No te olvides de mi

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<< Tengo algo que contarte>>

Tal como lo había dicho Jinx no paso más de una noche en esa casa, ni siquiera estaba en el desayuno, desapareciendo sin despedirse o dar alguna señal de que hubiera estado allí.

Caitlyn le había dado uno de los avisos para que lo mandara cuando estuviera lista, así que se preparó para ir a hablar con su amigo.

Vi la despidió en la puerta, con una sonrisa apagada y dando vuelta sin emoción.

Caitlyn estuvo en conflicto todo su camino, pero jamás lo interrumpió.

...

Jinx espero en el escondite, ambos sabían dónde encontrarse, ya habían estado allí por varias noches. Estaba agradecida que la magia de los rastreadores no hubiera llegado hasta este lugar.

—¿Jinx? —La peli azul alzó su mirada apenas noto a Ekko entrar.

—Ekko—Diferente a su actitud normal esta vez corrió hasta él, abrazando su cuerpo con fuerza.

—¿Qué pasa? —La mano del Firelight paso por su espalda–¿Estas bien? —Ella asintió, separándose de este para dedicarle una sonrisa.

—Lo estoy. —sujeto sus manos— ¿Pensaste lo del acuerdo?—Ekko sonrió

—primero tenemos que escuchar tus términos y condiciones.

—me parece justo—se burló para después apagarse lentamente, perdiendo su mirada en el suelo.

—pero no es para eso que estamos aquí... ¿Verdad? —Jinx le devolvió la mirada.

Rayos... Seguía sin saber cómo lograba hacer eso, como siempre adivinaba cada cosa que pasaba en su mente.

—Tengo... Algo que contarte.

...

—Me estás diciendo que Jinx fue ayer a tu casa a decirte todo esto... ¿Enserio?

Caitlyn asintió.

—y no se... ¿No pensaste en atraparla? ¡Estamos haciendo todo esto por ella Caitlyn!

—No podía simplemente saltar encima de ella Jayce—contestó la mujer

—Por dios, sé que es tu cuñada, pero no podemos ser condescendientes con esta estupidez.

—¿te parece que estoy siendo condescendiente? Si lo fuera ni siquiera estaría en este lugar diciéndote esto. —respondió—Nunca le hable como un familiar, estoy hablándote como la Sherif de Piltover al consejero Tail's.

—Pidió más de un año—respondió el hombre—¿Que vamos a quedarnos esperando que destruya toda la capital solo para poder atraparla? Esto es una locura, una verdadera estupidez.

—Te estoy hablando enserio Jayce, es nuestra única esperanza de no provocar una guerra contra Zaun. La magia no debería seguir haciendo esos desastres, ni siquiera has visto lo que hacen tus rastreadores.

El concejal se volvió hacia su amiga.

—Hace tiempo deje de tener compasión por Zaun.

—Entonces hazlo por sus habitantes—Caitlyn golpeo la mesa. —Quieres atraparla lo harás, ahora solo tienes que ser paciente y cumplir la parte del trato.

—¿qué me asegura que ella cumpla su parte? —Caitlyn se quedó en silencio frente al escritorio, sosteniendo su peso contra la madera pulida.

—Yo... Yo seré tu seguro.

—Caitlyn...

—Si Jinx no cumple su palabra, renunciare a mi puesto de Sherif de Piltover. —los ojos azules de Caitlyn se clavaron a él con decisión.