*My Soldier*

8.: Apaga mi Luz:.

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Los veía sentados en aquella mesa, cada uno metido en su café, esperando que el otro hablara, era obvio que algo así pasaría, bien lo sabía ella, y aunque trato de oponerse con lo único que Jimin pelearía en su vida sería estar junto a Yoongi así que los dejó entrar a aquel lugar para dejar las cosas claras, sabiendo que luego de esa charla perdería más a su hijo.

-Por qué? - Jimin apretó los labios al oír aquella pregunta, tenía claro que podía o no creerle.

-Yo no, no tuve opción- Yoongi sonrió en burla, algo le decía que esa sería la respuesta.

-No fue lo que tu madre me dijo - lo miro, acaso él había ido a verlo- no te lo dijo?- lo vio negar - cuando volví fui a verte, pero en vez de darte una sorpresa la sorpresa me la di yo- el menor busco a su madre con la mirada quien solo bajó la vista- desde cuando estabas con él?-lo miro fijo, Yoongi pensaba que él estaba con Nam desde antes que se fuera.

-Las cosas no fueron como piensas Yoon...- era una sensación extraña, se sentía feliz por al fin poder verlo, pero al mismo tiempo se sentía aterrado.

-Sé que no tengo derecho a preguntar, pero esto desde hace mucho que me carcome el saber por qué? Tan difícil fue solo ser sincero y decirme que ya tenías planes para tu vida, con alguien más...-

-Yoongi yo no, no fue algo que pudiera elegir, no me dieron la opción de negarme, mi padre simplemente impuso su voluntad y no hubo mucho que pudiera hacer, no supe de ese hombre sino hasta el día de la boda donde por fuerza me unieron a él a cambio de dinero, me vendieron como a un animal ...-trataba de aguantar el llanto, pero este parecía salir sin su consentimiento

-Y se supone que debo creerte?-

-No estás obligado, pero esa es la verdad

-Me sentí como un idiota cuando ella me dijo que de antes tenías todo listo, que solo te daba pena decírmelo en la cara Jimin- volvió a buscar su mirada, pero ella la ocultaba- y ahora según tú te obligaron-molesto -saber la verdad me habría dolido, pero al menos no habría estado esos dos años ilusionado con una mentira, Jimin- respiro profundo, veía las lágrimas caer por sus mejillas y morder su labio- y supongo no salió como esperaban, no?- el menor suspiro- no es el príncipe azul que querían para ti- lo vio sonreír con pena y negar.

-Nunca lo fue- viendo sus manos- porque lo que yo quiero no puedo tenerlo, no me dejaron tenerlo- sollozó nuevamente, se hizo el silencio mismo que parecía comérselos -es un, un chico lindo, se ven bien juntos- Yoongi soltó el aire y miró a los lados aquel frente a él no era Jimin, al menos no el que recordaba, no había alegría en él, ni vida, solo un cascarón vacío y roto.

-Lo es - y esas simples palabras sepultaron todo, Yoongi ya era feliz con alguien más, él ya no tenía cabida en su vida

- Ya, ya tengo que irme-mordiendo su labio, evitando mirarlo.

-Claro, supongo que a tu esposo no le hará feliz la idea que su amor, esté con un recuerdo - Jimin sonrió, dejando a Yoongi algo descolocado, era una amarga sonrisa.

-A mi esposo nada que venga de mí lo hace feliz, así que tranquilo que saber esto no cambiará lo que vivo a diario- se levantó y quedo ahí parado a un lado de la mesa- fue lindo volver a verte Yoongi- mostrando su eye smile- espero seas muy feliz - sin entender por qué a Yoongi aquello le dolió, sonaba a una despedida, pero no a cualquiera, lo vio caminar y detenerse de golpe, el menor giró sobre sus pasos y volvió a su lado, Min se levantó de la silla y esperó lo que sabía pasaría, algo que él mismo se imaginó haciendo, sintió aquellos labios sobre los suyos, que aunque ásperos le supo a dulce incluso más que antes, aun con aquellas lágrimas colándose en medio- mi corazón siempre será tuyo no importa lo que pase, te llevaré siempre conmigo Min Yoongi - lo miró un segundo sin comprender muy bien esas palabras.

Volvió a alejarse dejándolo con esa sensación en el corazón, una angustia dolorosa, lo vio pasar de su madre quien parecía llorar, salió rápido mientras esta salía tras de él con el miedo reflejado en el rostro, fue entonces que las palabras de Soobin volvieron a su mente "Se tiró al tráfico" su corazón se apretó hasta doler y sin pensarlo siquiera se vio a sí mismo corriendo fuera del local, buscándolo con la mirada solo para ver como aquel auto lo lanzaba lejos, estrellándose contra el suelo mientras Hwasa gritaba desesperada.

-Jimin!!- cayó a metros del auto, con la cara llena de sangre, con unas cuantas heridas por la fricción contra el asfalto y en una posición que suponía que más de un hueso estaba roto, se obligó a reaccionar y corrió hasta llegar a su lado y sostuvo su cabeza, aún respiraba pero débil- que hiciste...- se sentía agitado al verlo, casi inconsciente, de a poco la gente comenzó a aglomerarse solo a mirar- alguien llame a una ambulancia!! Dios, no, por qué?- lo vio abrir los ojos y vio esa luz, mientras una tímida y linda sonrisa misma que él tanto amaba aparecía en sus rotos labios- Jimin por qué lo hiciste no...-

-Te, te estaré esperando Yoonie...-

-No digas estupideces Jimin no te despidas oíste!- veía sus propias lágrimas caer en el rostro del menor- no te vayas otra vez, no ahora que volví a encontrarte amor, no te atrevas - lo acercó a su cuerpo y beso su frente- quédate conmigo Jimin-

-Siempre... -cuando lo vio cerrar los ojos, el pánico lo invadió, Hwasa llegó a su lado y cayó de rodillas, estaba perdiendo a su hijo por culpa de su decisión, ella lo había empujado a esto, ella y la ambición de su esposo, cuando su cabeza se dejó caer a un lado, sintió que la propia vida se le escapaba del cuerpo.

-Jimin!?- lo movió un poco, pero no respondía- No, no, no Jimin!? -él sentía paz, al fin el dolor desaparecía, al fin era libre- Jimin!!!-

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