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Jungkook estaba teniendo serios problemas. Todo lo que había acumulado de trabajo lo estaba colapsando y no tenía ni siquiera oportunidad de recostarse a ver la televisión o alguna noticia. Solo quería terminar todo cuánto antes para poder desligarse de la empresa y continuar libremente con la empresa que había creado con Jimin.

Aún seguía sin tener noticias de él, el pelinegro estaba fuera de su radar y decir que esto no lo estaba matando sería una total falacia. Se había enamorado del chico, eso no tenía otro nombre, su corazón latía fuertemente cuando sus pensamientos se iban en su dirección. Park Jimin lo había enamorado y se había llevado su alma con él.

Lo único que lo motivaba era él, dejar su pasado y buscarlo, demostrarle que por cualquier razón de su ida Jungkook sí lo quería con él.

El teléfono en su mesa empezó a sonar sacándolo de sus muy recurrentes pensamientos sobre el pelinegro, atendió al tercer pitido.

—Jeon Jungkook.— respondió con una voz que rayaba lo exhausto.

—Hemos encontrado un pequeño problema legal, debemos resolverlo cuánto antes.— murmuró la otra voz despertando su letargo, Jungkook frunció el ceño mientras se incorporaba en la silla.

—¿Problema legal?

—Si hombre.— Jackson soltó un suspiro— Cuando creaste la empresa con Jimin tomaste capital de Modas Jeon, por lo que esta se está convirtiendo en copropietario de tu empresa, si te vas de la empresa sin resolver ese asunto estarías infringiendo la ley.

—¡Carajo!— se exasperó.— ¿Cómo puedo arreglar eso?

—Tienes que ir al banco y firmar los documentos con tu abogado dónde declaras que estás regresando el ochenta porciento que obtuviste desde el inicio.

Era más de la mitad de todas las ganancias que había obtenido.

Se peinó el pelo hacia atrás mirando perplejo la pared frente a él, nunca había pensado en eso. Ochenta porciento era mucho dinero. Jimin era quien se encargaba de ese tipo de cosas.

—De acuerdo, ¿Cuando-

—Tienes una reunión mañana en el banco, ya hablé con el gerente, debes llevar a tu abogado a las siete. Y el ochenta porciento.

—Gracias amigo.— Jungkook sonrió, Jackson era su salvación en todo eso.

—Si... Me debes una cerveza.— y colgó.

Ahora eran demasiadas cosas que debía  hacer, lo único que tenía en mente era acabar con todo esto de una vez por todas. Tenía una lista de prioridades en mente, la situación con el banco se había convertido en la principal debido a que su padre no estaba enterado que había creado una empresa con su dinero y tampoco planeaba que se enterara.

Cuando pensó en tenerla la idea original era para único uso personal y resguardar su dinero propio, era como un mecanismo de defensa por si en algún momento llegase a necesitarla. Ahora teniendo a Jimin cómo socio, la idea era simplemente trabajarla y sacarle el mejor provecho.

Admitía que mucho antes de tener a Jimin cómo empleado siempre pensaba en la idea de desligarse de la empresa de su padre, pero no había hecho algo en concreto para hacerlo, no tenía el tiempo ni la experiencia para lograrlo, por eso cuando Jimin apareció con su mente brillante confío en él y decidió que era momento de intentarlo. Ahora estaba mucho más seguro en el manejo de esta, el pelinegro había aportado mucho en ello. Como había ahorrado su tiempo en la empresa, conocerla, estudiarla y saber controlarla ya podía ser capaz de pegarle a Modas Jeon's sin que su padre se diera cuenta por eso el tema no lo puso de nervios, solo se lamentaba tener más inconvenientes para irse libremente. Claro que Jimin había dejado todo en perfectas condiciones y mucho más, así que terminar y seguir con el trabajo no fue muy complicado, parecía más bien que el pelinegro había hecho todo minuciosamente bien para que no hubiera ningún error ni ninguna falla.

Patito feo➫Kookmin©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora