13.:Cura para el alma:.

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[Italia]

-¡No es Justo Namjoon!-

-Jin entiende, tengo que ir y resolver ese asunto-

-Eso sí, lo entiendo, lo que no entiendo es porque yo tengo que volver, es tu problema, no el mío, pero claro siempre pierdo yo cuando de tu estúpido esposo se trata, si hasta parece que lo amas más que a mí- ya le habían informado que su doctor de confianza estaba en la cárcel, por lo que sí o sí tendría que volver, aunque su adorado Jin no quería.

-Amarlo? Por favor Jin- sonrió burlesco.

-Entonces dime por qué yo debo dejar mis vacaciones por su maldita culpa -

-Te quieres quedar un poco más?- asintió, Nam se levantó y caminó hasta donde él estaba- está bien amor, quédate unas semanas más- el menor sonrió victorioso, le era fácil convencerlo, llegó a su lado y dejó una caricia en su mejilla- pero si tan siquiera me entero de algo extraño- tomándolo fuerte cabello- te mato oíste-

-Suéltame Namjoon- exigió le tomo la mano y lo obligo a soltarlo - yo no soy Jimin a mí no me vas a venir a tratarme de esa manera, yo no soy un juguete- lo miro furioso- ahora sal de mi vista antes que de verdad me enfade contigo- se giró y camino hasta al cuarto de baño, cerrando la puerta de un golpe- maldito idiota, pero ya veraz Nam, ya veraz- mirándose en el espejo.

[Nueva Corea]

El neurólogo se sentía feliz, le había hecho ya los estudios y exámenes a Jimin quedando más claro que su cabeza estaba bien, sus recuerdos estaban intactos.

-Bien Joven Park, todos está en orden, solo debe preocuparse de recuperar su cuerpo - asintió, si bien le habían quitado el tubo, la indicación decía que no hablara al menos por unos días, ya que esa zona estaba aún delicada.

-Todo bien entonces?-

-Si todo bien, solo no lo hagan recordar muchas cosas al mismo tiempo, vayan despacio-levantándose, Hwasa busco la mirada de su hijo, pero este la mantenía fija en algún punto de la habitación- bien los dejo cualquier cosa, me avisan-

-Claro- reinó el silencio por unos minutos, los Park no sabían cómo comenzar aquella dolorosa charla- Jimin nosotros...- comenzó Hwasa, pero el menor solo cerró los ojos y giró el rostro al contrario de donde ella estaba, señal de que no quería oírla- hijo solo escúchame por favor - negaba de forma insistente.

-Hijo, queremos pedirte perdón...- lo oyeron sollozar y ambos callaron, se miraron sin saber qué hacer, el sonido de la puerta alertó a todos, en especial a Jimin quien solo cerró los ojos, tenía pánico de ver a Nam.

-Perdón estaba resolviendo unos asuntos de la cafetería- pero le bastaba solo oír aquella ronca, pero dulce voz para volver a abrirlos y mirarlo como un niño mira a su madre, posó sus marrones en los azules y nuevamente las lágrimas bañaban su rostro, verlo le daba alegría y pena al mismo tiempo- hola Jiminie- camino tranquilo hasta llegar a su lado - duele mucho?- mirando su brazo, negó - ya no llores amor, por favor se sentó junto a él y seco sus lágrimas dejando a su paso una caricia, misma que le devolvió la vida- tus padres y yo queremos hablar contigo- sus ojos decían todo, la gran pregunta dibujada en rostro- solo escúchanos- asintió.

-Hijo, nos faltará vida para pedirte perdón por lo que hicimos, te obligamos a estar con alguien sin saber nosotros bien como era y te hicimos vivir un infierno...- el menor abrió los ojos, ellos sabían, de alguna forma supieron lo que esos dos años fueron para él, Yoongi lo miro y sostuvo su mano fuerte, haciendo que lo mirara- debimos insistir en verte y no solo conformarnos con lo que él nos decía...-

-Debimos dejarte ser feliz a tu manera desde el inicio- concluyó Jay- nunca debimos de alejarte de lo que en realidad te hacía bien y feliz- todas las miradas se fueron sobre Yoongi- sé que perdonarnos te tomará mucho tiempo, pero te juro hijo, que lo que me queda de vida lo usaré para hacer pagar a ese maldito todo lo que te hizo vivir- se acercó con las lágrimas fluyendo sin control- tú ahora solo debes ser feliz- oía el fuerte golpeteo de su corazón, latiendo feliz, y aquella pequeña chispa creciendo en su interior.

Sus ojitos buscaron a Yoongi quien sonrió, acarició su mano y después su mejilla.

-Sabemos que es lo que te hace feliz, y esta vez cuentas con nosotros Hijo- Hwasa secó su rostro y vio la ilusión en los de su hijo, brillaban, pero de un segundo se apagaron, y el miedo volvió a atormentarlo.

-Jiminie no dejaré que te vuelva a lastimar, si me dejas estar contigo te juro ese ...- paso salvia- ese idiota no volverá a tocarte un pelo- volvió a dejar una caricia en su mejilla y el menor solo cerro los ojos asintiendo- me dejas cuidarte?- asintió con la sonrisa dibujada en sus labios.

-Si Yoonie- su voz fue un dulce arrullo a los oídos de Min, quito aquella máscara de oxígeno y ya sin poder aguantar más dejo un beso en sus labios, simple, un roce que contenía todo ese amor que había estado dormido en su corazón- te amo-

-Yo más, Jiminie ni imaginas cuanto-

-Joven Min que hablamos de las muestras de cariño con el paciente!?- habló el doctor entrando, Yoongi sonrió y colocó la máscara en su lugar- si, ahora tengo que hacerle una revisión a su pulmón joven Park-tras de él venían dos enfermeras con una especie de escáner - señores les voy a pedir que salgan por favor-

Jimin miró a yoongi y este dejó un beso en su frente.

-Estaré afuera, en cuanto el señor gruñón me deje entrar, estaré contigo- el doctor lo miro, pero sabía que solo lo decía de broma, asintió y soltó la mano de su amado.

Veía esas miradas tan cómplices que decían tanto sin decir nada, vio al castaño salir dejando a Jimin con un suspiro en su boca.

-Bien, dicen que un abrazo cura más que un paracetamol- dijo haciendo sonreír a las enfermeras y al mismo Jimin- ahora con cuidado veremos como está su interior, algo me dice que ya no hará falta el marca pasos- risueño, lo vio negar con aquella linda sonrisa- si haremos unas pruebas y si sale todo bien, lo quitamos, ok - asintió- eso es -

Porque el dolor del alma solo se cura con amor.

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*My Soldier*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora