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HABÍA visto a Michonne, Rick y Judith pasear y reír por varios lugares de Alexandria.
Y eso solo me hacía pensar en el futuro.
Quité los pensamientos de mi cerebro para contarme en matar a los caminantes que estaban en un casa tratando de salir.
Maté a un caminante que estaba atacando a Cyndie mientras que Rick, Daryl y Rosita se encargaban de otros.
¿Estás bien? -le pregunté a lo que ella asintió-
Pero he vuelto a abrírmela -señaló su mano vendada-
¿Qué hay de la unidad cinco? Deberían estar aquí -dijo Rosita-
Zona cinco, ¿qué hay? -preguntó Rick por el walkie-



BEA -Cyndie llamó a la chica que estaba en el suelo- Bea. Despierta
¿Estás bien? -le preguntó Rick-
Sí. Eso creo -aceptó Bea con una mueca-
¿Qué ha pasado? -preguntó Rick-
No lo sé. Arat os digo zona limpia y nos dirigimos a la carretera, y después, no sé, creí que me golpearon por detrás -explicó Bea tocando su cabeza-
¿Y dónde está Arat? -le pregunté-
No lo sé -respondió ella para luego levantarse-
Quien lo haya hecho se la ha llevado -nos dijo Maggie para luego enseñar sus armas y el walkie-



HAY que encontrarla -nos dijo Rick tras llegar a una caseta-
¿Lo saben los Salvadores? -preguntó Cyndie-
Aún no -negó Carol- creen que Arat tiene guardia esta noche. Por la mañana, lo sabrán
Podría estar muerta ya -nos dijo Maggie-
Si no averiguamos lo que ha pasado, el Santuario se marchará -Carol miró a Rick-
Si eso pasa, no acabaremos la obra antes de que suba el agua -nos dijo Rick- perderemos el puente.
Oíd -Jerry levantó su mano pidiendo permiso a lo que sonreí con ternura- si cogemos al asesino, ¿qué? ¿Quién decide que hacer? ¿Será un Gregory o...un Negan?
Quienquiera que sea, cuando sea el momento, tendrá su merecido -respondió Cyndie tras unos segundos en silencio-
Buscad una pareja de confianza. Vamos a buscar hasta que la encontremos -afirmó Rick-



CAMINABA junto a Maggie por el bosque en silencio hasta que decidí hablar
Oye, Maggie, ¿cómo le dijiste a Glenn que estabas embarazada? -le pregunté aún caminando a su lado-
Solo se lo conté tras saberlo, ya sabes, tras haberoslo dicho a Aaron y a ti y encontrarlo -explicó Maggie. Luego se paró y una pequeña sonrisa salió de sus labios- ¿Lo estás?
Eso parece -le dije con una sonrisa creciendo en mis labios- no sé cómo decírselo a Daryl. Ni cuándo
No tiene que ser en un lugar o momento especial. Lo que le vas a decir hace el momento único, Lore -me explicó Maggie llegando hasta mi lado de nuevo- Glenn se preguntaba cuando pasaría...
¿De verdad? -solté una pequeña risa-
Sí, siempre lo decía, que serías buena madre. Que adorabas mucho a los niños y no podía esperar a ver a tu hijo o hija -explicó Maggie, la miré con una sonrisa e iba a hablar pero se escuchó un ruido. Caminamos más rápido hasta llegar a donde había un caminante arrastrándose- yo me encargo
Creo que me hago una idea de quién se llevó a Arat -le dije tras ver el arma en otro caminante. Tomé la mano de Maggie para que me siguiera y comenzamos a caminar-




LLEGAMOS al lugar y fuimos a donde el grupo de las Ocean Side apuntaban a Arat
Bea. No pasa nada -le dijo Cyndie cuando Bea nos apuntó con su arma-
Mataste a Justin con eso, ¿verdad? -le preguntó sin bajar mi pistola al igual que ella-
Mató a mi marido -respondió Bea. Mordí mi labio indecisa y bajé mi pistola lentamente-
La gente se enterará -les dijo Maggie-
Ella es la última -respondió Cyndie- después, se acabó.
Sé que parece eso, pero no acabará. Será más peligroso para todas si se enteran de quienes la han matado. Acabará peor, Cyndie -le expliqué-
Esta era nuestra casa. Mi abuela y mi madre encontraron este lugar. Para ese entonces, éramos muchos -me respondió Cyndie con dolor- hombres y mujeres. Niños. Mi madre y yo hicimos un huerto. Mi hermano y yo jugábamos aquí mismo. Entonces, llegaron los Salvadores. Y Simon quería lo que teníamos. Nos dió un último aviso. Entonces huimos. E intentamos olvidar. Pero, entonces, llegó vuestra gente y nos pidió que lucháramos. Lo hicimos, porque no podíamos olvidar. Cuando Rick paró la guerra, aceptamos porque no había elección. Hasta que ahorcarste a Gregory, Maggie. Entonces, supimos que las reglas de Rick no son las únicas. Nos mostraste el camino. Era el momento.
¿Habéis hecho esto por mi culpa? -preguntó Maggie-
Asesinaron a mi madre -sollozó Cyndie- ella disparó a mi hermano. Aquí mismo. Y se lo llevaron todo porque podían.
Por favor. Ya no es así, ¿vale? Ahora soy de los vuestros -nos miró Arat-
¿Lo hiciste? -le preguntó Maggie-
Simon también me habría matado -respondió Arat-
¡Me pudiste que suplicara por su vida! -le recordó Cyndie- él lloraba y tú sonreíste. Te dije que lo quería. Lo necesitaba. Solo tenía 11 años. ¿Y qué dijiste?
No me acuerdo -le respondió Arat aún con la cabeza hacia abajo-
¡Dilo! -pidió Cyndie-
¡Por favor! -nos miró Arat. Yo miraba estupefacta la escena sin saber que decir o hacer-
¿Qué dijiste? -le preguntó Maggie-
Sin excepciones -respondió Arat para luego mirarnos. Maggie me miró y yo a ella. Tomó mi mano temblorosa mientras yo mordía mi labio inferior y seguía caminando a su lado-
















𝐋𝐎𝐑𝐄𝐋𝐀𝐈 ↑𝓓𝓪𝓻𝔂𝓵 𝓓𝓲𝔁𝓸𝓷Donde viven las historias. Descúbrelo ahora