𝐋𝐈𝐄𝐒 𝐀𝐍𝐃 𝐏𝐋𝐀𝐍𝐄𝐒

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Hela Malfoy

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Hela Malfoy.

  Me levanté con una sensación rara en el cuerpo, lo primero en lo que pensé fue: "normal, te has besado con Mattheo Riddle". Castigué durante unos breves segundos a mi mente por traerme ese recuerdo y luego miré hacia mi alrededor dándome cuenta de que ya no me encontraba en la torre de astronomía sino en mi habitación.

  Supuse que fue Mattheo quién me trajo hasta aquí, siendo sincera fue un detalle bonito viniendo de él. No me quise hacer ilusiones de ningún estilo porque yo misma era muy consciente que jamás podría tener una relación con él.

  Me castigué a mí misma por juzgarle tanto, puede que todo lo que él ha sentido siempre ha sido dolor y no es motivo para culparlo. No le volví a juzgar pero tampoco le disculpé por todo lo que hizo.

  Miré la hora y vi que ya casi daban y media por lo que lo único que pude hacer fue ponerme un top negro deportivo de Pansy que hallé entre su montón de ropa y me dejé los pantalones grises de Draco. Me rehice el moño y salí casi que corriendo de nuevo hacia la sala común, pero por el pasillo mi hermano y Pansy me hicieron dar media vuelta y volver de nuevo a mi dormitorio.

—¿Dónde te metiste anoche? Me he despertado y no estabas— me preguntó mi hermano, me pilló por sorpresa dado que no esperaba que me fuera a preguntar y lo diera por alto.

Tambaleé mis pensamientos un par de veces antes de poner una excusa poco mala y hacer que todo se torne en mi contra. Mi hermano esperaba pasivo mi respuesta mientras que Pansy me devoraba con la mirada al saber que algo malo había hecho.

—Me fui a la torre de astronomía y me quedé allí dormida— dije diciendo la verdad de alguna forma. Mi hermano solamente asintió, pero Pansy no muy convencida me dio una mirada rápida.

Pronto estuvimos todos, con ello la sensación incómoda de estar al lado de Mattheo después de lo de anoche. Fingía naturalidad ante el resto, pero Mattheo y sus miradas intensas no ayudaban para nada.

—Bien, tenemos menos de un mes para encontrar algo que ni si quiera el Señor Oscuro es capaz de encontrar, ¿ideas?— La voz de mi hermano fue clara y sus palabras todavía más. Hacer un pequeño guiño a que era imposible encontrarlo hizo que los ánimos decayeran durante unos segundos.

—Probemos hechizos de todo tipo, Hela es buena con la magia obscura así que eso tenemos de nuestra parte por lo menos— optó Pansy ocasionando que las miradas de todos se centrasen en mí, y no me hubiera importado en absoluto sino fuera por la de esos dos hermanos que tanto me inquietan.

—Yo trabajaré con Hela, sé mucho sobre magia negra y la puedo ayudar— aportó Tom mirándome a mí, única y exclusivamente a mí. Noté a Mattheo fulminar a su hermano con la mirada antes de que tomara la palabra para liarlo más todo.

—Padre me enseñó muchos hechizos de localización por si algún día ocurría algo que yo pudiera salvarnos a los dos, así que me uno a Hela— dijo con tranquilidad mientras sacaba un cigarro para fumar.

Quise reprocharle de que en mi habitación ya no se fumaba, aunque Pansy y yo algunas noches dábamos mal ejemplo a esa regla. Las palabras se atascaron en mi garganta hasta que Blaise habló, esos segundos de tensión en los que Mattheo pudo haber hablado de más creo que fueron los peores de mi vida.

—Theodore y yo iremos a buscarlo donde digáis, nosotros sabemos bien de eso— dijo Blaise mientras miraba a Theodore y luego a mi hermano, Draco se mantenía en silencio oyendo las propuestas de todos y de esa misma forma me encontraba yo.

Expectante a lo que el resto organizaba, dando luz verde a sus ideas y dejando en claro mi necesidad por acabar con todo esto, aún sabiendo que una vez cumpla con el trabajo que me mandó, Lord Voldemort volverá a encargarme algo nuevo.

—Pansy y yo preguntaremos a todos los encargados de objetos valiosos del ministerio, también buscaremos en la Orden del Fénix— dijo mi hermano y Pansy le tomó la mano conteniendo una sonrisa de entusiasmo por hacer equipo con él.

—Ya, ¿y cómo piensas entrar ahí?— Fue Theodore quien puso esa pega, mi hermano le miró con esa sonrisa triunfante que tanto le gustaba poner.

—Severus Snape— respondió mi hermano en un leve susurro.

Más propuestas fueron saliendo a medida que el tiempo iba transcurriendo, yo solamente esperaba a que todos se fueran de una vez y me dejaran darme una buena ducha y dormir algo más.

Pasó poco tiempo hasta que todos decidieron que era buen momento para irse, todos excepto Mattheo que se quedó sentado en mi cama con sus codos apoyados en sus rodillas y su cabeza en sus manos. Suspiré sabiendo lo que se me venía encima y negué con la cabeza antes de que alguno habláremos.

—No sé ni cómo empezar— bufó frustrado, me apoyé en su rodilla para agacharme a su altura y mirarlo con detalle. Él me miró a los ojos y algo dentro de mí se removió rápidamente.

—Entiende que no puedo estar contigo— suspiré de una manera suave para que no se enfadara ni hiciera algo malo contra mí. Su ceño se frunció y sus puños se cerraron de inmediato, saltando todas mis alarmas de supervivencia.

—¿Por qué no? Porque soy hijo de Voldemort, ¿es eso Hela? Dime— la fijación y el dolor con lo que expresó esas palabras me hizo sentir incluso mal. No supe qué responder, lo único que hice fue echarme a llorar de nuevo, cansada de todo lo que sucedía.— No llores, joder— bufó quitando las lágrimas de mis ojos y tomando mi cara para besarme.

Aparté mi rostro y me puse en pie, corriendo hacia el baño para encerrarme ahí y oír sus pasos ir hacia el otro lado de la puerta. Lo noté apoyarse y volver a suspirar de nuevo.

—Vete— le pedí en un sollozo, él no se movió ni un poquito porque lo pude haber oído.

—Hela, tienes que salir y dar la cara— me mandó y yo me resigné a seguir llorando oculta tras una puerta para no enfrentarme a mis problemas.

—Solo prométeme que no vas a besarme ni a intentarlo— le rogué con mi voz temblorosa. Oí su suave "venga, sal" y acabé haciéndolo. Una vez lo hice miré sus ojos y tomé su rostro entre mis manos.— No tengo nada en contra de que seas hijo de quien eres, solo no puedo hacerlo, no puedo y no sé darte una explicación por ello— exhalé intentando hacer que él me entienda.

Su mente era como un puzzle al que siempre le faltaba una pieza, siempre estabas a punto de completarlo cuando te dabas cuenta de que te faltaba algo. Creí que sería complicado enfrentarme a eso que estaba en su mente, pero él me lo puso fácil cayendo rendido ante mí.

—Al final lo acabaré consiguiendo, Hela, y ya no por demostrar quién soy ni quién manda sino porque es lo que quiero— de nuevo logró desarrollar algo en mí para poderle creer y darle una oportunidad.

Una oportunidad que iba a costarme muy cara.














¡Hola! Acabo de escribir el capítulo que da fin a la primera temporada de la historia. Quiero que sepáis que la historia, hasta ahora y que tenga pensado, solamente va a tener dos partes.

Me está costando bastante enlazar el tema de la profecía con lo que lo quiero llevar pero al final todo va a tener más o menos sentido.

Quiero aclarar que ésta primera temporada solo es la explicación de la segunda, aquí tan solo doy los primeros pasos de la historia, en la segunda es cuando realmente se va a ver todo lo que interesa.

¡Nos leemos! <3

𝐄𝐔𝐏𝐇𝐎𝐑𝐈𝐀- 𝐌𝐀𝐓𝐓𝐇𝐄𝐎 𝐑𝐈𝐃𝐃𝐋𝐄.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora