Cap. 7: Una luz fulminante

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Ezreal pudo notar cómo el semblante nervioso y ansioso de Lux se convertía en uno de completo terror. Escuchar el nombre de su contrincante le hizo perder esperanzas sobre su futuro como una sobresaliente maga en la God-weapon Academy, pues le parecía absurdo atacar a aquél temible muro de piedra, que era Darius, con lucecitas. Sus manos comenzaron a sudar de manera estrepitosa y su piel pálida se encontraba aún más blanca de lo normal. Entonces, sintiendo náuseas a causa de sus pensamientos catastróficos sobre esa batalla, escuchó cómo su rival lanzaba el hacha que llevaba al hombro dejándola clavada en la protección mágica que la directora gatuna había creado por resguardo a los docentes.

- No estoy de humor para bromas, Fiora. – vociferó con rabia a su amante quien mantenía una sonrisa llena de sorna – si no me das un contrincante digno, dejaré la arena en este instante.

Fiora lo miró con burla y comenzó a caminar hasta donde el hacha se encontraba destrabándola y cargándola con tal facilidad que los alumnos se sorprendieron. Se dirigió a la arena y le devolvió el arma a Darius para luego dirigirse a su sobrina e indicarle que se acercara. Esta última tardó unos segundos en reaccionar ante la petición de su querida tía y, antes de levantarse, Garen ya se encontraba frente a Lux listo para enfrentar a la directora y su mayor rival si era necesario con tal de protegerla.
En el pasado pudo haber permitido lo sucedido y dejar que la batalla se llevara a cabo sin preocuparle el bienestar de la joven pues, desde que ella mostró sus increíbles habilidades mágicas, él había sido ignorado por sus padres y su mal comportamiento se debía a la falta de amor y atención por parte de estos. Jamás se interesaron por los logros y conocimientos adquiridos en batalla de su hijo, pero sí le habían exigido ser guardián de su hermana desde que logró entrar a la academia por un maestro que notó el gran potencial que el chico problemático tenía. Retiró aquellos pensamientos sacudiendo su cabeza de un lado a otro y tomó la mano de Lux para colocarla detrás de él e impedirle el paso hacia una desagradable experiencia en aquella sangrienta arena.

- Te estás excediendo. – avisó con un tono de amenaza en su voz mirando a la directora con rabia – Lux no será tu venganza contra la familia Crownguard. Ella no merece ser desprestigiada por un torpe haragán como Darius. – terminó levantando la voz para que su receptora percibiera aquél mensaje de manera clara y concisa.

- Realmente, tú no tienes autoridad aquí. – expresó con tranquilidad la duelista al tiempo que cruzaba sus brazos y sonreía retando al Crownguard mayor – además, Lux es bastante capaz de derrotar a Darius. La subestimas y eso es algo que en esta escuela no se permite.

- ¡Estás demente! – gritó ya enojado el joven ante la negativa de su antes tía por cambiar los peleadores ya mencionados – la hará trizas y sabes bien que ella debe mantener una reputación...

- Sé bien lo que tu madre quiere y no se lo daré. – respondió de manera determinante la mujer – si Lux no pelea contra Darius, no obtendrá un club y tampoco beneficios de mi parte. Lo mismo va para ti Darius, si abandonas la arena, te expulsaré del club de combate y perderás ciertos privilegios. Recuerda que estas batallas son regidas por consentimiento del Rey Jarvan IV y estarías faltando a sus deseos. – declaró de manera burlesca caminando hacia el palco donde sus colegas se encontraban.

El público permanecía silencioso y expectante a lo que ocurriría, pues era bastante conocido el trato especial a las familias cercanas de la realeza. Los ojos vacilantes del Crownguard mayor se ensancharon al observar el delgado cuerpo de su hermana dirigirse a la arena. Lux lo miró una última vez con esa sonrisa tan amable y cálida que le caracterizaba para luego dirigirse hacia aquél imponente hombre. Cambió el semblante a uno más serio y calculador tomando su cetro con fuerza mientras Darius la observaba como si de una insignificante combatiente se tratara. El silencio en el coliseo le permitió concentrarse y, cerrando sus ojos, sonrió a su contrincante confiada de sus habilidades y el poder mágico dentro suyo.

La mujer perfecta (Darius x Lux)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora