𝐋𝐎𝐑𝐄𝐋𝐀𝐈 ↑𝓓𝓪𝓻𝔂𝓵 𝓓𝓲𝔁𝓸𝓷

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DEJÉ de pintar una de las paredes junto a unos niños con unas tizas al ver a Daryl salir del bloque
Niños, seguid vosotros, ¿vale? No os peleeis por los colores -los señalé con una sonrisa para luego trotar hacia mi objetivo y tirarme a su espalda escuchando su risa ronca- buenos días
No me gusta despertarme y ver que me has cambiado por un panda de críos que chillan y corretean -me dijo colocando sus manos encima de las mismas en su pecho-
No lo haré más -besé su mejilla para luego bajarme de su espalda y seguir caminando a su lado-
Buenos días, señor y señora Dixon -nos saludó el doctor-
¿Qué tal, De. S? -respondió Daryl-
Buenos días, Daryl y Lorelai -nos saludo Katie, la madre de uno de los niños-
Buenos días, Lorelai. Buenos días, Daryl -escuché a otra persona que no reconocí ya que caminaba hacia donde estaba Carol-
Buenos días a todos -saludé paraq luego sonreírle a Carol-
Huele bien -le dijo Daryl-
¿No te sientes celosa por todo esto, Lorelai? -se burló Carol-
Temo decir que si, yo lo conocí primero -seguí su broma para luego pasar el brazo de Daryl por mis hombros-
Dejadlo -pidió Daryl empezando a comer- Rick ha traído a mucha gente también
Últimamente no -negó Carol mientras me daba mi cuenco del desayuno- si das refugio al fugitivo y comida al hambriento, tendrás que aprender a vivir rodeado de amor
A mí me gusta -me encogí de hombros saludando a alguien con la mano que hacía el mismo gesto desde lejos-
Os quiero enseñar algo. Patrick, sustitúyeme por favor -pidió Carol-
Sí, señora -le dijo el chico de gafas- Señor y señora Dixon. Quería daros las gracias por traernos ese cuervo ayer. Fue un auténtico festín. Sería un honor estrechar sus manos
Guarro -reprimí una risa cuando Daryl chupó todos sus dedos y luego apretó sus manos- es un placer, Patrick
Gracias -sonrió el chico a lo que yo besé su cabeza rápidamente y fui junto a Carol y Daryl-
¡Lorelai! -una niña llamada Sam empezó a correr hacia donde estaba escalando hacia mis brazos-
¡Me has robado la cera! -señaló un niño, Luke-
Creo que tienes que volver a tu trabajo de niñera -rió Daryl a lo que yo le saqué la lengua mientras los dinos niños tiraban de mi y yo iba junto a los demás niños-
Vale, vale, me conservo bien pero no soy de metal -reí separando a los niños- Luke, usa mis ceras. Sam, no tomes las cosas de los demás sin su permiso, ¿vale?
Sí, Lorelai -dijeron los dos al unísono para luego ponerse a pintar-

TENEMOS que irnos antes de que esos Gremlins vuelvan al ataque -le dije a Daryl llegando a su lado-
Hola. Iba a buscarte -le dijo el novio de Beth, Zach. Luego se besaron-
¿Qué pasa? -le preguntó la rubia-
El consejo ha dicho que los del carbón no van a ir esta vez -le explicó Zach- andan cortos de gente. Así que he pensando ir con ellos
Cuanto terminen su momento cliché, avísame. Voy a despedirme de Carl -palmeé la mano de Daryl para luego ir tras el nombrado-
¿Ya te vas? -me preguntó Carl-
Sí, volveré en unas horas -besé su frente a pesar de que estaba en su época adolescente y todo le parecía vergonzoso-
Llévatelo. Devuélvemelo cuando vuelvas -Carl colocó su sombrero en mi cabeza-
Un honor -hice una reverencia con diversión para besar por última vez su mejilla e irme donde estaban los demás-

ESTÁBAMOS por fuera del supermercado esperando a que los caminantes salieran de su escondite hasta que Zach habló
Creo que ya lo tengo -miró a Daryl a lo que yo sonreí con diversión-
¿El qué? -preguntó Michonne-
Intenta averiguar a qué se dedicaba Daryl antes -le expliqué mientras estaba entre las piernas de este abrazándolo-
Lleva intentándolo seis semanas -añadió Daryl-
Voy a mi ritmo.  Una idea al día -respondió Zach-
Dispara -le pidió metafóricamente Daryl-
Por cómo eres en la prisión, estás en el consejo, sabes seguir rastros, ayudas a los demás, pero sigues siendo algo hosco -explicó el menor mientras yo lo miraba desde el pecho de Daryl- me voy a mojar. Poli de homicidios
¿Qué os hace tanta gracia? -preguntó Daryl cuando me giré hacia Michonne y las dos estallamos a carcajadas-
Nada. Te pega mucho -retuvo su risa Michonne-
En realidad, tiene razón. Era de la secreta -mintió Daryl-
¿En serio? -preguntó Zach-
Sí. No me gusta hablar de eso porque aquello era una mierda -dijo Daryl para luego retener una risa-
Te está tomando el pelo, Zach -palmeé su hombro. Nos separamos del cristal cuando un caminante chocó contra este-
¿Vamos allá, inspector? -se burló Michonne-
Vamos -aceptó Daryl. Matamos a un par de caminantes y los fuimos sacando-
Entramos y no nos separamos durante el barrido -nos dijo Sasha- Después todos sabéis lo que hay que buscar. ¿Alguna duda?
¿Ha habido alguna vez que no me dieras órdenes? -le preguntó su hermano-
Tuviste unos años antes de nacer yo -le respondió Sasha a lo que yo sonreí con diversión para luego entrar-

ÍBAMOS en silencio por los pasillos tomando lo necesario e útil hasta que escuché un gran estruendo
¿Estás bien, Bob? -le pregunté tras llegar a donde estaba debajo de una estantería- ¿Te has cortado o algo?
No puedo mover el pie -me respondió-
Vale. Está atrapado -dijo Daryl para luego levantar la estantería-
Iba muy rápido y choqué con las botellas -explicó Bob-
Has tenido suerte. Sí te hubiera pillado peor al caer... -comenzó Tyreese pero de la nada empezaron a caer caminantes del techo-
Tenemos que irnos -les dije para empezar a pelear contra los muertos- mira que eres feo...
Lorelai -me llamó Bob a lo que lo miré mientras mataba a uno-
Ya voy, Bob. No te muevas, aguanta -le pedí empezando a caminar. Abrí la boca sorprendida cuando vi algo enorme en el techo apunto de caer por lo que corrí de allí justo a tiempo para luego ir hacia donde estaban los demás- ¡Zach! Tenemos que ayudarlo...
Lorelai, ya no podemos -Michonne sujetó mi brazo tirando de este para empezar a irnos-

GRACIAS -murmuré cuando Daryl empezó a masajear mis hombros mientras ambos estábamos sentados en la cama-
¿Estás bien? -me preguntó besando mi cuello rápidamente-
Sí. ¿Cómo está Beth? -le pregunté apoyando mi espalda en su pecho y usando sus brazos como abrazo-
Dice que está bien -me respondió apoyando su barbilla en mi cabeza- pero no lo está. Preferí dejarla tranquila
Está bien -asentí con la cabeza para acurrucarme más a su abrazo- es verdad lo que dijiste aquella vez
¿El qué? -me preguntó acariciando mis brazos-
Que lo bueno también acaba. Suele ser pronto -le respondí para luego cerrar los ojos-