[Capitulo 10]

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– ¡¿Quién eres tú?! ¡Largo de aquí! – Montgomery se acercó peligrosamente a Vanessa, quien se quitó del camino antes de que la golpeara con uno de sus puños, en cambio le daría a una pared agrietándola – ¡VUELVE ACÁ! – Soltó un feroz gruñido mostrando sus peligrosos dientes.

– ¡Espera! – Vanessa tuvo que apartarse del caimán, quien no estaba dispuesto a escucharla – ¡Yo trabajo aquí! ¡No soy peligrosa! – Algunos Staffbots intentaron detenerlo, pero solo acabaron destrozados por el irracional caimán « Este Animatronico está loco » Pensó ella.

Monty la siguió hasta las pasarelas, en donde ahora Vanessa tenía que esquivar partes de los Staff destruidos que éste le lanzaba. Realmente ella no se esperaba que en su primer día de trabajando tendría que huir de una Animatronico que quería hacerla cachitos.

Por suerte, Vanessa encontró un ducto que la llevó a otro lugar. Montgomery notando que por su voluminoso cuerpo no podía pasar por allí, por lo que dejaría de perseguirla. Éste sólo gruñiría por el ducto, queriendo causarle temor a la rubia que se arrastraba lo más rápido posible.

"¡Y NO VUELVAS!" La voz del reptil resonó por todo el ducto, Vanessa asustada pudo salir por el Mazercise de Chica. Tendría que reportar a la gerencia ese incidente para que hicieran algo al respecto, casi moría a causa de ese Animatronico.

Por otro lado, el Concierto había sido todo un éxito. La clientela recibió con mucho éxito a Roxy en el escenario y como premio porque todo salió a la perfección, dejaron que los niños pudieran tomarse fotos con ella, algo que la loba aceptó sin problemas.

– Cielos... Que hermosa es. – Diría Freddy, accidentalmente porque eso era algo que no quería decir. Esto llamó la atención de Bonnie y Foxy que se encontraban cerca, el oso los había notado demasiado tarde – ¡Ah! ¡Tengo que irme! – De inmediato se fue corriendo dejando al par solos.

– Ahm... ¿Deberíamos ignorar eso? – Pregunto Bonnie, a lo que Foxy asentiría con su cabeza. Ya era suficiente saber que a Monty le gustaba Chica, no esperaba que Freddy estuviera le gustase de alguien como Roxy – Bien, volvamos al trabajo y nos vemos más tarde. –

Mientras tanto, Chica se dirigía al Campo de Golf de Monty. Adentro se encontraban algunos niños jugando juntos a sus padres que los vigilaban a lo lejos, la gallina encontraría al caimán pegando un poster de éste mismo en una pared (A la que había golpeado).

– ¡Hola Montgomery! – El grito de Chica hizo que Monty diera un brinco, se volteó rápidamente ocultando el poster con su ancha espalda – Parece que te he asustado de nuevo, grandulón. – Soltó una risa burlona.

– No me has asustado... Solo me has tomado por sorpresa. – La corrigió, se acomodaría el cabello y colocaría su mejor sonrisa para la gallina – ¿Y qué hay de nuevo? ¿Cómo le fue a Roxy en su primer día en sobre el escenario? – Preguntó curioso.

– ¡Fue grandioso! ¡A todos les encantó verla con nosotros! Así que ahora estará permanente en los próximos conciertos. – Contó con mucha emoción, la loba le alegraba tanto ahora ser parte de la banda Glamrock – Y quién sabe, quizás algún día tú podrías estar con nosotros también. –

– ¿Pero qué dices Chica? A Roxanne le costó mucho convencer a los gerentes en dejarla estar en la banda, ¡Y mira estas manos! – Levantó sus enormes garras – ¿Crees que están hechas para tocar algún instrumento? ¡Lo haría trizas con un solo acorde! –

– ¡Monty, tranquilo! – Puso un dedo en el hocico del contrario intentando callarlo, para que los demás no escucharan su conversación – Sé que tienes un gran potencial oculto en alguna parte, de seguro eres bueno tocando algún instrumento, solo debemos descubrir el ideal para ti. –

– Chica... Tú- –

"¿Quieren un mapa" Los interrumpió inesperadamente un Mapbot, el cual Montgomery golpeó mandándolo directo al suelo "¡Monty, no!" Se alarmó Chica notando que el Staff no se movía o decía algo, los visitantes se quedaron bastante sorprendidos por aquel acto de agresión.

Los adultos se mostraron alarmados mientras que los niños asombrados de la inmensa fuerza del Animatronico, los Staffbots nuevos (Los otros fueron destrozados por Montgomery) recogieron a su compañero caído para llevarlo a la zona de reparación y Chica se llevó a Monty a las pasarelas.

Mientras tanto, Foxy regresaba con sus niños luego de que decidió ir a traerle algunos bocadillos, pero se encontró con una horrible escena en la que aquella guardia de seguridad se encontraba adentro del Kid's Cove al parecer jugando con los menores.

– ¿Qué hacéis vos aquí? – Foxy dejaría el carrito con los bocadillos para acercarse a la rubia que dejó en el suelo a una pequeña niña – No deberías estar aquí. – No podía soportar que ella se acercara a alguno de sus pequeños marineros – Este es mi área de trabajo. –

– Estos niños estaban sin supervisión, no es correcto dejar menores solos. – Justificaría Vanessa, Foxy no supo que responder, por lo que solo le gruñó y la rodeo para ponerle atención a su tripulación infantil – Te dejo, debo revisar otros lugares. –

El canino no le interesaba en lo más mínimo lo que hiciera la rubia, solamente la quería alejada de la Kid's Cove y de sus niños. Aún no le terminaba de caer del todo bien y el hecho de que casi siempre se paseara por su área hacía que sospechara cada vez más de ella.

Regresando con Monty y Chica, se encontraban en las pasarelas del Campo de Golf jugando con las pistolas llegándole a darle a los flancos colocados a la distancia, además de que también se habían tomado algunas fotos con los niños y jugaron un rato con ellos.

Por primer vez Moty subía a algunos niños a su espalda para pasearlos un rato, a Chica le pareció bastante divertido y en cuando los menores se bajaron, ella se subió sin avisar, haciendo que el caimán se echara un poco para adelante por el peso de la gallina.

– ¡Wooh! ¡Cuidado, Chica! Si querías un paseo debiste pedírmelo antes. – De todos modos Monty dejaría pasar ese suceso y tomaría una mejor posición para cargar a la contraria en su espalda, tomando sus piernas con firmeza y ella lo rodeaba desde atrás con sus brazos.

– ¡Vamos! – Alentó Chica emocionada, Monty comenzaría a caminar sin problemas. Algunos se quedaron boquiabiertos al ver a ambos Animatronicos en esa posición – ¡Hola a todos! – Saludó moviendo una de sus manos.

El caimán solo disfrutaba de poder estar cargándola y por dentro estaba gritando de la emoción por estar cargando a su amada gallina. Con tanta diversión, a Chica se le olvidó el por qué había ido a visitar a Monty en primer lugar.

30 días MonticaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora