LA FINA LÍNEA QUE NOS SEPARA

CAPITULO 15

Me tumbé en la cama tapando mi rostro con la almohada intentando borrar de mi mente la agresividad y el enfado de Liam.
¿Desde cuando se comportaba así? ¿Le había contado Jacob de nuestro encuentro en Newham?
Suspiré recordando sus frías palabras..¿Como se lo hubiese tomado mi padre si no estuviera de viaje?
De inmediato me quité la almohada del rostro viendo como la puerta de mi cuarto se abria de golpe y entraban Linda y Megan con semblante serio refunfuñando entre ellas.
-Liam ayer apareció por nuestras casas- Megan fue la primera en dar un paso hacia mí- y al menos yo no supe decirle donde te encontrabas.
Me incorporé mirándola con atención.
-Por otro lado- esta vez señaló a Linda- ella le dijo que si te encontrabas en su casa y..
-Jamás pensé que iba a entrar a la fuerza a buscarte- se defendió Linda acercandose a mí-  estaba como loco, jamás le había visto igual.
-Nosotras- Megan caminó detrás de ella- que somos tus amigas no sabiamos donde estabas ¿entiendes la gravedad del asunto?
-Yo...
-¿Desde cuando nos ocultas las cosas?-Megan se sentó a mi lado aún con enfado.
Desde que las había conocido el primer año de instituto, jamás nos habiamos ocultado nada, es más, nos habiamos sentido tan conectadas desde el principio que fue como si en otra vida ya nos hubiesemos conocido, y no hizo falta mucho para contarnos hasta nuestros mayores secretos.
Y aunque a Megan ya la conocía desde años antes de ir al instituto, cuando conocí a Linda sentí exactamente la misma conexión.
-¿Donde estabas, Ada?- volvió a preguntar Megan.
-Fui a Newham-confesé agachando la cabeza.
-¿Has vuelto a ver al motorista?-se entusiasmó Linda.
Asentí.
-Dios mío Ada, si Liam se hubiese llegado a enterar esto habría acabado en tragedia-Megan se puso de nuevo de pie llevandose las manos a la cabeza sin dar crédito.
-No es lo que piensas- me levanté de la cama y la agarré del brazo obligándola a mirarme- fui a cenar con Liam y me presentó a sus amigos, amigos que no me parecieron de fiar y..
-¿Y fuiste a Newham para...
-Jacob, el amigo de Liam, ha ese chico lo había visto cerca del bar, del bar de Thomas y..
-Ahora el delincuente tiene nombre-Megan se apartó de mi poniendo los ojos en blanco.
-No es un delincuente-le defendí inconscientemente.
Las dos se quedaron en silencio mirándome con atención.
-¿Acaso le conoces de algo?- el enfado de Megan cada vez iba a más- es un delincuente que acabará en la cárcel tarde o temprano.
-Megan, también puede ser un chico que...
-¡¿Vas a apoyarla?!-gritó Megan interrumpiendo las palabras de Linda-¡¿Vas a apoyar que se vea a escondidas con un delincuente que solo quiere sacarle el dinero?
Linda se quedó en silencio mirándome fijamente.
-Haz la prueba- Megan se acercó de nuevo a mí- deja algo de valor cerca de él y te darás cuenta tú misma.
-¿Algo de valor?-pregunté.
-En cuanto te gires se lo llevará para venderlo por ahí y gastarse el dinero en sus vicios- me fulminó con la mirada recordándome a Liam- esa es otra, seguro que tendrá más vicios de los que puedas tú llegar a conocer.
-Deberías apoyarme y no decirme..
-¿De verdad estás dispuesta a dejar a un hombre como Liam por ir detrás de un motorista que no tiene ni donde caerse muerto?-me interrumpió caminando hacia la puerta- piensate mejor las cosas, pero como Liam vuelva a venir a mi casa, te juro que le contaré todo lo que sé.
De un golpe cerró la puerta.
-¿Te gusta ese tal Thomas?- Linda se levantó de la cama y caminó hacia mí con preocupación.
-No-dije poco convencida- solo quería saber que escondía el amigo de Liam.
-¿Le viste en Newham?-preguntó.
Asentí volviendo a la cama mientras volvía a desviar la vista hacia la ventana para ver en la lejania como el sol empezaba a esconderse detrás de las grandes casas de la zona.
-Vi como amenazaba a Thomas- me giré esta vez para clavar la mirada en ella- y como sacó una navaja para intentar hacerme daño.
-¿Esto lo sabe Liam?
Negué con la cabeza.
-Si lo llega a saber...-me quedé en silencio sin saber qué pensar ya de él.
Antes de que pudiera decirme algo más, el móvil de Linda comenzó a sonar sobresaltándonos.
-Luca está abajo esperándome- me miró sin sacar el movil de su bolso, y acercandose a mi me plantó un beso en la mejilla- no puedo quedarme más tiempo.
-¿Tenéis planes?-pregunté.
-Va a presentarme a su hermana que acaba de llegar a Londres-contestó caminando hacia la puerta- la relación progresa.
La abrió sin dejar de mirarme y tras lanzarme un beso con la mano desapareció dejandome de nuevo sola.