sweet baby 1 [+18] (terminada)

7

[Baby Jennie] [♡] [Smut]

El clima el dia de hoy esta horrible, lo único que me gustan de las tormentas es que mi Lili no va al trabajo.

Ahora estamos en la sala buscando un programa interesante para ver.

Estoy asentada entre sus piernas, relajandome con sus caricias en mi abdomen.

—Quieres ver eso?

—La vi ayer, son todas películas repetidas , Lili!

—Que quieres entonces, bebé? Helado? Aún queda un poco.

Quiero helado pero no quiero salir de sus brazos asi que niego ante su pregunta.

—Deja las caricaturas, es mejor que nada.

—Bien. Si me oyes roncar despiertame con un beso.

Su mano se mueve en círculos sobre mi estómago mientras acaricio sus largas piernas.

Un relámpago cae y me apuro a tomar la manta que hay a un lado nuestro y me la tiro encima dejando descubiertos solo mis ojitos.

Mommy Lili me abraza mas fuerte cuando el trueno suena y la casa parece temblar.

—Mi gatita asustadiza. Las tormentas son perfectas para que mommy te cuide

Me doy la vuelta sobre su regazo y abro mi manta para envolver su rostro y el mio bajo la suave tela y darle un beso.

—Mommy me cuida?

—Siempre, o no lo hago?

Le sonrio y la vuelvo a besar sentandome a horcajadas sobre su entrepierna. Ella siempre esta dura para hacerme gemir.

La manta cae y se enrolla en mi cintura porque mis manos ahora acarician su rostro y jalan su cabello mientras me come la boca.

La luz se va y el cuarto queda solo iluminado con las luces de la tormenta.

Ella se rie de mi porque me volví a cubrir con la manta.

—Pareces un fantasma, un fantasma miniatura porque eres pequeña.

—Deje de molestarme, mommy!! Y vaya a buscar las velas, están en el segundo cajón de la cocina.

La oigo encender las velas y saco mi cabeza de la manta. Vuelve a sentarse, y me sonríe.

—Un ambiente muy romántico, o no? Si supiera cocinar te haría una cena.

—Me puede apachurrar. Otro dia cocina.

Le hago un puchero y estiro mis brazos hacia ella para que vuelva a sentarme sobre sus piernas.

—Hermosa, mi gatita es hermosa.

Dejo caer mi cabeza sobre su hombro mirando su rostro perfectamente iluminando con las velas.

Siento sus manos apretar mi trasero sobre la tela de algodón de los shorts, mi centro roza contra su entrepierna y chupo su cuello.

El ambiente cambio.

Me siento erguida y quito la manta que nos cubre, el calor de su cuerpo es tan sofocante que le pido que me saque la camiseta.
Mis pechos erectos bajo su mirada esperan poco para que ella los meta en su boca.

—Tienes unas tetas deliciosas, Ruby. Podria comerlas todo el día.

Mistras mis caderas se mueven contra su pene, ella toma entre sus
manos mis pezones y los pellizca un poco para hacerme gemir de dolor.
Los chupa y deja marcas al rededor de mis pezones con su boca.

—Eres mía, no es así, pequeña?

—S..si..Mommy, soy suya..Aah

Aprieta mis caderas contra su pene para estimularme y hacerme gemir mas duro.