Cuando te vi ✔ COMPLETA

EXTRA 5

Hace días que Elías se graduó con honores de la preparatoria, ahora es un joven con un gran futuro por delante. Se convirtió en un hombre hecho y derecho, todo lo que él sabe aprendió de Gabriel y por supuesto que de mí también aprendió. Que feliz me sentí al verlo ya graduado, hasta ahora él no ha tenido amoríos según me ha dicho Maite. Él se dedicó en sus estudios ya que Gabriel es más que un padre para él, fue su maestro en sus inicios.

Ahora Elías tiene dieciocho años y Maite tiene dieciséis. Estos años no fueron tan complicado como digamos, hemos hecho de todo para que ninguno de los dos resulte incomodo en cualquier situación que se encuentren. Se lo que sienten, hemos hablado con ellos de varios temas y se lo tomaron muy bien. Ambos tienen una madurez bastante alta, saben qué hacer en sus vidas. Son audaces, independientes y lo más importante es que siempre serán mis pequeños.

Puedo ver en ambos lo bien que se llevan, Elías le llevaba a Maite a fiestas de sus amigos de la preparatoria. No tengo idea como lograron, pero de algún modo ellos dos fueron populares, además de hacer actividades extracurriculares. Sus maestros eran asombrados, la mayoría de veces me llamaban de vez en cuando para felicitarme la manera en que educo a mis hijos. Realmente no sé cómo lo logre, recuerdo que alguien una vez me dijo que los hijos es el espejo de sus padres. Eso hice, soy un gran ejemplo de seguir que ellos si han metido la pata, pero no tan seguido.

Ahora si me ascendieron, lo que había estado esperando desde hace algunos años. Tengo un buen sueldo, una buena vida a gusto. Ahora todo se está acomodando lo que alguna vez lo deseaba con tanta fuerza. Ahora estoy aquí en mi puesto que logre con pocos años de experiencia. Vi crecer a mi familia y también a mí misma.

Soy la mujer que alguna vez prometí a mi propia madre, soy el mejor proyecto de mi vida. Siempre estaré en constante cambio. Estoy segura que mi madre estaría orgullosa de mi. He logrado mis propias metas con la ayuda de Gabriel, sin él no sé qué haría.

Me siento orgullosa que Elías ya se graduó de la preparatoria, ahora es un gran paso para el ir a la universidad y luego de eso tiene que verse por sí solo. Pensándolo bien todavía no quiero que se vaya, el junto con su hermana Maite son unidos. Ellos dos aprendieron de mí y de Gabriel, ambos tienen buenas notas. Una excelente asistencia y aparte puntos extra lo que hace que son muy buenos en lo que hacen y más. Maite aprendió más de mí, ahora lo puedo ver claramente.

Gracias a la preparatoria que Elías estudio va hacia una buena universidad por sus notas y por la carta escrita por el director. El futuro de Elías está muy asegurado, en dos días se va, será la primera vez en viajar solo en avión. Me alegra que Elías alcanzo más que mis expectativas, ahora se va ir a estudiar en otro país lo que va resultar difícil para empezar y espero que todo salga bien para él. Todos mis esfuerzos valieron la pena. Ahora me doy cuenta tana razón que tenía mi madre.

Dos años más tarde Maite también se gradúa de la preparatoria y sigue los mismos pasos que su hermano mayor. Elías ayuda a su hermana en acomodarse en un departamento que ella va compartir con más chicas cerca donde vive Elías. Estoy orgullosa lo que es ahora Maite, no puedo creer que mis hijos de un abrir y cerrar de ojos ya estén jóvenes listos para estudiar en otro país.

Lo bueno de esto es que estudian en la misma universidad, solo que la facultad de comunicación no ha sido tan grande como yo imaginaba, ninguno de los dos puede perderse. Al principio de daba miedo mandar a Maite que Gabriel me dio la gran idea de viajar con ella y dejarlo solo. Ni loca, convencí a Gabriel que venga conmigo a dejar a nuestra hija en el lugar donde va vivir estos años de la universidad. A parte conoceremos la universidad y un poco la ciudad que ahora también será el segundo hogar de Elías y Maite.

Elías fue a estudiar Comunicación Audiovisual en España, Maite fue al mismo país a estudiar Comunicación Social, me impresiona lo que escogieron para estudiar, pero lo más importante es que estén juntos, además de que cuiden del uno al otro. Si ese es el sueño de seguir esa carrera, les estamos dando la mejor calidad de vida.

Por un buen tiempo tenía razón en enviarlos a que conozcan al mundo, amigos de Elías y Maite hicieron lo mismo lo que ellos nos lo pidieron con algo de temor. Yo como su madre estuve de acuerdo a la primera, no me importaría cuanto costara. Con mucho gusto hare el último esfuerzo para ellos dos, hare lo que quiera para que ellos estudien y sean buenos en lo que hacen. Sean buenos profesionales y buen ejemplo para los demás.

Ya en España los tres conocimos una gran parte de la universidad, por primera vez visitamos a Elías quien nos esperaba en un parque en el centro del mismo. En ese lugar Elías estaba más emocionado que Maite aprobó en la misma universidad, además lo vi en sus ojos lo contento en vernos. Debió dejarnos por sus clases sin antes de darnos la dirección donde se va quedar Maite. Gabriel tomaba de mi mano mientras que Maite estaba un poco adelantada confirmando la información que nos dio Elías. Encontramos un edificio bastante elegante, ambos le dimos las maletas, todo lo que ella necesita hasta que se perdió dentro del edificio.

Los jóvenes se van y regresan cuando nos necesita o cuando necesitan de su familia. Mi sentimiento es lo mismo que mi madre sintió cuando me fui a estudiar en la universidad, para mí no fue tan difícil porque Gabriel me acompaño y compartimos por primera vez su departamento conmigo. Pude ver el panorama cerca, lo que podemos ser en un futuro. Recuerdo que en esos momentos conocí una nueva faceta de él y lo que puede hacer por mí. Al principio tenía algo de miedo y al tomar toda la confianza todo fue diferente.

Ver crecer a mis hijos fue una maravilla que pudo evidenciar mis ojos.

Vera Cecilia Ellis