30 días Montica

[Capitulo 25]

En un momento de su vida todo era completamente distinto, los primeros días en el que Montgomery se volvió parte de la Banda Glamrock estuvieron bastante ocupados, pero al menos tenía más reconocimiento.

Ser uno de los Animatronicos Principales era lo mejor, recibía mucha atención y ahora era más amado que cuando daba Shows en su Campo de Golf, pero para conseguir lo que siempre anheló uno de sus amigos tuvo que desaparecer.

Con el pasar del tiempo todos de olvidaron del suceso de los dos Animatronicos Glamrock’s desaparecidos, pero para Montgomery aún se le era preocupante el incidente de Bonnie, no podía dejar de pensar en eso.

Por alguna razón no paraba de sentirse culpable de su desaparición y eso lo hacía molestarse de una manera que hasta el mismo le sorprendía, pero estaba complemento convencido que no le había hecho nada malo.

Al principio no le pareció detestable ser el Bajista de la Banda Glamrock, pero algo cambió, ese sentimiento de querer más dominaría su pensar y su manera de actuar lo invadió tan radicalmente que no sabía como detenerse.

Glamrock Chica y DJ Music Man eran los únicos Animatronicos del Mega Pizzaplex que apreciaba con todo su ser, dejó de juntarse con Roxanne porque no soportó lo arrogante que se había vuelto y con Freddy no soportaba ver cómo siempre se llevaba el crédito en todo.

Odiaba ver que en todas partes estaba su rostro sonriente, siempre terminaba por romper mercancía de Freddy con la única excusa de que necesitaba liberar estrés, aunque Chica le enseñaba a como mantener la calma con Yoga.

─ ¿Te encuentras bien, Monty? ─ Preguntó DJ Music Man al notar que el caimán caminaba un tanto extraño.

─ ¡Un poco! Es que estuve haciendo Yoga y me duelen las nalgas. ─ Diría Monty tocando sus posaderas metálicas, aún su cuerpo no se acostumbraba los movimientos que hacía en la sesión de Yoga.

─ ¿Yoga? ¿Y para qué estás haciendo Yoga? ─ Se cuestionó el DJ.

─ Chica lo propuso como una manera de liberar estrés sin tener que romper nada con la cara de Freddy impresa, pero solamente me está dando dolores en mis articulaciones. ─ Respondió Monty adolorido.

─ ¿Chica lo sugirió? Así que ella te tiene de mandilón, ¿No? ─  Se carcajeó haciendo que Monty gruñera sintiéndose un poco molesto por esto, de no ser porque Music Man era enorme, lo daría un puñetazo.

─ ¡No es ser mandilón! Solamente soy amable con ella, ¿Qué tal si al decirle que “No” se pone triste? ─ A Montgomery no le gustaba la idea de hacer llorar a Chica y si eso llegase a pasar se sentiría de lo peor.

─ Lo que digas, espero que a la próxima que pases por aquí no te vea con un collar de perro en el cuello. ─ DJ continúo burlándose, Monty está vez rodó sus ojos con irritación.

─ ¡Cómo sea! Más tarde me paseó por aquí. ─ Se despidió de la Araña Gigante porque no le gustaba cuando comenzaba con sus bromas pesadas sobre su relación amorosa con Chica.

El caimán se adentró a su Habitación Verde para buscar su Bajo porque tenía que practicar una Canción Nueva que les habían dado a toda la Banda y que debían presentar la próxima semana, comenzó a tocar las notas que se sabía de memoria y tomaría asiento para estar cómodo.

Entonces… Pudo sentir una presencia… Era él… Ese conejo oscuro que lo observaba desde la puerta de su Habitación… No sabía si se trataba de una Falla en su Sistemas o que quizás se estaba volviendo loco… Pero era él... O eso era lo que quería creer…

Desde que llegó a esa habitación sentía que estaba invadiendo Territorio Ajeno, no se sentía cómodo estando allí. Esa Silueta de Bonnie lo miraba con una cara de desprecio o posiblemente era su imaginación haciéndolo ver cosas que no eran reales.

Trató de ignorarlo, pero entonces esa Silueta de Bonnie apareció sentado a un lado de él. Monty de levantó de golpe alejándose lo más posible de eso, esa criatura no apartaba su vista de él, no pudo soportarlo más.

─ ¡¿QUÉ DEMONIOS QUIERES DE MÍ?! ─

La Silueta no le respondió…

─ ¡NO ERES REAL, SOLO ERES UN PRODUCTO DE MI MENTE! ─  Monty arrojó su Bajo contra la Silueta que desapareció antes de ser golpeada, el Instrumento termino por destrozarse al chocar contra una pared.

Nuevamente comenzó a tener esa visión en donde corría por las pasarelas de Hurricane Hole, para él eso tampoco había sucedido, pensaba que era un recuerdo que sus Sistemas crearon por estar fallando, eso nunca pasó.

¡Él no quería saber nada al respecto! ¡Él no era malo! ¡Él no asesinó a Bonnie! ¡Las cosas que veía no eran reales! Soltó un enorme rugido que se escuchó por todo el Rockstar Row que alarmó a Roxy y a Chica que se encontraba practicando con sus instrumentos.

─ ¿De nuevo otro ataque de ira? ─ Diría Roxy saliendo de su Habitación Morada con su Keystar en mano, se podía escuchar ruidos de destrucción por todo el Museo.

─ Al parecer sí… ─ Diría Chica preocupada por Monty, la ventana de su Habitación Verde se encontraba sellada con una Barrera de Metal para poder encerrarlo en caso que perdiera el control con las personas.

─ ¿Qué haces allí? Anda a calmar a tu Romeo. ─ Roxy colocó una mano en su cintura, ella conocía el romance de los dos Animatronicos porque Chica se lo comentó un día que visitaron el Salón de Belleza.

Chica asintió y se dirigió a la cocina, ¿Por qué? Ella pensaba preparar un rico aperitivo para su temperamental novio, había escuchado por allí que para llegar al corazón de un hombre era con comida, mientras tanto Monty se encontraba sentado en el suelo de su destrozada habitación.

─ Tú no hiciste nada malo, Monty… ─ Se hablaba a sí mismo mientras se cubría la cara con una mano, entonces alguien tocó la puerta, pensó que de trataba de Vanesa ─ ¡Las visitas se acabaron, así que largo! ─

─ Monty, soy yo, Chica… ¿Puedo pasar? ─

─ ¡No! La-La lámpara del techo se cayó. ─ Excusó.

─ ¿Estás bien? ─ Preguntó Chica que colocó un poco su cabeza en la puerta mientras que en sus manos traía una Caja de Pizza, ella podía escuchar pasos apresurados.

─ ¡No pasa nada! Solo… ¿Qué necesitas? ─ Respondió Monty intentando acomodar su habitación lo más rápido posible «¡Eres Grande Monty! ¡Arruina tu relación con Chica por tus arranques de ira!»

─ ¡Oí ruidos venir de tu habitación, así que te he traído una pizza completa! Sé que es basta tarde, ¿Pero eso qué? No existe horarios para poder disfrutar de un aperitivo nocturno. ─ Mencionó Chica sonriente.

Entonces la puerta se abrió, permitiendo ver al enorme cuerpo del caimán que cubría toda la entrada para que la no pudiera ver el desastre que hizo.

─ Tú… ¿Escuchaste eso? ─

─ Solo un poquito, ¡Olvida eso! ¿Sí? ¡Te he traído tu Pizza Favorita! ¡Le puse mucho tocino, salami y mortadela! ¡También le coloqué salsa de la Monty Mistery Mix! La hice tal como te gusta. ─ Chica se la entregó.

─ Muchas gracias… ─ Monty miró la caja anonadado, se quitó sus Lentes de Estrella para verla mejor ─ Gracias por esto, me preguntaba si quizás podríamos compartirla los dos. ─

Ahora Monty se encontraba en la Habitación Rosa de Chica comiendo la pizza que le preparó mientras escuchaban música en el celular que Roxy había encontrado en Objetos Perdidos hace meses, el caimán se sentía más tranquilo estando al lado de ella, ya no se sentía acechado.