52. ~Ayato~

166 22 19
                                    


Kaneki enseguida se puso en contacto con los de la Gran Rueda y éstos accedieron a ayudarnos con Lyra. Daba la casualidad que tenían libre un piso de estudiante que se encontraba a las afueras de la ciudad.

En cuánto nos dijeron la dirección, nos despedimos de la gente de :Re e hicimos marcha mientras ellos se quedaban preparando la evacuación al distrito 24 junto a Kaneki y Touka.

Caminamos por las calles con la misma precaución que habíamos empleado cuando nos dirigíamos a la cafetería y, al llegar a nuestro destino, vimos a un chico bajito con una edad similar a la nuestra esperándonos en el portal.

=====================================================

—Ho-hola... —les saludó un poco nervioso cuando la pareja se personificó frente a él—. Tú eres Lyra, ¿cierto? —le preguntó directamente a la rubia en perfecto inglés.

—¿Quién lo pregunta? —le cuestionó a su vez un receloso Ayato antes de que la muchacha respondiera.

—¡Oh! Sí-sí... perdón... —se disculpó titubeante a la vez que hacía una pequeña reverencia—. Mi nombre es Izuku Midoriya y soy miembro de la Gran Rueda —se presentó manteniendo la cabeza agachada y con el cuerpo más tieso que un palo. Era evidente que la presencia del Kirishima le intimidaba bastante y la manera tan cortante en la que lo recibió no mejoró su percepción de él.

El ukaku lo observó largamente. Sorprendido de que un tipo que se mostraba tan miedoso e inseguro formara parte de una organización clandestina en la cual ya se estaba jugando la vida solamente por pertenecer a ella. No obstante, no detectó la mentira en sus palabras así que simplemente le contestó:

—Sí, es ella.

El joven pareció aliviado por la respuesta y se reincorporó exhibiendo una sonrisa amigable en sus facciones.

—Me enviaron para entregarte las llaves del piso —habló dirigiéndose de nuevo a la inglesa—. No es muy grande, pero es bastante acogedor. Me he tomado la libertad de comprarte lo necesario para que no tengas que salir de la casa en varios días. La policía pronto anunciará tu desaparición así que no te conviene que te vean mucho por la calle —le aconsejó mientras le entregaba el juego de llaves—. Aunque sea un barrio tranquilo y esté apartado de las sedes de la CCG, deberás de tener cuidado.

—Muchas gracias, Izuku. Te agradezco que te tomes tantas molestias.

—No es nada —dijo rascándose la cabeza cohibido—. Si necesitas cualquier cosa sólo tienes que llamarme al móvil. Puedo decirte el número ahora mismo, si quieres.

—No será necesario. Yo me quedaré con ella y le traeré todo lo que necesite —intervino el Kirishima.

—Pero Ayato, eres uno de los ghouls más buscados. Tú tampoco puedes ir paseándote por el supermercado como si nada. Además, ¿y si estás en alguna misión de Goat y la cosa se complica? Izuku es el único al que podemos recurrir si nos vemos apurados —le razonó Lyra—. No tenemos a nadie más en la superficie.

—Está bien... —aceptó a regañadientes—. Danos el maldito número —el chico lo anotó en un papel y se lo entregó temblando como un flan—. ¿Tienes algún problema conmigo? —le espetó harto de que el humano se mostrara tan inquieto en su presencia.

Cuéntame cómo pasó || Ayato Kirishima ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora