Lady MoonStar ◇ ▪︎WheeByul▪︎

Afilando las garras

En tus paredes rojizas cuelga el peso de marcos con nombres pasados y rostros que se desvanecen. Historias cortas dentro de tu larga vida, no destinadas a seguir para siempre.

Algunos dejarán atrás mal sabores y presencia fantasmal que no son un souvenir. Causándote miedo de volverte a enamorar -pero enamorándote.

Porque la esencia de quien será tu amor verdadero -cuando al fin encuentras- purificará y liberará tu existencia de todas las cargas que perturban tu corazón.

-Clairel Estevez

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Con el precioso único testigo de este sagrado pacto de los hombres en su mano, Wheein se dejó conducir al interior de la habitación donde el resto de sus escasas ropas fueron arrancadas y destrozadas igual que lo fue su pantalón antes de la bienvenida interrupción; antes de la marca su cuerpo acababa de tomar costumbre a lo que realmente significaba darle cavida al exceso del placer sin descanso, en el después simplemente se sentía insaciable todo el tiempo.

Podía recibir la fuerza y vigor de las manos de Moonbyul en todo su cuerpo sin cesar, podía sentirse en control bebiendo de su amada hasta saciarse, y definitivamente amaba la parte de ser crucificada con ambas manos de ByulYi entrelazando sus dedos y poniendo todo su peso sobre ella.
Su piel desnuda cubierta de un fina capa perlada de sudor, su cabellera roja enmarañada y ondulada por la humedad.

—¿Sigues ahí?— Preguntó Wheein

Pregunta, y a la vez frase de seguridad cuando veía a Moonbyul rayar peligrosamente cerca de perderse en sus instintos. ByulYi jamás lo permitió con Wheein como en el pasado no lo habría ni considerado; a Wheein no deseaba causarle ni una pizca de dolor, incluso si eso sacrificaba parte de sus antiguas malas costumbres.

—¿Es posible?
—Mm...— Moduló Wheein tirando de los hombros ajenos y atrayendo el cuello de ByulYi a sus labios

Leía en su pensamiento la latente preocupación sobre el tema del hipotético embarazo. Los pensamientos de la mayor se hacían más confusos mientras los labios y lengua de Wheein dejaban dulces besos en la piel bajo la oreja izquierda de Moon.

—Wheein-ah...
—Shss...— Le calló empujándola hacia atrás

ByulYi cayó sobre la alfombra al lado de la cama y Wheein se sentó a horcajadas sobre su cadera; besaba su cuello, lamía el la línea de su clavícula y dejaba pequeñas mordidas enrojecidas en el camino.

—Trataba...— Un gemido detuvo el diálogo de ByulYi —...Mierda... Wheein-ah, trataba de decir algo
—Yo trataba de interrumpirte

Wheein llevó la mano contra el delgado, pero fibroso cuello de Moonbyul obligandole a estirar la cabeza hacia atrás. Deslizó el muslo izquierdo detrás de la pierna derecha de ByulYi y empujó su cadera contra la ajena; un prolongado y suave jadeo le indicó estar frotando el lugar más lleno de extasis de Moon para ese momento.

—Wheein e-esto es... import-tante
—Lo sé, mi vida— Wheein apoyó los brazos contra las costillas de ByulYi
—Aaaa es que... no me dejas pensar...
—No quiero que pienses— Wheein guió las dos manos de ByulYi hacia su pecho, indicándoles sujetar fuerte y firme sus ambos —Quiero que me sientas