𝐋𝐎𝐑𝐄𝐋𝐀𝐈 ↑𝓓𝓪𝓻𝔂𝓵 𝓓𝓲𝔁𝓸𝓷

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¿ENTONCES no me amas? -hice un pucherito siguiéndole por el bosque tras nuestra próxima comida. Amaba ese tipo de preguntas porque ya podía visualizar su intento de ocultar una sonrisa divertida-
Lorelai, ¿recuerdas que no tienes cinco años? -me preguntó Daryl tirando de mi mano para no quedarme muy atrás-
Pero...¿no me amas? -repetí. Una sonrisa apareció en mis labios cuando me besó por lo que correspondí su beso- ¿Eso es un sí?
Sí -rodó los ojos para luego girarse rápidamente y lanzar una flecha- vamos
¿Este es tu regalo de aniversario? -me burlé caminando junto a él-
No sabes ni que día es hoy -replicó el cazador-
Odio que sepas en lo que pienso -me crucé de brazos-
Yo no. Así sé cuándo puedo hacer esto -dijo para luego volver besarme- y saber que no estás enfadada. Ya no tienes el ceño fruncido
Te odio -mentí-
También se que me amas -se encogió de hombros. Ambos dejamos de caminata sorprendidos cuando vimos a Shane apuntarnos con el arma para luego ver al venado mordisqueando por un caminante-
Mierda -murmuré-
Joder. Qué hijo de puta -insultó Daryl- ¡Era mío! Miradlo ahora, todo mordisqueado por este sucio y asqueroso cabrón portador de mierda
Cálmate, ya es inútil -le dijo Dale-
¿Tú qué sabrás, viejo? -fue hacia él. En que momento la calma y el amor se van a la mierda- coge tu estúpido gorro y vuélvete al estanque dorado. Hemos seguido a este bicho varios kilómetros. Voy a llevármelo al campamento y cocinarlo, comeremos venado. Podemos cortarle esta parte mordida de aquí
Daryl -negué con la cabeza mientras le devolvía sus flechas- por ahora tenemos las ardillas y encontraremos otro pronto
Está bien -afirmó mi novio. La verdad me resulta ridículo llamarlo así porque esa palabra no se acerca ni siquiera a lo que siento por él. La boca del caminante empezó a abrirse de nuevo- tíos, ¿qué os pasa? Hay que darles en el cerebro. ¿No lo sabéis?
Gruñón -murmuré caminando a su lado. Solté una pequeña risa cuando me dió un empujoncito pero luego seguimos caminando hacia donde estaban los demás-
¡Merle! Mueve tu feo culo y sal -lo llamó Daryl- hemos traído ardillas. Para estofar
Hola -saludé a los que estaban junto a la caravana-
No hay manera de que salgas sin que los niños pregunten por ti -rió Jacqui a lo que yo le sonreí y entré al vehículo-
¡Lore! -Carl saltó a mis brazos como un mono haciéndome reír mientras notaba a Sophia abrazar mis piernas-
Hola, niños -besé su frente dejándolo en el sofá para luego tomar a Sophia y repetir la acción- os he hecho algo
Qué bonito -sonrió Sophia cuando coloqué una diadema de ramas y flores en su pelo- parezco un hada
Y para ti, he hecho lo mejor que he podido -reí sacando una figurita de un animalito que había hecho con el trozo de un tronco-
WoW -abrió la boca tomando el animal-
Sí, digamos que Daryl no es un hombre de mucha... -comencé pero me callé al escuchar gritos provenientes del nombrado- enseguida vengo. ¿Qué está pasando?
Rick esposó a Merle en una terraza y Daryl se ha puesto a pelear -explicó Amy mientras veía como Shane le hacía una llave y Rick hablaba con él-
Vale, Merle tal vez tenga nombre de perro pero no es uno. ¿Cómo lo pudo dejar ahí?

MI mano acariciaba la espalda de Daryl mientras este perfeccionaba sus flechas
¿Por qué arriesgar tu vida por un gilipollas como Merle? -preguntó Shane caminando junto a Rick-
Piensa bien lo que dices -lo miró Daryl-
Ya lo he hecho -le respondió Shane- quería decir gilipollas y Merle Dixon. No te daría un vaso de agua, aunque te murieras de sed
Lo que él hiciera o no, no me interesa. Yo no puedo dejar que nadie se muera de sed. De sed y de frío -le respondió Rick- lo dejamos como a un animal en una trampa, esa no es forma de morir y menos para un ser humano
Y vas con Daryl, ¿ese es tu gran plan? -le preguntó Lori-
¡Por favor! -pidió Glenn cuando Rick lo miró-
Tú sabes ir. Has estado allí y has salido sin problemas, tú lo dijiste -le respondió Rick- pedírtelo no es justo, pero le sentiría mucho mejor si vinieras, y ella también
Estupendo, ahora arriesgamos tres hombres -dijo sarcástico Shane. ¿Alguien le puede poner un trozo de cinta adhesiva a la boca?-
Cuatro -se sumó T-Dog-
Mi día mejora por momentos, ¿no? -murmuró sarcástico Daryl-
Solo quieren ayudar -le susurré apoyando mi cabeza en su hombro-
¿Ves a algún otro voluntario para salvarle el culo a tu hermano? -preguntó T-Dog-
Y tú, ¿por qué? -le preguntó Daryl-
No lo entenderías. No hablas mi idioma -le respondió él-
Ya son cuatro -le dijo Rick-
No solo cuatro. Nos estás poniendo en peligro a todos. Te lo advierto, Rick. Ya viste a ese caminante, estaba aquí, llegó hasta el campamento -le dijo Shane- están saliendo de las ciudades, y si vienen, necesitamos a todos. Os necesitamos para proteger esto
Lo que más necesitáis son más armas -le respondió Rick-
Claro -afirmó Glenn a lo que todos lo miramos- las armas
¿Qué armas, Glenn? -le pregunté-
Seis escopetas, dos rifles y más de una docena de revólveres -se adelantó Rick- limpié la armería de la comisaría antes de irme. La bolsa se me cayó cuando me rodearon, y siguen ahí, en la calle, esperando a que la coja
¿Munición? -preguntó Shane-
Setecientas balas variadas -le respondió Rick-
Has atravesado el infierno para encontrarnos. Llegas aquí, ¿y vas a darte la vuelta e irte? -preguntó su esposa-
Papá, yo no quiero que vayas -añadió Carl-
A la mierda las armas. Shane tiene razón. Merle Dixon no vale la vida de ninguno, ni siquiera con esas armas -siguió Lori-
Lori, con todo el respeto, Merle no merece estar encerrado en una terraza porque lo hayamos dejado ahí, a pesar de como sea, sigue siendo un humano -le respondí- tal vez tú no quieras ir, pero hay algunas personas que saben que deben hacerlo

VOY a ir -le dije a Daryl mientras lo veía en la parte de detrás de un camión-
¿Por qué? -me preguntó cruzándose de brazos-
Porque lo conozco desde que tenía 20 años -le respondí- vamos, Daryl, es tu hermano. No pensarás que lo dejaré ahí, ¿verdad?
No te separes de mí -estiró su mano para ayudarme a subir-
Gracias -besé su mejilla para luego sentarme en un lado-

EN algún momento me dormí hasta que sentí como me movían un poco
Lore, ya llegamos -me dijo Daryl-
Lo encontraremos -afirmé tras salir de la camioneta. Empezamos a caminar hasta pasar una verja-
¿Primero Merle o las armas? -preguntó Rick-
Merle. Eso ni se discute siquiera -le dijo Daryl-
Sí se hace -afirmó Rick para luego mirar a Glenn- tú conoces el lugar, tú decides
Merle está más cerca -afirmó el asiático- las armas están en otra dirección. Merle primero

TRAS ENTRAR a una tienda de ropa, encontramos a un caminante por lo que Daryl empezó a acercarse a este
Vaya. Qué tía más fea -murmuró para luego dispararle una flecha. Sonreí con diversión para luego empezar a caminar rápidamente hacia la azotea junto a los demás. Hice una mueca cuando Daryl empezó a gritar mientras veía una sierra y la mano de Merle en el suelo. Dejé mi pequeña mochila en el suelo y lo abracé con fuerza-