Capítulo 10

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LALI

-¿Donde tenes la cabeza La?-Candela me llamó la atención, quedamos en almorzar en su casa, preparó ensalada rusa y milanesas de pollo.
-En... En muchas cosas a la vez-me sinceré- pasaron dos semanas desde mi desencuentro con Vera
-¿Y que onda todo con su ex?
-¿Juan Pedro?
-¡No te hagas la boluda La!-Candela me retó.
-Qué se yo, debe estar con mucho trabajo, la vio a Vera algunos días, no se apareció en el estudio de baile
-Es un divino Peter, no puedo creer que en vez de darle bola a él estés con Vera que todavía le escapa a conocer a tus amigas-elevó sus cejas.
-No escapa a conocerlas-solté un suspiro- estuvo con muchas nauseas..
-¡Le está escapando La! No quiero alterarte pero cada vez te da más vueltas a todo lo que le propones, y si no es porque esta llena de laburo no la conocemos porque se siente mal
-Está embarazada-le recordé lo obvio.
-Pero no justifica el que no te acompañe en las cosas importantes, ¡abrí los ojos La!
Candela estaba desesperada.
-Si a mi no me jode a vos no tiene porque joderte nada de esto-tomé agua.
-Seguí haciéndote la boluda, pero cada día que pasa tu energía está más chupada... estas...
-Cansada, el fin de semana me voy a la casa de la costa de la familia de Vera
-Bueno, está imposible el asunto, que veas que no anda bien... No te veo bien Lali
-Estoy bien-fin, no la escuché más, ignoré todos sus cuestionamientos.

PETER

Mi amigo el Chino me invitó a la fiesta que hizo en un bar, pasaban buena música, me sacó a bailar para levantarme el ánimo.
-¡Arriba! ¡Sos el que mejor baila! Podrías perfectamente conquistar a cualquier persona con tus pasos y encanto-me miró coqueto, estaba molestándome.
Suspiré y negué con la cabeza.
-Mañana tengo que trabajar temprano
-Mañana y pasado... y así se te va a ir la vida-el Chino se cruzó de brazos-¡disfruta de hoy boludo! Necesitas distraerte
-Una cerveza-acepté y mi amigo sonrió.
Me tomé algunas birras, mi cuerpo solito me llevó hasta la pista y bailé.
Estaba por caerme al chocarme a una persona cuando me agarraron del brazo.
-Lali-le sonreí en modo boludo, me alegró el simple hecho de verla en el medio de una fiesta-¿bailas?
Ella no me rechazó, la tomé por la cintura y bailamos... poco a poco nuestros cuerpos se fueron rozando cada vez más, el baile me dio calor.
-Maldita sensual y hot Lali Espósito
Elevó sus cejas y se le formó una sonrisa chiquita.
-No sonrías-se lo pedí y ella no dejó de sonreírme- basta Mariana-la apegué a mi cuerpo.
-Tengo calor Peter-se giró y se alejó, salió del bar y la seguí- mucho mejor..
-¿Seguro?-la miré a la boca y negué con la cabeza- estoy en modo pelotudo, ¿me acompañas a comprar agua?
-Vamos
Su sí fácil me sorprendió.
Llegamos a un kiosko y compré dos aguas, un atado de cigarrillos para mi.
-Qué adicción de mierda... Habiendo tantas cosas para tener de adicción y le das a tu cuerpo veneno-me sacó el cigarrillo de la boca, no alcancé a encenderlo.
-La ansiedad me hizo fumar cada vez más
-¡¿Es mi culpa?!
Nunca esperé esa pregunta.
No quería cargarla con culpa, negué y ella elevó sus cejas.
-Es la ansiedad de la rutina, un poco de todo-esbocé una pequeña sonrisa.
-Creo que estás mintiéndome Juan Pedro... y sé porque, porque a pesar de todo sos buen tipo-apoyó su mano en mi pecho, del lado del corazón- y me haces todo mucho más jodido..
Me besó, Mariana me besó y el calor aumentó, en realidad nunca se apagó, ni cuando salimos del bar.
Rodeó mi cuello con sus brazos y su desesperación por apegarme aún más a su cuerpo me dejó desconcertado.
-¿Estas implementando el método de la cobra? El estrangularme hasta morir-bromeé y ella se rió recuperando el buen humor.
-Tarado-me puteó "cariñosamente"- necesito... Quiero.. Hacer un plan distinto
-Distinto-repetí y ella me hizo señas, acercó su cara a mi oído y me susurró cosas sin sentido, cuando lo mordió suavemente capté lo que en realidad quería.
-No...
-Sí-volvió a besarme.
Todo pasó muy rápido, mi casa estaba a unas cuadras, manejé y llegamos, cerré la puerta de un portazo.
Lali me dejó debajo de su cuerpo mientras besaba mi cuello, cada vez que me acariciaba se me erizaba la piel, estaba disfrutando de algo que era incorrecto, pero.. Lo hacía más excitante.
Cuando la dejé debajo de mi cuerpo entrelacé los dedos de mis manos con los suyos, y mi mente dejó de pensar en lo que está bien y lo que está mal.
La respiración acelerada de Lali en mi oreja me encendía más y más (si es posible).
-Buenas noches.. o buenos días-me saludó y cerró sus ojos, se quedó dormida, desnuda y en mi cama, ¡a la mierda!

LALI

Perfume, ¿desodorante? ¡No! ¡Desodorante y perfume! Pero.. ¡Pero de hombre!
Me desperté sobresaltada y lo vi a Peter Lanzani abrochándose los botones de la camisa.
-Hola-me saludó tímido y se aceleró mi respiración.
Claramente me mandé una cagada, la cagada: coger con el ex de mi actual.
Nerviosa le sonreí cómo si nada y salí de la cama envuelta en las sábanas, busqué por toda la habitación mi ropa para después encerrarme en el baño.
-Listo, bueno me voy-le avisé a Peter-¿me abrís? Hoy no tengo tu otro juego de llaves...
Juego de llaves que le pertenece a Vera.
¡Qué estúpida que fui! ¡Maldita naturaleza humana y hormonas locas!
No pude no involucrarme con Juan Pedro.. ¿y lo peor? Al verlo todo bañado, perfumado y cerrando su camisa me dieron ganas de impedir que siguiera haciendo eso.
-Te abro-me acompañó hasta la puerta, la abrió y nos miramos en silencio- esto no..
-No pasó-no lo dejé hablar, y me escapé, cómo una fugitiva me tomé el colectivo hasta llegar a mi departamento, una vez ahí Vera no estaba, me dejó una nota diciéndome que fue a una nueva empresa para la que la contrataron, me bañé antes de irme a trabajar.
-¡Llegué!-saludé a Gastón con un beso en su mejilla y puse play a la música, me moví inquieta-¿qué me miras?
-¡Tu piel está reluciente hoy! Eso solo puede significar reencuentro con Vera
Creo que mi cara me delató, Gastón en vez de juzgarme se me rió.
-Era tan obvio Lali-soltó un suspiro y palmeó suavecito mi espalda en modo "consuelo"-¿qué onda? Si es buen bailarín... los bailarines son bueno moviéndose y..
Puse mi mano sobre su boca para callarlo.
-Dejá de hablar estupideces, quiero dar mi clase y seguir fingiendo demencia, nada pasó, nada-repetí en voz alta más que nada para convencerme a mi misma de eso.
Mi amigo no volvió a hablarme, el humor se me fue y más cuando lo vi a Peter hablando con una de mis alumnas.
-Arrancamos-los interrumpí sin ninguna necesidad de meterme entre los dos, era temprano para la clase- hoy voy a enseñarles a todos unos pasos re difíciles-metí verso.
Las pobres víctimas (mis alumnos) tuvieron que padecer mi mal humor, me desquité con mucha actividad física, no dejé de dar órdenes.
-Si no espantaste a tus alumnos hoy no sé que onda...-Gastón estaba serio- bajá un cambio La, no seas dura con todo el mundo porque queres ser dura con vos misma... ¿Te mandaste una? Sí, pero es un asunto tuyo, no vuelvas a volver loco a todo tu alrededor
-¿Estas retándome?-elevé mis cejas.
Di media vuelta y me fui, manejé para refugiarme cuanto antes en mi departamento.

-Hola La-Vera besó mi frente- te quedaste dormida en el sillón, ¿pedimos delivery hoy?
-Sí... me baño y.. pedí lo que quieras
Encerrada en el baño intenté no entrar en pánico, me había mandado una grande, y Vera me lo dijo, ama que yo sea transparente... ¿Y sí se da cuenta de que estoy rara? Fin de las oportunidades que tengo para conquistarla.
-Pedí comida china-Vera me sonrió y besó mis labios, ese roce fue torpe, desganado... Intenté recobrar la intensidad de los besos de siempre pero nada cambió, no me subió la temperatura corporal.
La culpa está logrando que no pueda seguir con mi plan principal... Culpa exclusivamente de Juan Pedro Lanzani.
"Y de vos" , ¡hermosa la voz de mi conciencia!

Tirar de la cuerda sale malDonde viven las historias. Descúbrelo ahora