Red Blood[Jungkook]+18

Capítulo 12

—Veo que la tranquilidad no durará mucho—escuche la voz de Jimin resonar un poco más fuerte— pero díganme; ¿Creen que este es el mejor momento adecuado?

—No lo es, sin embargo, no hay razón o motivo alguno por lo cual ustedes se pongan a la defensiva o, ¿sí?

—Estar arriba de la azotea vigilando a mi novia, eso ¿no es una razón suficiente para ponerme a la defensiva? — y al hablar hubo un silencio, pero la sonrisa que aquellos chicos tenían se había ido —Espero con lo que he dicho deje claro las cosas.

Sin más, Jungkook tomo mi mano haciendo que caminara y me alejara de aquel momento bastante incomodo, al salir de la cafetería e ir por los pasillos de la escuela nos fuimos a la parte de atrás donde había algunas bancas, el clima cada vez se podía sentir más friolento.

Estaba molesto, era más que obvio y decir que me estaba viendo aquel hombre sobre el tejado era a que se debía algo, pero, mis ojos estaban sobre las de Jungkook, su mano seguía con los dedos de las uñas largas, estaba frio, muy frio.

Mis lagrimas no tardaron en salir, no sé qué es lo que esta pasando, pero esto no traería nada bueno, empecé a temblar, no sabia si era por el frio o por el miedo que estaba haciéndose presente, Jungkook al darse cuenta volteo a verme, sus manos volvieron a la realidad.

—Princesa— me tomo de la cabeza para así poder verlo— tranquila, no pasa nada...

—Jungkook, ¡Qué es lo que está pasando?

—¿De qué hablas?

—Tus manos...— sentí un nudo en mi garganta— vi como tus manos cambiaron tan repentinamente, tus venas resaltaron en color violeta y tus ojos al cambiar de color...

—¿Todavía no te has dado cuenta? — aquella pregunta me confundió más, pero simplemente me negué moviendo la cabeza y mi lagrima salió más.

¿Qué es lo que debía de darme cuenta? Ahora, esos escenarios que llegan a mi cabeza no es nada normal, desde que vi a Jungkook y he estado a su lado todo ha sido extraño. Me considero una mujer que le gusta conseguir lo que quiere, mis calificaciones siempre han sido las mejores, pero no niego que estar bajo presión de entrar a la universidad me duela, tengo casi 19 años es mucho.

—Amor...

—¿Qué es lo que debo saber?

—Quisiera que recordaras las cosas a mi manera, pero debo de esperar a tu modo. No debo presionarte.

—Eso lo entiendo, pero no me dejes, siento que algo terrible puede pasar y tengo miedo.

Me atrajo hacia su cuerpo.

(...)

Los días pasaron, sin embargo, Jungkook y sus amigos estaban pegados hacia nosotros en el almuerzo ya que cada uno estaba en su respectiva clase, pero en sí mi novio me daba mi espacio y eso me agrada. Al escuchar el timbre de la campana nos dio a entender que el pequeño descanso estaba por llegar, Jungkook se acerco jalando la silla que estaba sobre la banca vacía, cerré la cortina ya que el sol lo molesta un poco.

Recargo su cabeza sobre mi hombro, tomo mi mano estrechando y así poder sentir un poco más de su calor con el mío, tenía un olor peculiar, me gustaba.

—Amor... es viernes y me preguntaba sí quería ir a nuestro hogar— beso mi cuello, me da un como de gracia ya que al estar solos suele siempre besar el área donde mi sangre recorre— ya te dije que... hueles tan bien

Su susurro me hizo reír, pero me queje al sentir como me dio un mordico.

—¡Auch ¡— me queje un poco, pero solo se empezó a reír— Jungkook, cada día debo de cubrir mis heridas con maquillaje.