Mirt "Amor, Dolor y Traición" Cap. 3

Capítulo 58 "En El Hogar"

Recuerden que me pueden encontrar en instagram como @liz.valk666 ahí subo avances, información y demás cosas relacionadas con mis historias.

Sin más que decir, que tengan una excelente noche, y que disfruten su lectura 🤗

La mañana la sorprendió con los labios de Mirt aferrándose a los suyos, eran las seis de la mañana y él ya buscaba poder enredar su cuerpo con el de Becca.

-¿No crees que es algo temprano Mirt? -Se desperezó correspondiendo a sus besos-.

-Estabas muy cansada anoche Bec, por eso he dejado que hagas lo que yo no pude.

-¿Qué?

-Dormir -Respondió rompiendo el camisón que llevaba puesta-.

-Mirt -Se quejó- es el tercero que me rompes en la semana.

-No puedo prometerte que sea el último nena.

-Mirt -Lo pellizco y él sonrió- me gustas más así -Besó su cuello- al natural, desnuda.

Sus labios siguieron un recorrido que lo llevó a sus pechos y luego a su sexo, provocando que Becca repitiera entre sollozos su nombre y se aferrara a él en busca de calmar el fulgor de su cuerpo.

-Becca, mi hermosa y dulce Becca -Repitió su nombre mientras sus ojos la miraban lleno de amor-.

-Te amo Mirt -Acarició su mejilla buscan desaparecer la distancia que había entre los dos-.

Un sentimiento de satisfacción invadió su rostro al oírla decir esas palabras, era mucho lo que habían sufrido y mucho el daño que él le había hecho, y aunque todo marchaba de maravilla, su corazón no podía perdonarse todo el dolor que le había causado a Becca, haría hasta lo imposible por demostrarle que era digno de su amor, esta vez nada ni nadie los separaría.

-Yo también te amo Becca -Junto su frente con la suya- y siempre será así.

Sus manos tomaron posición de sus caderas y entró en ella sin perder de vista esos hermosos ojos que tanto le gustaban, y que lo miraban llenos de una mezcla exquisita de amor, deseo y pasión.

-Mirt -Murmuró sobre sus labios al sentir la suavidad con que invadía su cuerpo-.

Un beso fue el encargado de silenciar los sollozos de placer que amenazaban con escapar de sus labios, un beso que los volvió cómplices del más sublime de los placeres que piel con piel pudieron experimentar al entregarse con cuerpo y alma, reconociendo así que uno era el hogar del otro.

ALESSANDRO

Intentó mantenerse sereno y no hacer notar lo mal que la estaba pasando en ese momento, tenía tantas ganas de contarle la trampa que Lucifer le había tendido, pero a la vez tenía miedo de que ella pensara que todo fue un plan de él para vengarse, después de todo él más que nadie sabía lo rastrero que podía ser Lucifer con tal de salirse con la suya.

-¿Te pasa algo mi amor? -Preguntó Alessandra al notar su silencio-.

-No linda, solo te observo trabajar -Mintió- me encanta verte -Se apresuró a besarla tratando de continuar con el tema - ¿Necesitas ayuda?

-No mi amor, ya casi termino.

-Has estado trabajando mucho estos últimos días, no quiero que te estreses linda.

-No lo haré, lo prometo, es solo que quiero terminar esto para empezar el proyecto lo antes posible.

-Lo entiendo princesa, sé lo importante que es para ti.

-¿Crees que esto funcione? -Lo cuestionó deseando escuchar unas palabras de aliento que la hicieran sentir más segura-.

-Por supuesto que sí -La miró lleno de orgullo- eres una chica muy inteligente y me enorgullece ver lo mucho que ha sabido manejar cada cosa que te has propuesto, lo estás haciendo bien Alessandra -Besó su frente- lo estás haciendo muy bien.

-Gracias -Se abrazó a él- no sabes lo mucho que deseaba oír esas palabras.

-Las escucharás siempre que las necesites, estoy aquí para apoyarte, y ahora señorita -Besó la punta de su nariz- iré a preparar algo para cenar, así que termina pronto ¿Si?

-Sí mi amor.

Algo de pasta y una buena salsa, fue suficiente para calmar el hambre de su chica que terminó rendida entre sus brazos por el cansancio de su trabajo.

La recorrió con la mirada y un suspiro de alivio, escapó de sus labios, había sido mucho el tiempo alejado de ella en ese oscuro abismo, que por poco acaba con él y con sus esperanzas de volver a tenerla a su lado, no estaba dispuesto a perder, si Lucifer quería guerra, guerra iba a tener.

🔥En El Internado 🔥

La noche al fin caía en el internado dando algo de descanso al día tan ajetreado que habían tenido Ezra, Drac y Yannick con las estudiantes, estaban exhausto.

-Este día ha sido maratónico -Resopló Ezra dejándose caer en uno de los sillones-.

-Y eso que solo estamos dando clases hasta las dos de la tarde -Intervino Drac-.

-Esperemos que Lucifer consiga reemplazos pronto, o esto será un caos -Aseguró Yannick bebiendo un poco de té-.

-Esas chicas van a volverme loco -Exclamó Drac- son muchos ojos viéndome el trasero -Comentó tomando su celular, estaba entrando una llamada-.

-Si te llaman para salir -Dijo Ezra- me sumo al plan.

-No podemos salir de aquí Ezra -Le recordó Yannick- debemos cuidar de las chicas.

-Que agua fiestas eres ¿Quién es, Drac?

-No es nadie importante -Mintió cortando la llamada, sin importarle que del otro lado una Ariel destrozada sufría por su culpa-.

Drac

Esperó a que Ezra y Yannick se fueran a dormir, y tomó su celular con la intención de devolverle la llamada a Ariel, pero su cobardía pudo más y al final decidió no volver a buscarla.