*
Tres meses después llegó el día que Jimin tanto quería, al fin le quitarían los yesos, tanto el brazo como la pierna le picaban bastante a pesar de meter un palito para rascarse.
-Bien joven Park - dijo el médico- comencemos con la pierna -veía entusiasmado como la sierra circular especial para yesos pasaba por su pierna, apretó fuerte la mano de su novio.
-Aquí estoy- preparó todo para que este día fuera justo cuando Yoongi tenía libre en su trabajo, lo quería a su lado en esos momentos, aunque Min habría ido así no fuera su día de descanso, cuando al fin el yeso se abrió, Jimin hizo una mueca de asco, la piel debajo estaba como escamosa por el tiempo que estuvo apretada además de que olía un poco raro- te estabas convirtiendo en sireno- riendo.
-No es gracioso, Yoonie pica mucho...- tratando de rascarse.
-No, no, no te rasques, deja que la enfermera te limpie y ponga humectante o te lastimaras la piel- Yoongi tomó la mano de su ojiazul.
-Ya oíste al doctor quieto mi mochi- besando su frente.
-No me digas mochi- el doctor solo miraba a la pareja discutir de aquella forma tan tierna, sin duda Jimin había tenido un gran avance en su salud en general, aún tenía cuadros depresivos donde se cuestionaba, pero Yoongi siempre estaba ahí para apoyarlo y dejarle en claro que él era un ser precioso y que nada de lo que había vivido era su culpa y ese apoyo era el que tenía al ojiazul sonriendo ahora- sabes que no me gusta-
-Ya perdón, pero cuando te enfadas si pareces un dulce mochi- esta vez el beso fue en los labios.
-lamento interrumpir, pero debo quitar el yeso el brazo ahora- haciendo sonar la sierra, asustando un poco a Jimin- así que cierre los ojos- obedeció sin chistar aferrando su mano sana al bazo de su novio que no perdía detalle alguno, temía que algo lastimara su amado.
Casi una hora después Jimin se vio al fin libre de los yesos, el doctor revisó la movilidad y dureza de los huesos, todo estaba perfecto, después de casi 4 meses el ojiazul volvió a caminar, había llevado ropa de cambio, ya que tuvo que cortar algunos pantalones para que le cayeran con el yeso, se miró en el espejo viendo que al menos tanto tiempo sentado le había dejado algo de lo que fue su colita.
-Amor te ves ...- pasó saliva- hermoso- se acercó y lo tomó de la cintura ahora ya podía apretarlo a su cuerpo, sentir ese rico calor y aroma que siempre acompaña a su novio- eres perfecto Jimin- sonrió nervioso, le gustaba cuando Yoongi le decía esas cosas, lo hacían sentir seguro, aún luchaba con las marcas en su cara que no eran muy notorias, pero él las veía y se acomplejaba por ellas- tengo al chico más hermoso del mundo a mi lado- dejo un roce en sus labios, mismo que Jimin se encargó de volver algo más, quería demostrarle todo ese amor que sentía por él, aquel que jamás desapareció de su corazón.
-Te amo Yoonie, y mucho, gracias por estar conmigo, por pasar todo esto conmigo-
-Por ti lo que sea amor lo sabes- estaba abrazado a mitad de aquel pasillo mirándome con amor, siendo melosos que todos los que pasaban o esperaban se les quedaron viendo- qué te parece si vamos al café a celebrar?-
-Me encanta la idea - si podía presumirle a Tae que ya estaba bien claro que si le gustaba la idea- llamaré a Hwasa para que vaya con Jay-
-Ya los llamé- pícaro - nos estarán esperando allí amor- así o más lindo, pensó Jimin.
Se fueron tranquilos en el auto hablando de lo que Jimin podía hacer ahora que estaba libre del yeso, aunque aún tenía que ir a algunas terapias.
-Correr?-
-Te juro que soñaba con correr, es que ya me estaba desesperando, eso de estar siempre sentado ha acostado, por momentos se entumece todo hasta el alma Yoonie-
-Mi pobre mochi casi se queda sin colita- claramente burlándose de su novio, quien no tardó en mirarlo mal.
-No es gracioso Min Yoongi a ratos no sentía las pompas-
-Si quieres ahora puedo ayudarte a que las sientas- coqueto, Jimin compendio donde iba ese comentario no tardó mucho en ponerse tímido y colorado, muchas cosas pasaron por su mente y ninguna que pudiera contar en un almuerzo familiar, mordió su labio haciendo a su novio morder los suyos.
-No digas esas cosas Min-
-Por qué no?-
-No porque antojas y yo aún no puedo, por eso-ahora fue el turno de Yoongi de imaginar muchas cosas que ni un cura quisiera escuchar en confesión, su amigo no tardó en despertar, había mucho amor acumulado ahí- así que no digas esas cosas -
Paro en un semáforo y antes de poder decir algo, Jimin se vio con su novio besándolo de una forma algo desesperada, sintió aquellas grandes manos meterse bajo su playera para llegar a sus pezones apretándolos un poco.
-Min que...-
-No solo quiero antojarte amor, también quiero complacerte-cuando el auto de atrás tocó la bocina fue que se separaron ambos algo agitados, pero sonrientes, ese día terminaría bien, lo sabían sus cuerpos, ya pedían ese tipo de atención, sus corazones querían esa cercanía.
Llegaron al café, viendo que Hwasa y Jay ya habían llegado, cuando lo vieron entrar sin el yeso lloraron un poco, su hijo volvía a ser el mismo, poco a poco, sonreía más, irradiaba luz, siempre escoltado por su novio quien parecía cada día más idiota por él.
-No sabes lo feliz que me hace, verte así amor-Hwasa lo abrazo fuerte, entre los 3 habían traído a Jimin de regreso - disfruta esta nueva oportunidad, cariño, te lo mereces-
-Gracias Hwasa-
-Nunca debiste dejar de ser feliz Jimin perdón-
-Jay no te preocupes, ya pasó y ahora solo tenemos que mirar al futuro-
-Wow, pero qué joven tan guapo- Soobin llego a atender la alegre mesa- te vez increíble Jimin me alegro mucho que ya no tengas el yeso- del chico triste que vio en aquel semáforo ya no quedaba nada, el peli negro se miraba cada día más lindo, y él no era inmune a los encantos del ojiazul, aunque tampoco lo era a la cara de culo que ponía Yoongi cada vez que esto pasaba- calma Min, dios parece que quieres matarme...-
-¿Desde cuándo eres psíquico Soobin?-rugió con esa voz ronca que lo caracteriza cuando algo estaba comenzando a cabrearlo.
- Ya no estén peleando - se metió entre su novio y Soobin- gracias y si ya me siento más libre y cómodo -
-Qué bueno-
-Jefe, disculpe la máquina de crema está fallando-
-Oh, ya voy podrías tomar la orden de esta mesa, por favor, atiende los bien Hobi-dándole un guiño a Jimin, si Soobin quería morir joven, pensó Yoongi.
-Claro, hola bienvenidos al café Ilusión, soy Hoseok que desean pedir?-
-Hola Hobi yo quiero un capuchino vainilla por favor-el mesero miro al ojiazul y sonrió de forma amable, lindo pensó desvió su vista dándose son los marrones de Yoongi que no miraban tan amable.
-Todo bien Hoseok?- estos celos me hacen daño, me enloquecen....
*
*
ESTÁS LEYENDO
*My Soldier*
FanfictionSe conocieron siendo niños y desde el primer momento se quisieron más que solo como amigos, al crecer se declararon su amor incondicionalmente, jurando estar juntos toda la vida. Al padre de Jimin jamás le agrado Yoongi, sentía que el joven aquel er...