No te olvides de mi

20

<<Mentira>>

—Si sigo en esa cosa una sola hora más voy a tirarme al rio—Gruño la joven cerrando la puerta tras de sí.

Solo habían pasado unos cuantos meses y en realidad, estaba a punto de irse a la mierda.

Presentaciones, un asco.

Nuevas personas, una estupidez.

Estúpidas clases de inicios y manuales Firelights, una pérdida de tiempo.

Socializar, un fracaso rotundo.

Escabullirse resultó un buen escape.

—Deja esa actitud pretensiosa—Uno de sus compañeros, un castaño alto y corpulento— No todos estuvimos hace años, si te trajeron aquí es por algo.

Se mordió el labio para no soltar que en realidad ella no había Sido traida.

En realidad, Raice no era mal tipo—Bueno definitivamente no era bueno para ella— Pero era bueno en lo que cabe. Traído como un refugiado huérfano se apoyó en sus amigos, dispuesto a aprender de los Firelights, seguir órdenes y terminar ayudando a Camile—La cocinera— a servir la cena.

Pero no cabía duda de su choque contra la peli azul. Por supuesto más que nada por su gran atracción por el reaprendizaje.

—No dejes ese libro botado—Hope fijo su mirada molesta contra el castaño—La señorita Rose los dejo para que lo leamos.

—Ya lo leí—Respondió molesta, odiaba su actitud arrogante.

—No todos aprendimos a leer rápido, algunos estamos leyéndoles al resto. Así que podrías hacer lo mismo.

—No tengo ganas—Gruño. El complejo de Hope se llevaba más que en nada en el hecho de saber leer con gran facilidad mentalmente, pero a la hora de hacerlo en voz alta... —Ni siquiera estaba en el suelo. —Volvió a señalar el libro.

—Si no lo querías lo hubieras puesto en la pila de libros del otro salón.

—Iba a hacerlo más tarde.

—¿Sí? ¿Cuándo?

—Que te valga madres—Gruño molesta para levantarse de la esquina y pasar por el lado del joven, cerró la puerta de un portazo antes de salir.

—¡Si vas a hacer una rabieta por lo menos hazlo en voz baja!—escucho el grito tras suyo, haciéndola enojar aún más.

Habíamos llegado al mismo punto.

¿De qué le servía leer un libro que ella misma vio escribir, una y otra vez? Su padre le contó la historia hasta para dormir.

Se sabía el inicio hasta el fin, ella misma era parte del estúpido libro en la sección: "El líder y su legado" libro que seguramente estaba escondido en una parte de la oficina de su padre por vergüenza que le daba tener uno dedicado a él.

Bien, si su padre quería que hiciera eso, estaba aún más loco que el resto del sumidero.

Suspiro derrotado.

En realidad, no sabía qué hacer.

Si antes en una estúpida escuela piltie no sabía de dónde era, ahora estaba aún peor.

Por supuesto, la Zaunita en medio de tantas personas ricas y con poder, futuros brillantes y acreditados.

Ella también hubiera pertenecido a ese lugar con una suerte sorprendente y lógica considerando la interacción de su padre y el profesor Heimendinger.

Por supuesto ella no era una niña superdotada que fue elegía por obra y gracia de la vida.

Eso era parte de la mentira.