ver, me sonreía y yo no sé por qué, pero le devolvía una sonrisa.

Así fue todo el trayecto, hasta que llegamos al hospital, se estacionó, nos bajamos y nos adentramos para poder ir con la recepcionista, quien nos indicó a dónde ir, sin problemas.

Cuando llegamos, esperamos a que nos llamen y entonces... Sentí un Deja Vu, sentí que todo daba vueltas a mi alrededor.

- Buenos Señores Lee... Soy el doctor que lo atendió mientras estaba en coma, Señor Lee, soy Harvey Cantwell y seré su doctor de... cabecera- notó mi nerviosismo.

- Gracias doctor- contestó Jeno.

- Bueno comencemos...

Empezó a revisarme y a preguntar una serie de cosas que contesté por inercia, me mandó a hacer una tomografía y me llevaron a ese laboratorio o lo que sea, tardaron un poco, pero en cuanto regresé, había una tensión entre Jeno y el doctor.

- Sería todo por hoy, regresen mañana para...

- No podemos mañana, porque ya le comenté que nos vamos, doctor fue un placer conocerlo y gracias- miré al doctor a los ojos, eran los mismos que en mis sueños, bajé el rostro y dejé que Jeno me lleve de ahí.

Nos subimos al auto sin decir nada, lo observé y suspiré, no sé por qué pero tomé su mano y le sonreí.

- No estés tenso, mañana iremos con nuestro hijo, no quiero que te vea así, quiero que te vea feliz, como eres a su alrededor, por favor- me sonrió y dejó un beso en el dorso de mi mano.

Cuando llegamos a su departamento, me sentí aliviado, no quiero pelear con Keonhee, me estresa, cuando entré a mi nueva casa, Jeno solo me abrazó y dejó un beso en mi mejilla, para después irse.

Suspiré y me dirigí a la cocina para hacerme un café, pero ni di dos pasos a la cocina, cuando el timbre sonó, mi mente trajo a Jeno de repente, tal vez olvidó algo, así que fui a abrir pero me topé con ese médico.

- RenJun, hola, buenos días- no quiero estar cerca de esta persona, me pone mal recordar lo que sentí vivir en mi estado de coma.

- Buenos días, doctor, ¿se le ofrece algo?- asintió y me miró con tristeza.

- ¿Puedo pasar?- me hice a un lado para darle acceso a mi casa, pero su mirada en mí me pone nervioso.

- ¿En qué puedo ayudarle?- me tomó de la mano como lo hizo Jeno unos minutos antes.

- Tu esposo te aleja de esta ciudad, no quiere que te recuperes, quiere que te vayas a otro país... Alejarte de toda tu familia, de mí- quité mi mano de sus manos y suspiré fuerte.

- Mi familia no está en este país, toda mi familia está en mi país, no veo lo malo, ya sabía que nos vamos, yo se lo pedí a mi esposo- me miró asombrado y desconcertado.

- ES QUE NO TE PUEDES IR ASÍ SIN MÁS, Y NO PUEDO DEJAR QUE TE VAYAS, TE LO PROHIBO- me tomó por los brazos y me miró desconsolado, me apretaba su agarre.

- YA SUELTEME, ¿QUIÉN LE DA EL DERECHO DE VENIR A MI CASA A DECIR TODO ESTO? ¿PROHIBIRME USTED ALGO? NO DOCTOR, NO SÉ QUIÉN SE CREA NI QUE DERECHO SE TOMÓ PARA VENIR A MI CASA A DAR ÓRDENES, VÁYASE DE INMEDIATO- me miró dolido pero me soltó.

- Soy tu médico, y tal vez sea yo quien te libre de ese hombre que te oprime, yo veía tu reacción aún estando en coma, cuando él se acercaba a ti- negué con la cabeza que ya me empezaba a doler.

- Mire doctor, váyase y déjeme en paz, lo que yo quiero o quiera mi esposo no es asunto suyo. Usted no sabe nada, así que déjese de jueguitos y larguese- él me de una manera indescifrable.

- Está bien, nos veremos de nuevo. Mi pequeña Barbie- con eso último salió de mi casa, dejándome con una sensación de miedo por todo mi cuerpo, sentí tan feo que lo único que hice fue azotar la puerta e irme al sofá, estaba demasiado desconcertado, cansado y con la cabeza doliendome horrible, me puse a llorar

Me siento tan cansado de todo esto, de Jaemin, de Keonhee, de Jisung, de todo, sin embargo... Necesito a mi hijo para estar bien, en paz.