<<Introducción>>

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Tenía 10 años cuando aquel niño de ojos azules apareció por la puerta del salón, transferido desde otra ciudad, mirando de forma tímida a todos, mientras los demás lo miraban de mala manera.

-Niños, hoy se nos une un nuevo compañero, preséntate por favor- lo veo pasar saliva y mirar nuevamente a todos, muerde su labio un poco y es cuando la primera sonrisa tonta escapa de mí.

-Ho... Hola, mi nombre es Park Jimin - su voz suena suave.

-Como decimos a los amigos que recién llegan?-

-Bienvenido Jimin!-Sus mejillas se colorean y una sutil sonrisa se dibuja en sus pomposos labios, la maestra lo sentó en la mesa junto a la mía.

-Hola Jimin - en cuanto oye mi voz me mira con esos ojos que se me hacen más lindos cada vez que pestañea- soy Min Yoongi - estiro mi brazo para que él pueda tomar mi mano, ya saben el típico saludo, nuevamente sonríe y la toma.

-Hola- y fue aquí, en este preciso momento en el que ya no quise soltarlo nunca más, nos volvimos inseparables, los mejores amigos del mundo, al punto que él se quedaba a dormir en mi casa y yo en la suya cuando su padre salía por negocios.

Cuando cumplimos los 14 fue que tome el valor de declararme, temblaba de pies a cabeza, ya que muchos pretendían a mí en ese momento aún mejor amigo, pero él solo los rechazaba, cabe decir y explicar que en nuestro país las relaciones entre personas de tu mismo sexo no son mal vistas, somos libres de elegir a quien amar.

-Jimin yo tengo algo que decirte...- me sudaba todo, hasta aquello.

-Que pasa Min te ves nervioso- pone su mano en mi mejilla y el grito interno sonó fuerte en mi mente.

-Yo...- carraspeé - em, bueno - sonrió como idiota y mojo mis labios - Jimin tu bueno - rasco mi nuca y apretó los puños, es que como mierda se lo digo!?

-Oye me estás asustando paso algo?-Jesús lo tengo a nada de mi rostro viéndose tan lindo como solo el puede ser y mi idiotez me deja más mudo, ya nada sale solo balbuceos que para colmo lo hacen reír, su linda risa- a ver cálmate - toma mis manos y se pone frente a mí - cierra los ojos, respira y suelta lo que sea que me quieres decir-

-Ok - boto el aire de mis pulmones y cierro mis ojos, en cuanto lo hago siento algo cálido sobre mis labios y una respiración tibia chocando con mi cara- abrí los ojos de golpe y casi me da un infarto- Ji...-

-Me gustas Yoongi - alguien sabe como es eso de que, eso que... no? ¿Yo tampoco- dirás algo o...-hablar? Ni loco. Suelto sus manos y tomó su lindo, redondo y pequeño rostro entre mis manos y vuelvo a besarlo, lo oigo sonreír y responder tímido el contacto, ninguno sabe besar, pero no creo importe mucho ahora.

-También me gustas Jimin desde la primera vez que te vi- desde ese entonces nos hicimos novios, si ya antes éramos inseparables ahora no había fuerza que nos tuviera alejados.

A los 18 tuvimos nuestra primera vez, nos llegó de golpe la calentura y pues ni como ni ganas de evitarlo, lo hice mío en su habitación una tarde mientras sus padres estaban de viaje de negocios, aún tengo en mi mente todas las sensaciones y palabras que dijimos aquella promesa de algún día vivir juntos.

Pero aquella noticia cambió todo.

-Yoonie...-

-Tengo que hacerlo Jimin, lo lamento, pero solo serán dos años, veraz que pasan rápido y estaremos juntos - los varones de 20 a 25 teníamos que hacer el servicio por obligación, solo quienes podían pagar o tenían alguna enfermedad lo evitaban en el caso de Jimin fue lo primero su padre pagó para que quedara exento, ya que podría sufrir algún tipo de acoso.

Jimin no era como el común de los hombres, era hermoso, su cuerpo si bien era marcado, al mismo tiempo era fino, alguien como él, podía sufrir muchas cosas rodeado de tanta hormona sin control.

-Te voy a extrañar-

-Oye volveré antes de lo que crees y después quiero que te cases conmigo, amor -

-Claro que si - y con ese ultimo beso y esa promesa me fui, a cumplir con mi deber, fueron dos años difíciles, ya que, por un lado, era en verdad muy exigente físicamente y por otro extrañaba mucho a Jimin, puesto que no nos deja recibir ni cartas ni llamados, nos aíslan de todo.

Pero hoy, al fin termino, soy libre de esto y ahora, iré a cumplir la promesa que le hice a mi chico...

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*My Soldier*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora