Capítulo 16

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Al parecer, a ninguno de los dos nos importó haberlo hecho ya una vez. Al llegar a la cabaña, Jungkook cerró la puerta detrás de nosotros, cada paso que dábamos nos comíamos la boca tan desesperados, al mismo tiempo nuestra ropa desaparece en cada movimiento.

Mi cuerpo cayó sobre el colchón, estaba en ropa interior mientras sus manos me acariciaban mis piernas, cintura, brazos, para así llegar a mis hombros. Mis manos estaban sobre los suyos, la imagen mental de ver su espalda, al separarme de sus labios, acaricie su brazo.

— ¿Te gustan?— me sonrió de lado mientras mi mano lo recorría.

— Debió doler, pero debo admitir que es impresionante, como el de la mano— tomé su mano, dando un beso en el corazón tatuado.

— Me alegra que te guste...

—Me gusta más ver esa mano, ese brazo que me toque mientras me hace el amor...— le susurré sobre sus labios.

Sin previo aviso, me volvió a besar, con un movimiento que hice, ahora yo era quien estaba sobre su regazo, mis manos fueron al dobladillo de su boxer, al bajarlo por completo hice mi cabello aún lado para no estorbar.

Mi mano tocó su tronco de arriba hacia abajo, mire sus expresiones así que junte mis piernas.

Di un beso sobre la punta, después mi lengua paso hacia arriba llegando hasta la punta de nuevo para finalmente meter su pene a mi boca, me complace escuchar como jadeó.

No solo eso, sus gemidos, gruñidos, expresiones me hacen entender de que lo estaba haciendo bien, agregando de que Jungkook tomo mi cabello formando una coleta de caballo ejerciendo fuerza, moviendo sus caderas.

Mi mandíbula ya me empezaba a doler, pero saber que me gusta y que a mí me está gustando simplemente me hace excitarme.

Me dolía, incluso las ganas de vomitar se hacían presentes, así que pare. Cuando mi boca se alejó, logré ver el hilo de saliva y de su semen, Jungkook al verlo sonrió, cómo me sostenía del cabello me trajo a sus labios para besarme de nuevo, me recostó quedando ahora sobré mi.

—Lo haces tan bien, que apuesto que esa boquita debe doler...— paso su dedo índice sobre mis labios— ahora, me toca...

Dejó un beso profundo en mis labios haciéndome jadear, después de ahí paso a mi cuello, el recorrido de sus labios por mis pechos, abdomen hasta llegar donde mis bragas se encontraban para después ser deslizadas con sus dientes logró que mi piel se erizara por completo.

Abrió mis piernas con sus manos, sentí como su lengua estaba al punto donde necesitaba atención, ver a Jungkook sobre mis piernas y que su cabellera larga resaltará era lo que más me gustaba en nuestra intimidad.

Muchas veces se habla de una persona al ser su amante, es fácil decirle que la otra persona es libre de aceptar las condiciones o no. Todo será mucho más fácil así, tanto si decidí seguir quedando contigo como si no.

Sabrá que tienes una vida con alguien y que no quieres perderla, pero tampoco a tu amante. Es complicado, pero es algo que sucede. Sin ir más lejos, tenemos un caso que ha copado los medios del corazón durante el último mes: la relación secreta, 

Sin embargo, este no era el caso.

Gemí cuando dos de sus dedos ingresaron en mi, estaba tan frío, mi piernas empezaron a temblar, no podía más y al ver cómo Jungkook aceleró sus movimientos significaba una cosa. Eché mi cabeza sobre la almohada dejando y soltando todo, mi respiración se agitó, lo tenía frente a mí, relamió sus labios, pero noté sus colmillos una vez más.

Sus dedos seguían húmedos.

—Abre la boca.

Y lo hice, abrí la boca como me había dicho, sentí mis propios fluidos sobre mis labios, me estaba probando mientras lo veía y, sus ojos estaban rojos, parecía como si fuera un cordero, siendo la presa para un león que está a punto de comer, una serpiente viendo al ratón que se devorara, un leopardo viendo presa... tan jodidamente sexy.

Sentí su pene sobre mi entrada, solo que está ocasión un condón lo cubría, tenerlo dentro mis paredes vaginales se enredaron sobre su pene, sus manos estaban sobre la cama, por inercia mis piernas llegaron a la altura de su cintura. Lento, hasta que aumentó sus movimientos, no pude evitar gemir, sus gruñidos eran tan placentero.

Pero todo fue más allá cuando su mano fue a mi cuello, ejercicio fuerza haciéndome volver loca, con su fuerza quedé sobre él, se sentó acercándose hasta mi, paso su mano por detrás de mi espalda quitándome mi sostén el cual arrojó por alguna parte del suelo de la cabaña.

Beso uno de mis pechos, el otro lo toco y sus ojos ojos...

—Te quiero ver saltando sobre mi...

Si estaba excitada, esto fue lo doble. Me sostuvo de mi cintura, conoce a moverme en circulos, lento, pero mire sus facciones, hasta que empecé a dar brincos.

Sus besos, cada toque suyo me volvía toda suya, sl de él,solo de Jeon Jungkook.

Narrador omnisciente.

La luz de la luna reflejaba el cuerpo de ambos, una escena bastante erotica, un sentimiento, una conexión, un vínculo detrás que impulsa a querer tener intimidad con una persona en concreto. Esto quiere decir que se involucran aspectos más allá del deseo físico, teniendo la serteza de que nadie más sabía que los podía ver, escuchar.

Su amor era más grande que todos los obstáculos.

Sin embargo, ninguno de los dos se dio cuenta que sobre la rama de un árbol se encontraba una tercera persona que en una trágica noche se convirtió en un ser cómo Jungkook, Yeonjun había regresado a Seúl por Tn.

Al ver cómo la chica que desea se encuentra con alguien más, es la gota que derramó la copa de sangre para dar comienzo a la verdadera guerra qué está por llegar.

 Bien, se viene lo bueno de esta trama

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Red Blood[Jungkook]+18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora