UN GUSTO RARO

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ELISA

-Hola - dijo Fernando

Lo mire sin respuesta alguna de mi parte.

-¿Te comió la lengua el gato o qué? - dijo sarcástico

-No , simplemente no quiero hablar contigo

-Pues no tienes que hablar , solo escucha - dijo caminando a mi lado -esta tarde , la hora que quieras , en la heladería.

Me detuve para observar mejor , con sus enormes ojos azules.

-¿Para qué? ¿me piensas conquistar?

-No

-Me estás pidiendo una cita , ¿te das cuenta de eso?

-Si , pero no es para conquistarte , solo quiero ser tu amigo , ya sabes.

-¿Y por qué mejor no hablamos en la escuela?

-Porque tienes un guardaespaldas - dijo refiriéndose a Einar - Al menos di que lo pensaras

-Lo pensaré.

Ambos llegamos al mismo tiempo al aula , las mujeres me veían como si me quisieran matar para luego regresar la mirada a Fernando. Voltee los ojos.

¿Lo iba a pensar? no

-¿Desde cuándo fumas? - le preguntó Isabel a Einar

-Como que hoy desayunamos payaso ¿no? - dijo Einar quitando su inhalador de su boca

Veía pasar a los alumnos somnolientos , con la playera al revés y una con pasta dental en la camisa.

Observe a los pájaros que se posaban en las ramas de los árboles y hasta lo alto del árbol estaba una pareja de aves , juro que esos dos me seguían a todas partes , y un bebé , un polluelo , ¿será su hijo? , quien sabe.

-Bien jóvenes - dijo aquel profesor de matemáticas con los lentes de fondo de botella - abran sus libros en la página 99

La verdad no le preste mucha atención a la clase , de hecho a ninguna clase , solo me dedico a apuñalar la goma con mi lápiz , son muy aburridas las clases sobre todo porque eso ya lo sé , ecuaciones , matemáticas , lenguaje , todo eso ya lo sé , es muy fácil de resolver.

Cambiamos de clase y todos subimos silenciosamente las escaleras.

-¿De qué hablabas con Fernando? - me pregunto Karla con una sonrisa de oreja a oreja

-De nada - respondí mirando hacia abajo para verla a los ojos

-Los vi , entrar , a los dos , juntos

-¿Y qué? he visto miles de hombres en mi vida como para enamorarme de ese

Me miró unos segundos antes de sonreír.

-Yo sé de quien si te vas a enamorar - me dijo inocentemente

Se fue dejándome con la palabra en la boca , regrese mi vista al frente.

-¿Ya lo pensaste? - me pregunto Fernando

-¿Por qué tanta insistencia?

Él se encogió de hombros.

-Ni yo sé - dijo mirándome -bueno , me dices en la salida.

Cada quien se sentó en un lugar diferente.

En las siguientes horas me quedé pensando en su propuesta , voltee hacia la ventana notando que las ramas estaban solas. Parece que Fernando espanta las aves.

En la salida de la escuela Fernando me volvió a preguntar sobre su propuesta a lo cual acepté por demasiada insistencia y además me dolía la cabeza, no quería volver a escuchar su maldita voz , aunque fuera ronca y grave , te daba dolor de cabeza.

ÁRBOLES CON FRUTOS DE AMORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora