12.

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𝓜. 𝓟

— ¡Le dije que no, claramente!— el grito de Albert fue silenciado por la bibliotecaria en un gran: ¡Shh!

— Pues deberías aclararle las cosas
a Janeth.— dijo Alice mientras sacaba los libro de sus estantes.

Nos encontrabamos en la biblioteca. Albert y yo solo acompañabamos a Alice, ya que ella tenía un exámen de sus clases extras por lo que tenía que prepararse al máximo. Ya que el primer exámen del año definía si estabas apto para quedarte en las clases extras, y Alice obviamente quería quedarse en ellas.

— ¡Yo nunca le di señales de que me gustara!— susurró el castaño indignado.

— La invitaste a salir— rodé los ojos— eso a veces confunde a una chica— me apoyé levemente en una de las mesas.

— Le dije que era una salida de amigos— se cruzó de brazos.

— Pues eso ya es extraño— la pelirroja le dió una mirada rara a Alb— solo dile que la ves como una amiga, y que no hay sentido para que estén de enemigos— se encogió de hombros.

— Lo haces oír tan fácil— le sacó la lengua.

— ¡Porque lo es, Alb!— exclamé sin paciencia.

— ¡Claro que no lo es!, no quiero dañar sus sentimientos— hizo un puchero dramático— aunque mi ojo se merece una disculpa— acaricio su párpado.

— Dramático— rodé los ojos mientras reía.

— Dramáticas las chicas Weasley, quien las entiende— murmuró él castaño por lo bajo.

Alice rápidamente tomó un pergamino y lo golpeó en la cabeza.

— ¡Auch!— gritó haciendo una cara de disgusto—.Bueno lo siento— arrugó la nariz mientras parpadeaba repetidas veces.

— Eres un idiota, Nott— la pelirroja rodó los ojos mientras alineaba libros en la mesa al frente de nosotros.

— Yo sé que ustedes aman a este idiota— sonrió victorioso.

— Te soportamos— me encogí de hombros.

Albert abrió la boca tratando de decir algo ofendido.

— Por cuestiones de ego diré que eso no me dolió— tarareo para sentarse en una de las sillas.

Sonreí para darle una leve patada y seguir observando a Alice concentrada.

Todo era tranquilidad hasta que me levanté para dejar un libro en su lugar y nuevamente el hombre que se había llevado mis pensamientos toda una semana estaba hablando con una alumna.

MA PETITE | Tom Riddle Donde viven las historias. Descúbrelo ahora