El momento en el que te vi

7- Hora de juegos

Después de compartir ese momento íntimo y alucinante con Alessio, Bia y Ryan se nos acercaron.

—A ver tortolitos, ahora van a hacer juegos, ¿os apuntáis?— preguntó Bia

Miré a Alessio preguntándole con la mirada si quería y simplemente asintió con la cabeza a modo de confirmación.

—Vale pues sí, nos apuntamos.— dije.

La gente poco a poco se fue yendo y ahora solo quedaban los mejores amigos de Marco que eran: Bia y un tal Peter.
Bia se quedaba pero con la condición de que se quedaran los amigos íntimos de ella y por eso estábamos aquí y con Peter lo mismo aunque él solo trajo a Antonella, su amiga y la chica con la que hablaba Alessio.

Ella era de pelo castaño brillante, con unas curvas envidiables y una bonita cara refinada. Su figura esbelta era envidiable.

Primero decidieron jugar a la botella con verdad o reto.

Nos sentamos en una mesa redonda, Marco en medio, a su derecha Peter, y al lado de Peter, Antonella.

A la izquierda de Marco estábamos primero Ryan, luego Bia, Alessio que quedaba justo en frente de Antonella y de mí, que yo estaba al lado de Alessio en la esquina.

Antonella que era la de la esquina derecha comenzó. Hizo girar la botella y le tocó justo a... Alessio, obviamente.

—Verdad.— escogió Alessio.

—¿Es verdad que me querías más que solo por sexo?— preguntó con voz chillona Antonella, esperando un sí, porque se notaba a leguas que ella estaba colada por él. Qué pena que ahora no está disponible para ella.

¡¿Pero que digo?! Si no está conmigo

Por poco tiempo

Ya claro, pero la verdadera pregunta es porque me siento así, porque respondo así ante Antonella si no me ha hecho nada.

Porque estás celosa tonta, de verdad que no te enteras eh

¡No! Yo no estoy celosa

Ya

Alessio respondió a la pregunta de Antonella sacándome de mi pelea con mi conciencia.

— No, nunca te quise por nada más que no fuera sexo, te lo dije al iniciar la relación, tan solo quería
despejarme.— dijo cortante Alessio, jamás le había oído hablar así. Era gélido, podría congelar el infierno.

Antonella puso una mueca.

Así que él y Antonella eran algo así como exs, vaya mierda. ¿En que me he metido? Y eso por no decir que Antonella tenía toda la pinta de novia tóxica.

Ahora era el turno de Alessio.

La giró y le tocó a Bia, que escogió verdad, a lo que él le preguntó si estaba enamorada de Ryan, aunque la respuesta era demasiado obvia. Ella dijo que si.

Siguieron dando vueltas y empecé a sentirme invisible porque llevábamos varias rondas y no me tocaba, aunque tampoco me importaba mucho.

Al ver que no me hacían mucho caso, Alessio pensó que me sentía excluida (y en parte era verdad porque no conocía a la mitad de los que estaba allí) y me dió la mano por debajo de la mesa.

De nuevo ese roce me provocó sensaciones únicas y muy potentes, así que le apreté un poco la mano a modo de agradecimiento y cariño.

Entonces Marco giró la botella, yo ya estaba perdida pero... Me tocó a mi.

—¿Verdad o reto Ro?— preguntó amablemente Marco.

Lo tuve que pensar pero escogí reto ya que en verdad me podían preguntar muchas cosas que no podría responder.