LA FINA LÍNEA QUE NOS SEPARA

CAPITULO 45

Linda abrió la puerta de la iglesia haciendo que todo el mundo girara sus cabezas con curiosidad.
-Ada,es ahora o nunca-me miró viendo como mi padre se levantaba dispuesto a echarla de la iglesia.
Miré a Liam y dejé caer el ramo de flores mientras agarraba mi vestido  para echar a correr hacia Linda.
-¡Ada!- gritó Liam detrás de mi.
Pero no le escuché, solo corrí con todas mis fuerzas hacia Linda viendo mi libertad a escasos pasos de mi.
Pero entonces Jacob me agarró del brazo con fuerza obligandome a frenar  hasta que Liam llegó a mi.
Solo entonces me soltó caminando esta vez hacia la puerta intentando ayudar a su amigo a no quedar aún más en ridiculo delante de todo su circulo de amistades.
-¡Cerrad esa maldita puerta y sacad a esa de aqui!- gtitó Liam.
Pero antes de que lo hicieran Luca apareció y sin pensarselo dos veces le propinó un fuerte empujón a Jacob que le hizo retroceder hacia atrás mientras se preparaba posicionandose delante de Linda.
Y fue ese momento el que aprovecho Erick, que tras tocar el brazo de Liam llamando nuestra atención le dio un puñetazo en su cara con todas sus fuerzas.
-¡Como duele!- se rió Erick sacudiendo la mano con fuerza.
-Erick..-susurré viendo como la gente  se comenzaba a descontrolar.
-Corre y no mires atrás- fue lo unico que pudo decir antes de que Liam se abalanzara encima de él.
Con rapidez me levanté el vestido y eché a correr esquivando al resto de personas que estaban encontra de aquello.
Agarré la mano de Linda escuvhando detrás de nosotras el jaleo que habíamos montado y sonreí viendo el coche de Luca aparcado justo en frente de la iglesia.
Linda con rapide abrió la puerta del coche y se sentó al mismo tiempo que yo arrancando de inmediato.
Cuando Liam bajó corriendo las escaleras de la iglesia en un intento de seguirnos, ella pisó el acelerador y se alejó de allí uniendose a los miles de coches que había en la carretera.
-¿Ha donde vamos?- pregunté sin apartar la vista de la carretera.
-Tú a Italia- apartó una mano del volante  y me señaló la parte trasera del coche- los chicos vendrán en otro coche, mientras tanto cambiate para el aeropuerto.
-Pero...
-En ese bolso que cogí prestado de tu casa tienes tu pasaporte y documentación necesaria para salir del pais- terminó de decir mientras yo intentaba pasar a los asientos de detrás- aproveché cuando te estaban maquillando para cogerlo todo.
Me miró desde el retrovisor y esbozó una sonrisa.
-También hay un poco de dinero para empezar de cero porque me imagino que tu padre después de lo que has hecho anulará todas tus cuentas.
Me comencé a quitar el vestido aún con el corazón acelerado, apunto de salir disparado por mi boca.
-¿Y qué voy a hacer en Italia?- pregunté poniendome la camiseta blanca que me había traido- Thomas está aqui y no en...
-Thomas te falló- giró a la izquierda haciendome perder el equilibrio mientras me seguía intentando quitar del todo el gran vestido- me da igual lo que le hubiera dicho Liam o tu padre, jamás tuvo que hablarte de aquella manera.
Tragué saliva cogiendo esta vez el pantalón vaquero.
-Antes de ir al aeropuerto necesito ir a Newham- tras ponerme el pantalón volví como pude al asiento del copiloto- necesito hablar con él antes de irme del pais.
Linda me miró desde el rabillo del ojo y negó con desaprovación, pero sin decir absolutamente nada giró esta vez a la derecha caminó a Newham.
-Tengo la aeguridad de que ahora que no está mi padre y Liam me contará todo lo que pasó.
Ella se quedó en silencio sin saber que decieme mientras yo desviaba la vista hacia la ventanilla ansiosa de llegar a Newham y contarle todo a Thomas.
¿Como reaccionaría al saber que yo ya no tenía absolutamente nada con Liam?
Suspiré viendo como poco a poco iban apareciendo las casa de Newham delante de mis ojos.
-Siempre cabe la posibilidad de que solo haya jugado contigo...-susurró Linda llamando mi atención- solo deja esa opción también en tu cabeza.
-Lo que sentimos Thomas y yo es real- sonreí con nerviosismo- esas cosas se sienten, no se pueden actuar.
Sin decirme nada más frenó el coche cerca del callejón que conducía al bar de los Roth e inmediatamente mis ojos se posaron en la moto de Thomas.
-Te estaré esperando- comentó Linda.
Asentí dispuesta a abrir la puerta del coche, pero entonces Thomas salió del bar entregandole el casco de su moto a Agnes que echandose el pelo oscuro hacia atrás y tras besar uno de los brazos tatuados de Thomas con cariño se colocó el casco caminando hacia la moto.
-¿Pero qué..
Me quedé en silencio viendo como a él se le dibujaba una pequeña sonrisa en el rostro y como ella apoyada en su moto esperaba a que él se subiera.
-¿Esa quién es?- preguntó Linda abriendo los ojos como si de platos se tratasen.
Thomas se colocó el casco y tras subirse a la moto ella le imitó pasando las manos por su cintura como solía hacer yo.
-Arranca..-susurré.
-Pero..
-¡Arranca Linda!-grité.
Ella no tardo en hacerme caso y alejandose de ellos me apoyé de nuevo en el asiento mirando al frente.
-Vamos al aeropuerto..-fue lo único que pude llegar a pronunciar.
¿Thomas estaba con Agnes? ¿Como no pude darme cuenta antes?
Intenté ignorar el nudo que se me había formado en la garganta y agaché la cabeza con el corazón en trizas.
¿Como no pude darme cuenta de que solo me utilizaba mientras que yo como una ingenua caía ante él?
Thomas me había enseñado lo que era el amor, lo que era querer dar todo por una persona sin limite alguno. Me había enseñado a apreciar los pequeños detalles y fijarme en las cosas que yo pensaba eran más insignificantes. Me había enseñado a admirar las estrellas y perderme en ellas por completo durante toda la noche aunque él sin duda era mi estrella favorita en el univero, aún así muy dentro de mi sabía que en algún momento  iba a acabar amaneciendo y que la fina linea que nos separaba iba a volver a aparecer.