"El chico de ojos negros lloraba en un rincón asustado, tenía la cabeza cubierta por sus brazos y apenas se observaba su revuelta mata de pelos, llevaba un par de horas así luego de haber sido traído por unos soldados del cencalli, trate de ignorarlo porque sabía que enojaría a mi tío si me acercaba demasiado, después de todo había crecido entre humanos y aunque se convertiría en un Sharrow seguía siendo mala influencia para mí o eso solía decirme mi tío cuando me acercaba demasiado a los niños rescatados.
Trate de seguir leyendo los libros que mi abuela me dio, pero no era capaz de alejar la mirada de aquel triste niño en las escaleras, así que no pude más, mi abuela siempre dice que es el deber de una buena reina preocuparse por todos, no acercarme sería fallar ¿O no?
Además, me sentía muy mal por él, estaba solo y asustado en este enorme lugar, cuando llegue al último peldaño de la escalera trate de llamar su atención, pero al poner mi mano en su hombro el brinco sobresaltado—¿Quien eres?.—su voz tembló al preguntar.
—Perdón, no era mi intención asustarte, mi nombre es Mileva pero puedes decirme Mile ¿Te encuentras bien?
Él se limpió las lágrimas y negó—¡Mi familia murió, no sé dónde estoy!
—¿Recuerdas algo?
Él chico niega y se lleva las manos a la cabeza —Lo último que recuerdo fue que una camioneta nos golpeó, el sujeto en el auto me miró antes de chocar, al despertar, todos... Todos habían muerto y yo estaba solo.
—Pues ya no lo estás más, tú y yo vamos a cuidarnos ¿Vale?
Él asiente—¿Por qué te preocupas por mí?
Me encojo de hombros—Solo me agradas, digamos que entiendo el sentimiento de perder a alguien.
El me miró confundido—¿A quién perdiste?
—A mi mamá.—la tristeza inundo nuevamente sus ojos, supongo que, pensando en su mamá, luego hizo una pausa antes de preguntar.
—¿Y tú papá?
—Se fue cuando era niña, así que no puedes perder a alguien que nunca estuvo.
—¿Osea qué estás sola?
Niego—Tengo a mis abuelos y a mi tío, mi abuela Alisha me cuida y mi abuelo me ayuda a estudiar y aprender cosas nuevas, mi tío también ayuda, es un poco gruñón, pero en el fondo sé que me quiere y también está la Nana, ella habla mucho, pero es muy amable además su hija y yo somos amigas, aunque es algo olvidadiza, pero creo que ya no diré más, mi abuelo siempre dice que no debo hablar con extraños y como tú eres uno se enojara mucho si se entera.El chico extiende su mano—Mi nombre es Rodric pero tú puedes llamarme Rod, me gusta ver las estrellas y leer libros de aventuras, pero no de los que tienen dibujos ¡Esos son para niños pequeños! Excepto si son de barcos, hay dibujos muy bonitos, papá solía hacerlos conmigo.—él sonrió al recordar esto último, se puso de pie y dió un brinco hacia delante—¡Listo, ya no soy un extraño! Ahora puedes seguir hablando conmigo.
—¡Eso es trampa!
—No es trampa, tu prometiste que no iba a estar solo, si me dejas sin nadie con quien hablar lo estaré, así que ahora te toca cumplir esa promesa y quedarte conmigo.
Lo pienso por un momento—Tienes razón, mi tío Lui siempre dice que es descortés e irrespetuoso romper tu palabra, así que me quedaré contigo, pero no aquí.—tomo su mano y comienzo a tirar de él hacia adentro—¡Vamos!
—¿A dónde vamos?
—A casa"
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El Secreto De La Sangre Rosa
FantasySiempre he temido a la obscuridad, me aterra lo poco que veo en ella y lo fácil que las criaturas se esconden, le temo a la obscuridad porque cuando la luz se aleja el mundo se vuelve sombrío y parece carecer de sentido, le temo a la obscuridad porq...