Consequences #𝟐 |𝐉𝐮𝐧𝐠𝐤𝐨𝐨𝐤 ✔

Cuatro

                        Hyeri;

—Toma. Alimentate mucho para que seas una mujer increíble como tu tía —dice Aisha sirviéndole más carne a Hyeji quién sonríe y comienza a comer de esta como si fuera la carne más deliciosa del mundo.

—Y pensar que era una bebita como quién dice ayer —sonríe Yirem acariciando el pelo de Hyeji.

—Creció rápido —dije sonriendo. Luego miré a mi amiga—. Pero nuestro futuro bebé tampoco se queda atrás –bromeo indicando la pequeña panzita que se le estaba formando a Yirem.

—Esta criaturita también va a ser muy mona —sonrie Aisha como si hablara con el bebé de Yirem.

—¿Y tú cuando piensas darnos el orgullo de ser tías? —digo yo mirando a Aisha.

—Pues para que sepan van a esperar mucho —aclara—. Porque Jimin y yo no tenemos aún ideas de crear una familia.

—Claro que no —dice Yirem—. Primero tienen que casarse.

—Estamos bien así, gracias —dice y Yirem y yo soltamos una pequeña risita.

—¿Y tú y Tae? Se casarán pronto. —miro a Yirem.

—Dentro de algunos meses —sonrió Yirem como toda enamorada—. Me siento tan feliz en estos días.

—Pues se te vé —asiente Aisha.

—Que bueno que luego de algunos días podemos reunirnos así. La verdad es que con nuestros trabajos se nos hace dificil —comenta Yirem.

—A partir de ahora véamonos en cualquier oportunidad —dije yo—. No podemos perder las conexiones –digo divertida.

—¿Y a ti? —me mira Aisha luego de tragar—. ¿Cómo te va con Jungkook?. Me imagino que bien pero aún así me permito preguntar.

Sonreí divertida.

—No te equivocas —dije y tomé un poco de agua—. Estamos bien. De hecho, estamos mejor que nunca –dije feliz.

—Omma y appa ni siquiera discuten —habla Hyeji captando nuestra atención y la miro encariñada—. Son los mejores padres del mundo.

Sonreí y besé su mejilla.

—¿Estás orgullosa de tus padres? —la mira Aisha y la pequeña asiente una y otra vez.

—Que linda —ríe levemente Yirem.

Luego de la tarde con mis amigas, Hyeji y yo nos dirigimos a casa. A penas llegamos la conducí al baño y yo me dirigí a mi cuarto a cambiarme de ropa y brindarme a ayudar a Ana en cualquier cosa que necesitase o le hiciera falta algo de ayuda.

—Realmente no hace falta- —intenta negarse ella pero me le planto, seria.

—Ana me parece mentira que llevemos conviviendo tanto tiempo y aún te rehuses a dejarme ayudarte —protesto pareciendo indignada. Pero la verdad si un poquito enfadada.

—Disculpe, señora Jeon. Es solo que-

—¿De nuevo con el señora? —resoplé riendo y negué desaprobatoria—. No me llames así. Dime Hyeri. Hye-ri –le repito entre lineas.

—Vale, Hyeri —suspira como si no le quedase más remedio.

—Ahora dejame ayudarte —protesto—. Terminaré los fídeos. Tu ve cocinando la carne.

Ella termina asintiendo y yo sonrío satisfecha por lograr mi propósito.

;;;

—¿Y appa porque no ha llegado? —me mira Hyeji mientras hacía un pequeño puchero y esta vez era yo quién leía un cuento para ella.