Capítulo 27

375 35 4
                                    

Si esto fuese una novela mexicana el drama empeoraría, porque sí, yo soy una hija bastarda, nací fuera de un matrimonio, mi papá no elogió a mi mamá, y para mi mamá fui lo peor que le pudo pasar.
Nunca supe que es la calma, mi vida siempre se trató de una constante montaña rusa, una que parecía nunca tener fin, tengo un departamento propio, pero por algún motivo que desconocía no podía quedarme quieta en ningún momento, porque el estar quieta significaba que algo me importara demasiado como para sentar cabeza, perder el control.
En mi mundo interno el sentar cabeza nunca existió, nunca supe mucho sobre lo afectivo, ¿las únicas personas que me demostraron afecto? Mis amigas, mis únicas personas favoritas, hasta que sin desearlo quién se transformó en parte de mi mundo fue Peter Lanzani.
Mi primera experiencia amorosa fue buena, era lindo que alguien se preocupara de mi, que me sorprenda, me escuche... Pero no me escuchaba realmente, escuchaba la mitad de las cosas, la parte linda de todo.
Traté de sostener una relación que al principio me hizo bien y después mal, volvía angustiada por ser incapaz de dar más, incapaz de amar.
Quise amarlo... Quise amar a Diego, lo intenté, y en el medio del intento llegó su "te amo", huí sin darle explicaciones, fui cobarde, me escapé porque la situación se me estaba saliendo de las manos, pero no por corresponderle y tener miedo a enamorarme, se me estaba saliendo de las manos porque lo quería, pero no lo suficiente, y eso me preocupaba, así que lo abandoné, pero antes de todo eso lo conocí a Peter.
¿Qué se me viene a la cabeza cuando pienso en Peter? Ese chico tímido, nerd, perdido.. Estaba perdido, indeciso sobre lo que iba a estudiar, Peter era lindo, muy lindo, pero no lo creía, era el mejor amigo de la infancia de Diego y no solo eso, era su "sombra", nunca lo confrontaba, todo lo "conformaba", y obviamente no era cierto, él también tenía sus problemas.
La primera vez que nos quedamos solos tomamos dos cervezas, una para cada uno, lo vi mal e hice lo que nunca solía hacer, le pregunté que le pasaba.. Hablamos tanto que se hizo la madrugada, y Diego llegó, se apareció, saludé con la mano a Peter y me fui con mi novio.
Esa madrugada me costó dormirme, en mis pensamientos se colaban una y otra vez la inocencia de Peter contándome sus problemas, su nerviosismo y sus ojos verdes... su lunar...
No fue hasta unas semanas después que no dimos nuestro primer beso, me comporté como una hija de puta, discutí con Diego por una estupidez y me perdí entre la gente del boliche, y nos vimos... Nos miramos... Peter salió conmigo a tomar aire, el silencio se hizo presente y a los segundos estábamos besándonos, yo estaba besándolo, él se quedó estático, no se lo había esperado.
Nos apartamos y nos miramos a los ojos con las respiraciones aceleradas, cuando él acarició una de mis mejillas la electricidad me quemó, me alejé confundida, y ahí empezó todo, siempre lo nuestro terminaba en un encuentro canal, poco a poco se transformó en pasional... Hasta que llegó la ternura.
Un día como cualquier otro dejé a Diego después de que le diga de todo a Peter por habernos atrapado juntos, fue mi oportunidad "perfecta" para deshacerme de mi novio de ese momento, no solo le rompí el corazón a la persona que me amaba... Le rompí el corazón a Peter... y la amistad entre ellos también se rompió, no lo vi porque me escapé, pero lo supuse.
El destino quiso que me cruce a Peter años después, que otra vez nos involucráramos, ¡y sí! ¡Nos involucramos y todo terminó en un escándalo!
-¡Ey La!-Peter me llamó y volví al presente-¡te asustaste! ¡¿Quién iba a creerlo?!
-¿Estabas jodiéndome Pedro?-elevé mis cejas completamente seria-¡no se joden con estas cosas! ¡Por poco me infarto!
-El día que te lo proponga... ¿Vas a putearme de manera liviana como ahora?-se me rió en la cara y le di un golpecito en su hombro.
-A ver si llegamos a ese día, ¡estas pidiéndome mucho! Te di la mano y me agarraste del codo-suspiré y le acaricié una de sus mejillas- esto es demasiado para mi, sobretodo porque vengo de una vida distinta, en la que nunca deseé tanto ser la pareja de una persona, y acá estoy, ¡acá estamos! Por ahora novios nos queda bien-le sonreí y él también me sonrió, lo hizo con dulzura, se hizo un silencio y no lo toleré-¿realmente te gustaría casarte conmigo en el futuro?
Se quedo pensativo y me besó en los labios, se le asomó otra sonrisa, una chiquita que se volvió más grande.
-Sí Lali-volvió a besarme y me dejé amar, me dejé querer, olvidé hasta donde estábamos, lo abracé por el cuello y escuché que tocaban bocina.
Peter bajó la ventana y era un viejo choto que nos recomendó que "vayamos a un telo".
-Hay un lugar mucho mejor-besó la punta de mi nariz, aceleró el motor del auto, llegamos a la puerta de mi edificio y lo miré a él- nuestro "nidito de amor"
¡Qué cursi! La Lali del pasado estaría con arcadas y acto seguido descompuesta , pero la Lali del presente si estuviese con arcadas y descompuesta sería por estar 100% embarazada.
-Ok Juan Pedro-al entrar a mi departamento rodeé su cuello nuevamente con mis brazos y le sonreí- ahora tumbate en la cama-Lali mandona 1, Peter sumiso 0.

Abrí mis ojos y era de día, ¿por cuanto tiempo había dormido?
Anoche me quedé pensando en mi recorrido personal hasta este ahora, todo entre los brazos de Peter.
La alarma de mi teléfono celular no paraba de sonar, desconcertada la apagué y vi que tenía en mi pantalla de inicio dos pacientes por atender, por suerte todavía no era esa hora.
Rápido me duché, me cambié y me fui al consultorio, me tomé un té y comí unas galletitas saladas.
-Hola-saludé a mi paciente como si nada, como si no me hubiese quedado dormida-¿cómo estas Carol?
Y se puso a contarme toda su lista de problemas, asentí con la cabeza distraída, mi estómago estaba revuelto.
-Aja...-asentí otra vez y me puse de pie-¿me das un minuto? Muero por hacer pis
Entré al baño desesperada y vomité, me cepille los dientes, lavé mi cara y salí de ahí renovada.
-Sigamos-esbocé una pequeña sonrisa.
Suspiré y ansiosa volví a comer otras galletitas más.

-Estas en la etapa en la que todo te cae mal-Eugenia me sacó la ficha, asentí-¿no deberías descansar un poco? Hasta que te sientas mejor...
-Ya estuve mucho tiempo haciendo nada, necesito sentirme útil, no ser una mujer como las de antes, ¡siglo XXI!
-¡Ok siglo XXI! Pero estas embarazada, no está mal que en este momento de tu vida necesites más ayuda, La ya sé que siempre fuiste independiente, pero ya no estás más sola, no solo porque nos tenes a tus amigas y a Peter, tenes otro ser vivo en tu interior cuidalo-Eugenia elevó sus cejas sería.
-Tenes razón...-suspiré fastidiada- voy a tratar de delegar en algunas cosas, y tomarme el día si me siento mal, pero no pienso negociar mi trabajo, poco a poco estoy volviendo a mi vida de antes... Aunque no quiero volver a toda mi vida de antes, solo a la parte en la que soy profesional en mi trabajo
-Me alegra que tengas las cosas más claras-me guiñó un ojo y le sonreí.

-Esto es muy raro-miré a Celeste que me hizo salir de su consultorio, tomar aire nunca venía mal-¿vas a hablarme como terapeuta o como hermana de Peter?
-¿Qué preferís hoy?
-Yo... ¿Puedo hablarte como persona que está enamorada de tu hermano?
Celeste se sorprendió.
-Ya lo asumiste..
-¡Y sí! ¿Para qué negarlo?-me reí nerviosa- vos... Sos una buena profesional, y hay algo que no sé, si sos así conmigo solo por eso o porque queres que mejore para no lastimar a Peter
Ella se quedó seria.
-Un poco y un poco, no me refiero a lo de que soy así porque quiero que no lastimes a Peter, ¡obvio que quiero que no lo lastimes! Pero soy humana Lali, no me caes mal... Cambiaste mucho en un tiempo corto, y aprendiste.. Estás superándote a vos misma desde el lado positivo, estás encontrándote, volviéndote más segura, y eso hace que quieras luchar por lo de ustedes.. Me parece hermoso eso, que los do estén comprometidos para luchar por lo suyo, aún cuando mis padres son cerrados
-No quiero lastimarlo, puedo jurarlo..-levanté mi dedo meñique.
-No hace falta que jures, Peter confía en vos, si él confía en vos yo también Lali, mi hermano es una persona muy perceptiva-elevó sus cejas y se le formó una pequeña sonrisa, yo también le sonreí-¡vamos a desayunar juntas!
Caminé con Celeste unas cuadras más hasta que divisamos un lugar lleno de flores y decoración moderna, pedimos para compartir tostadas y alfajorcitos.
-Gracias por tus palabras, por la charla.. Últimamente estaba sintiendo que nadie iba a aceptarme en tu familia
-Solo dales tiempo-Celeste me quiso animar, me dio la mano y también le sonreí-¡ey tengo que irme! Tengo un paciente, cualquier cosa me mandas un mensaje
-Gracias-le sonreí y besé su mejilla, ella iba a pagar pero se lo impedí-¡invito yo!
Iba a ponerse a "discutir" conmigo cuando recibió una llamada, su paciente, se disculpó y me dejó sola.

Animarme a pasar por la empresa era un ejercicio diario, trataba de tres veces por la semana hacerlo, poco a poco los trabajadores volvían a sus asuntos y dejaban de darme atención.
-Hola mi amor-Peter me sonrió al verme y lo besé- ¡que linda estas!
-¿Siempre vas a ser así de coqueto?
-Sí, porque tengo a mi lado una mujer que es hermosa-se mordió los labios captando toda mi atención.
-Peter tenemos que irnos de viaje a Rosario, ¿ya estás?-el Chino entró a la oficina y se sorprendió al vernos- Lali, no te esperaba, hola
-¿A Rosario?-me extrañé.
-Ida y vuelta, no me quedo a dormir, por eso no te avisé, tenemos que ver a un autor que quiere publicar un libro, es una persona mayor, no puede trasladarse..
-No me debes explicaciones de nada-le acaricié el pelito y besé su frente-nos vemos Chino-lo saludé con la mano.
Me subí al auto y mi cabeza se fue a mis inseguridades, ¡qué estúpida! ¡¿Ahora venía a desconfiar?! Además, las personas siempre desconfiaron de mi, no yo de las personas.
Peter no me da motivos, no quiero perder la calma, no quiero.

Mi karma mi caosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora