❁𝓜. 𝓟
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La alegría se puede decir que no gobernaba en mi, pero vaya que la intriga si.
Era jueves, lo que significaba que era el dia en el que estaba programada mi cita con Tom. Y solo merlin sabía lo nerviosa que estaba.
Y para mi suerte había ido a la oficina de la directora Mcgonagall y me dijo que podíamos hablar el próximo viernes ya que ella tendría un viaje—de último momento—hacia algún lado que no mencionó.
A lo que me encontraba caminando por los pasillos con Teddy, por lo que ambos manteníamos la conversación de la relación de Alb y Lara— lo que para mi sorpresa era grande, el notar que no era lo única que veía una relación tensa entre ellos.
Pero Albert casi no me hablaba mucho, ya que su tiempo iba dedicado a Lara y solamente a la pelirroja.
— Entonces reaccione ante Lara y le dije: ¡Deja que el pobre respire!— agitó las manos el pequeño Lupin—. A lo que entonces ella me tiró todo lo que encontró— suspiró, con su cabello de un tono azul.
—¿Tu crees que ellos se amen?— cuestioné levantando la mirada a Teddy.
Pensó por unos largos segundos— Algo así— contesto indeciso—. Ambos tienen maneras muy distintas de afrontar las situaciones, y se que eso no llevará por buen camino su relación— afirmó con las cejas levantadas, como si se hubiera sorprendido a sí mismo.
—¡Que profundo!— lo codeé en una risa mientras dábamos la vuelta por el pasillo.
De un momento a otro sentí que me choqué fuertemente con una silueta mucho más alta que yo, así haciéndome retroceder abruptamente cayendo sobre mis nalgas.
— Oye, y a ti que mierda te suced-
Todos mis insultos quedaron atascados en mi garganta; al ver que con quien me había chocado era Tom.
— Una gran disculpa, señorita Mikaelson— contestó apenado—. Déjeme ayudarla— extendió su mano a mi, con sus ojos perfectamente clavados en los míos y me olvidé por completo que estábamos ante la presencia de Teddy.
— Yo me levanto sola— sacudí la cabeza lentamente
— Insisto— tomó mi mano derecha así yo sintiendo un pedazo de pergamino en ella.
Al yo estar completamente de pie, disimuladamente tome el pedazo de pergamino en mi mano, evadiendo completamente la mirada del mayor.
— Con permiso— se despidió, siendo totalmente indiferente ante los dos.
Al verlo alejarse Teddy habló—. El profesor Riddle verdaderamente me causa terror— tragó grueso.
— Lo mismo me pasa.
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MA PETITE | Tom Riddle
RomanceEra fácil ignorar la necesidad humana de sentir sus labios, pero no ignorar la necesidad de entrar en su corazón. | 𝗗𝗜𝗟𝗙 ¿En la escuela no nos preparan para enamorarmos de lo prohibido, cierto? "Sería capaz de ir al maldito infierno solo para e...