Capítulo 42: ROMEO SE ME CONFIESA!

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Narra Eugenia:


Era miércoles, me levanté a las 8 a.m y me preparé para irme a mi trabajo, que era en la casa de Romeo.


Terminaba el primer mes de la campaña y había que tomar un par de fotos más, esto cada día se me hacía más difícil..


El tenerlo cerca y no poder absolutamente nada me hacía sentirme estúpida.


Sabía que casarme con Royce sería lo mejor, pero me estaba traicionando a mí misma, cada día que pasaba tenía más y más dudas.. dicen que eso le pasa a cualquiera novia que se está por casar.. los nervios, las dudas, etc.


Pero lo mío es diferente, yo sé que lo es.


Yo en ningún momento amé a Royce, lo quiero, lo quiero muchísimo, pero amo a otra persona, y me voy a casar ante dios y voy a estar traicionándolo no solo a él, si no también a mí.


Esto cada día me parecía más una locura, pero ya no podía hacer nada. No había marcha atrás.


Royce estaba emocionado, muy entusiasmado con la boda, se encargó de todos los detalles, yo sólo estoy con la menta en otras cosas y no me importa para nada el casamiento.


Lo que si me preocupa y mucho es mi padre.


Le he mentido y eso me hace ser una peor hija.


Decidimos no invitarlo a la boda, pero cuando vuelva a verme iría con mi esposo y ya estaría casada, con un hombre diferente al que llevé a mi casa hace unos meses.


Se oía horrible y en verdad lo era, eso era horrible.


Lo más incómodo fue entregarle la tarjeta de invitación del casamiento a Romeo hace unas semanas atrás, yo no quería ni siquiera invitarlo, porque eso me haría confundirme aún más y quizá hasta suspender el casamiento en ese mismo momento; pero Royce insistió tanto que tuve que hacerlo.


Con Royce estas últimas semanas nos hemos visto muy poco, supuestamente porque está ''organizando todo'' para que salga todo bien.


Pero me preocupa no verlo tan seguido, aunque pensando bien ni siquiera me hace falta. Ese es otro motivo por el cuál no estoy segura de casarme.



Desayuné y me fui rumbo a la casa de Romeo que quedaba a una hora y media más o menos.

Royce me había prestado uno de sus autos para poder ir a trabajar, y yo acepté no muy convencida, pero fue la segunda opción que me dio.

La primera era comprarme un auto, quería regalarme un auto, y la verdad es que yo no me siento a gusto siendo una mantenida, y no acepté. Entonces me dijo que usará uno de él.


Puse la radio y en ese momento sonaba Marc Anthony, era tan loco saber que lo había conocido, hasta había ido a su fiesta de cumpleaños...

Mi gran sueño... Romeo Santos [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora