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☎𝑨𝒎𝒊𝒈𝒐𝒔☎

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【𝑺á𝒃𝒂𝒅𝒐, 23 𝒅𝒆 𝑱𝒖𝒍𝒊𝒐 𝒅𝒆 1978- 12:15 𝑷.𝑴.】

Habíamos llegado a la heladería, cada uno pidió su helado. Finney pago el suyo y el de Gwen, Robin el suyo y yo tuve que pagar el mío y el de Bruce.

Ahora estábamos en el parque, sentados en el suelo mientras charlábamos— Yo creo que algún día habrá una invasión de zombies — Hablo Bruce, comiendo su helado de Vainilla— Quiero decir, que los muertos saldrán de su tumba y nos querrán comer.

Oh, si, yo también lo creo— Gwen estaba sentada a su lado, no dejaba de verlo, incluso desde antes de que comenzara a hablar— Sería muy cool que el mundo terminara de esa forma, ¿No crees?

Ambos comenzaron una charla del fin de mundo y una invasión zombie, Robin de vez en cuando aportaba algo. Finney y yo somos los únicos en silencio

Lamento si te sentiste obligada a invitarnos, seguramente esta era una salida a solas con Bruce— Finney hablo, aprovechando que los demás no nos prestaban atención.

Oh, no te preocupes por eso Finney— Mantenía mi mirada en el helado, intentando que lo derretido no cayera en mis manos— Me gusta salir con más gente además de Bruce y hacer nuevos amigos.

¿Amigos?— Deje de ver mi helado para verlo, el tenía el ceño ligeramente fruncido— ¿Tú... quieres ser mi amiga?, ¿De verdad?

Por supuesto!— Le sonreí, el me devolvió la sonrisa— Podríamos ser buenos amigos y salir todos— ambos volteamos a los demás al oír sus risas.

¿Cómo un grupo de amigos?

Como un grupo de amigos— Asentí, nos quedamos en silencio de nuevo oyendo la no tan normal conversación de los otros tres.

. . .

Hace unos minutos habíamos terminado nuestros helados, seguíamos en el parque hablando—¿Alguien más tiene hambre? —Pregunto Bruce —____ tiene comida, podríamos ir a su casa a pasar el rato— Propuso, ¿Y este que se cree invitando a gente a mi casa?

Oye! Si vas a invitar que al menos sea tú casa— Arranque algo de pasto y se lo lance— Pero bueno, si quieren podemos ir y hacer.. algo—Me levante del suelo y sacudí mi ropa.

¿No te molesta que vayamos?

No, claro que no, vamos!

No, no me molesta— Mire mal a Bruce por responder por mi, el solo me sonrió y se fue a buscar su bicicleta que estaba apoyada en un árbol.

Bien, vamos— Robin se levanto y ayudo a los dos hermanos a pararse— ¿En tú casa puedo llamar a mi tío? para avisarle que estoy de una amiga— Pregunto.

Claro, cuando llegamos todos llaman a sus casas para avisar— Comencé a caminar junto a Gwen hacia mi casa, los demás me siguieron, menos Bruce el nos alcanzo un poco después en su bicicleta.

☎𝑻𝒆𝒍𝒆𝒇𝒐𝒏𝒐☎Robin ArellanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora