𝐋𝐎𝐑𝐄𝐋𝐀𝐈 ↑𝓓𝓪𝓻𝔂𝓵 𝓓𝓲𝔁𝓸𝓷

⁰⁴³

SALIMOS de nuestro escondite tras la señal de Daryl.
Sí, mejor alejarse de las carreteras. Nos adentraremos en ese bosque -señaló él dejando pasar a los demás. Cargué bien a Judith en mis brazos y seguí caminando a pesar de ver a Dwight pelear contra un caminante y a los demás mirándolo. Tiempo más adelante les dije que podían descansar un poco y bajé la cabeza cuando Judith colocó sus manitas en mis mejillas y ladeó su cabeza-
Estoy bien, Judith. No pasa nada -le sonreí besando su frente. Besé sus mejillas y su nariz sacándole una sonrisa- pronto terminaremos con esto, Jud. Y conseguiremos lo que Carl quería, vivir sin tener que matar a otros

¿VAS bien? -me preguntó Daryl cuando empezamos a caminar. Yo asentí con la cabeza viendo por encima de mi hombro a Judith en el arnés de mi espalda dormida-
Carl no quería que estuviera mal. Me pidió que siguiera adelante por él así que lo haré -le expliqué bajando la mano para encontrar la suya- y por eso tengo que pedirte ayuda. No puedo hacerlo yo sola
Estoy aquí -aceptó Daryl segundos después- a pesar de querer ayudarte, llevará su tiempo.  Duele perder a alguien, no me puedo imaginar perder a un hijo. Porque eso es lo que era para ti Carl, ¿no?
Sí, le hice una promesa a su madre -le dije para luego besar su mejilla- ¿Podemos hablar de esto más tarde? Ahora solo quiero llevarlos a un lugar seguro
Está bien -aseguró Daryl. Los dos seguimos delante de los demás lara ver un pequeño pantano donde habían un par de caminantes-
Tenemos que tener cuidado -dijo Tara-
Podemos conseguirlo -le dijo Rosita-
Debemos abrirnos lado y despejar el camino para los demás -les dijo Daryl-
Contad conmigo -dijo Scott-
Si me dejáis la ballesta... -comenzó Dwight-
No es buena idea -negué con la cabeza- muchos de aquí te tirarían a los caminantes sin pensarlo dos veces. Quédate ahí

MALDITO bicho asqueroso -empecé a golpear al caminante acuático que me había asustado saliendo del agua. Me junté con Rosita y matamos a algunos más hasta despejar el pantano.
¡Te dije que esperaras! -le gritó Daryl a Tara tras llegar- podría estar contándole todo a los Salvadores. Negan podría estar de camino.
No, no va a venir -negó Tara- no va a venir. Les ha desviado. Venían hacia aquí y nos ha salvado.
Tiene razón, es verdad. Yo lo vi -aceptó Rosita-
Me la suda lo que haya hecho -le dijo Daryl- puede quedarse con ellos, volver, huir, lo que le dé la gana. Cuando encuentre a ese cabrón, le...
¿Por qué no nos calmamos un poco? -le pedí aún entreteniendo a Judith con dos calcetines en mis manos-
Vámonos -Daryl se dió cuenta de lo que pedía para luego empezar a caminar-

LLEGAMOS a Hilltop.
Las puertas se abrieron y me abracé más al brazo libre de Daryl, donde no estaba Judith, ante la mirada de todos.
La sonrisa de algunos cayeron cuando Daryl negó con la cabeza y pasaron a muecas de dolor y lágrimas.
Me acerqué a Enid y la abracé con fuerza dejándola llorar en mi hombro aún notando la mirada de Carol y Daryl en mi.
Lo siento -le susurré acariciando su espalda. Las dos nos quedamos en el suelo y poco a poco fui contagiada por su llanto-

RICK y Michonne habían llegado.
Tomé a Judith del suelo donde estaba intentando hacer las mismas marionetas con calcetines que yo y la dejé en los brazos de su padre.
Pude levantar la cabeza cuando Rick apoyó su mano en mi hombro.
La mirada que me dió me hizo quitar parte de la culpabilidad que sentía.
Había roto la promesa que le hice a Lori de mantenerlo a salvo y había fallado a Rick al dejar que su hijo muriera
Apoyé mi mano fría y pálida encima de la suya y sonreí como pude.
Volvió a dejar a Judith en mis brazos tras abrazarla y se fue.
¿Necesitas algo? -me preguntó Daryl colocando una mano en mi hombro. Levanté la cabeza para verlo y limpié un poco de sangre que tenía en su frente-
No. Gracias -le dije. Daryl dejó un beso en mis labios y yo se lo correspondí. No sabía la falta que me hacía ese gesto después de todo. Ambos dejamos una sonrisa salir de nuestros labios cuando Judith separó nuestras caras con el calcetín con ojos en su mano- no seas celosa, Judith. Tengo amor para los dos
Vuelvo enseguida -Daryl soltó una pequeña risa para luego irse. Volví a mirar a Judith y me encogí de hombros para seguir con nuestro juego de marionetas-

FRUNCÍ el ceño cuando Michonne apareció dándome una carta
Leela -me pidió para luego sentarse a mi lado. Suspiré tras reconocer la letra de Carl en mi nombre escrito en el papel y lo abrí-
“No te sientas culpable, Lorelai.
Te conozco desde hace años y sé que en cuanto leas esta carta aún pensarás que es tu culpa por no haberme protegido lo suficiente pero no es verdad.
Has estado ahí en todos los momentos que yo considero importantes y recuerdo.
Como cuando enfermé y me cuidaste.
Cuando leías los comics conmigo por la noche.
Cuando tomabas todo tu amor y tiempo en pasarlo conmigo.
Seguramente recuerdes tantas cosas como yo así que no perderé el tiempo.
Gracias por ser mi figura materna en estos años. Me has hecho sentir especial, amado y en un hogar desde que apareciste en mi vida.
Llora por mi, pero sigue adelante.
Sigue haciendo esas bromas para mejorar los momentos tensos, ríete, haz esos bailes tan cutres, inventa nuevas historias, crea recuerdos que contar a Judith y no te quedes sola.
Me he dado cuenta de que la soledad y tú no sois amigas.
Sigue con Daryl, quiérelo, incluso moléstalo con tus bromas pesadas pero no te separes de él. Es tu punto de apoyo, todos necesitamos uno.
Gracias por hacer momentos inolvidables conmigo, por darme amor con cada beso en mi frente y por tus abrazos que curaría cualquier corazón.
Te quiero, mamá.
Carl"
Doblé de nuevo el papel con cuidado y apoyé mi cabeza en el hombro de Michonne.
Esta vez las lágrimas eran de felicidad.
Ese niño me conocía bastante bien
Lo vamos a extrañar, Michonne -aseguré para luego mirarle a los ojos- pero es verdad lo que dice, tenemos que seguir adelante

Carl...