Había gente por todos lados, todos ellos bailaban y gritaban en un intento de cantar a los cuatro vientos la música que sonaba en medio de Brighton Beach, la playa que había alquilado mi padre con sus socios para promocionar sus nuevos automóviles.
Con mis pies repletos de arena y olvidándome de la niebla que hacía aquella noche bailaba sin dejar de reírme mientras veía como el ron con fánta de limón que me había preparado una de las camareras caía mojando la arena y parte de mis dedos.
Bebí antes de que me quedara sin nada, y tirando de la mano de Megan corrí esquivando a la multitud uniéndome a las voces que seguían aún cantando a pleno pulmón.
-Tía, tu padre nos matará esta noche -dijo ella cuando apoyamos los vasos encima de la barra del chiringuito.
Seguí cantando, ignorando su actitud mientras me fijaba en como la camarera sin decir nada volvía a llenarnos las copas del mismo ron con fanta.
-Además, no le has comentado nada a Liam -cogió su vaso y le dio un largo trago -y puede que ahora mismo te esté llamando porque no tiene ni idea de donde está metida su novia.
-Olvídate de todo por una noche -sonreí bebiendo de mi vaso -¿Cuanto tienes que beber para que eso pase?
Me reí y tiré de nuevo de su mano volviendo a cantar a pleno pulmón mientras me dirigía a la orilla.
-Ya llevamos.. -se quedó en silencio para romper en una gran carcajada -¿ cuantos vasos llevamos ya?
Me encogí de hombros sonriendo y frené mis pasos dejando que el agua salada de la playa mojara mis pies mientras soltaba un suspiro lleno de satisfacción.
-Vamos a empezar la universidad juntas -cerré los ojos escuchando el sonido de las olas -eso se merece más que todos los vasos que nos hemos bebido.
Me giré abriendo los ojos y mirando a mi alrededor como los demás llenos de collares y pulseras de un amarillo fluorescente bailaban celebrando sus entradas en las mejores universidades de las zonas.
Sentí la mano de Megan apretar la mía con fuerza llamando de nuevo mi atención.
-Hay que disfrutar estos dos meses antes de empezar con la universidad.
Tiró de mi mano en un intento de abrazarme con tan mala suerte que tropecé con la arena y caí en la orilla mojando mi falda rosa por completo.
-Ahora si que nos va a matar tu padre cuando te vea llegar empapada a casa -Megan soltó una carcajada, seguramente ya por los efectos de la bebida, y me tendió la mano sin borrar la gran sonrisa que llevaba dibujada en el rostro.
-Si hubieran venido ancianos a la promoción de mi padre, te juro que ya estaría dormida - la miré agarrando su mano y poniéndome de pie -pero nosotras nos hemos encargado en convertir esto en una fiesta para despedirnos de una etapa, ¿No deberíamos entonces ser las primeras en disfrutar de todo esto?
-Supongo -musitó.
Esbocé una sonrisa y las dos giramos la cabeza al mismo tiempo cuando escuchamos mi nombre entre la multitud.
-¡ADA! ¡ADA!
Una voz nos hizo girarnos para ver como Linda acompañada de un chico que pasaba su brazo por la cintura de ella con total confianza nos saludaban efusivamente.
-Llegas dos horas tarde- se quejó Megan recogiéndose su oscuro pelo en un moño mal hecho mientras sacaba sus pies del agua.
-Este es Luca -Linda se paró en frente de nosotras y le señaló con las dos manos llena de emoción - es Italiano y aún le cuesta entendernos bien pero... -hizo una pausa dramática - creo que me he enamorado.
Megan y yo repasamos al chico esbozando una ligera sonrisa.
Era un tipo atractivo, rondaba nuestra edad en cuanto a apariencia, tenía una sonrisa pícara que le hacía parecer irresistible, y unos grandes ojos verdes que nos miraban detenidamente con algo ode curiosidad.
-Yo soy Ada -extendí mi mano a modo de saludo, pero Linda me empujó con fuerza acercándome más a él.
-Dos besos tía-puso los ojos en blanco mientras soltaba una risilla algo nerviosa -en Italia son más modernos.
Pero el chico como buen Italiano que era, cogió una de mis manos y sin dejar de mirarme a los ojos me plantó un sensual beso en la mano.
-Yo soy Megan -de un choque de caderas me apartó del Italiano y ella misma extendió su mano esperando a que él la besara.
-No tengo mucho tema de conversación con él -linda me miró con un brillo en la mirada -pero tiene lo que les falta a todos estos críos.
Miré de nuevo al chico que aún besuqueaba la mano de Megan mientras ella hacía un intento de comunicarse con él.
-¿Tiene lo que le falta a estos críos?-fruncí el ceño señalandole mientras intentaba realmente no reírme.
Linda avergonzada tiró de la mano del Italiano apartándole así de Megan.
-Son sus costumbres -le excusó.
Miré a Megan de reojo, pero de inmediato volví a centrar la mirada en Linda.
-Yo solo venía a deciros que los amigos de Luca han montado una fiesta en su casa y quería invitaros a ir.
-Por mi genial -sonreí esperando la respuesta de Megan que no tardó en asentir emocionada.
Caminamos por la arena fuera de la playa aún descalzas y busqué con la mirada a Alfred , el chófer que me llevaba y me traía a todos lados.
Después de esquivar a toda la multitud pude verle aparcado al otro lado de la calle mientras miraba el móvil distraidamente.
--¡Ahí está! -elevó el tono de voz Megan intentando llamar su atención.
Sonriendo levanté la mano y crucé la acera dispuesta a dirigirme a la limusina cuando el ruido de una moto me sobresaltó deslumbrandome con sus luces. Intenté apartarme, pero fue inevitable que me rozara el brazo mientras el motorista derrapaba en un intento de frenar obligandole a salir disparado y chocar contra otro coche.
Mis amigas gritaron y Alfred salió de la limusina corriendo hacia mi, pero yo en cambio me quedé quieta, incapaz de mover ni un solo musculo de mi cuerpo.
La gente rodeó al muchacho que yacía en el suelo por mi imprudencia, mientras yo no era capaz de dar ni un paso hacía él.
-¿Está bien señorita Brown?
Miré a Alfred asustada. ¿Acababa de matar a una persona?
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LA FINA LÍNEA QUE NOS SEPARA
RomansaAda es una chica nacida en una de las familias más ricas y poderosas de Londres. En un accidente que ocurre en una noche donde todo parecía ser diversión conoce al que será el verdadero amor de su vida, ese amor que tanto soñaba encontrar cuando tan...