41. ¡Dime su nombre!

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Mikael y Clarys observan como la versión pasada de Anelis entra en la oficina —¿Estas segura de esto? —Pregunto Mikael mientras contenía una mueca.
—Ella dijo que era necesario, debemos escucharla, prometimos hacerlo. - Mikel suspira, cubre su cabeza con una capa y abre con brusquedad la puerta, Clarys escucha las suplicas de Ane y esta tentada a parar todo, pero sabe que no puede hacerlo.

—Debe estarse confundiendo yo... No soy Ane, me llamo Ximena.

—Se quién eres, la cuestión aquí es ¿Lo sabes tú?

Ane continua tratando de convencer a Mikael que no es quien busca, pero él muy a su pesar la empuja contra la pared presionando su hombro, la mujer que estaba con Ane se asusta y trata de protegerla, Mikael voltea a ver a Clarys con preocupación, pero ella solo asiente y comienza a liberar una corriente en dirección a aquella mujer, Mikael la mira y justo a la par la corriente choca con ella transmitiéndole una extraña sensación de paz, la mujer se siente confundida y la agobia un fuerte impulso por salir, así que rápidamente guarda sus cosas y se aleja, Mikael suspira aliviado y continua presionando a Anelis, de pronto una corriente sale de ella empujándolo hacia atrás, él se mantiene inerte hasta que segundos más tarde ella desaparece.

Rodric y Camil por su parte cubrieron sus cabezas y atravesaron la enorme puerta de madera sin decir nada, pero al atravesar el ultimo pasillo hacia la sala del protego un guardia los retuvo, empuñando una espada contra su cuello —Nadie sin invita...

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Rodric y Camil por su parte cubrieron sus cabezas y atravesaron la enorme puerta de madera sin decir nada, pero al atravesar el ultimo pasillo hacia la sala del protego un guardia los retuvo, empuñando una espada contra su cuello —Nadie sin invitación tiene permitido entrar a la junta del consejo

Rápidamente Camil estiro su mano y lo tiro al suelo con una corriente, consiguiendo así una mirada de reproche por parte de Rodric—No debiste hacerlo, llamaremos la atención. -Ella se limitó a tomar su pulso y al ver que el guardia seguía con vida, comenzó a desvestirlo y le lanzo su chaqueta a su fiero amigo, quien solo giro los ojos. —Ni creas que hare de guardia mientras tú te llevas toda la diversión.

Camil hizo un puchero—Solo iré a esparcir un rumor, tampoco es para tanto, además acaso pretendes que me quede en la puerta y electrocute a todo el que lo note. —Hace pequeños rayos con su mano—Creí que no querías que llamáramos la atención, sin duda tu camuflaje es mejor para eso.

—Tú lo dijiste, llamaremos menos la atención si entro convertido en alguno de los miembros de menor nivel del protego.

—Pero... -Girando los ojos Camil suspiro frustrada y comenzó a vestirse con el traje del guardia, mientras veía a Rodric encaminarse a la sala principal.

Mientras Camil vigila, Rodric gira en dirección a la sala de consejo y se transforma en Silas, un aspirante a protego que según sus registros murió hace un par de horas a manos de los Focks, luego entra a la sala esperando que esta información sea aún solo de conocimiento suyo y se sienta al fondo. Durante un par de minutos todo marcha bien el resto del protego entra y toma su sitio sin reparar mucho en él, Alastor, Haniha y Mikel toman su sitio en el estrado y una pequeña Alia de acaso unos trece o catorce años se sienta en un rincón bajo la atenta mirada de Alastor. Este hecho sorprende a Rodric ¿Por qué Alia lucia tan pequeña? y si sus suposiciones son correctas ¿Por qué Alastor retendría a una niña sin gen activo? No es mucho su estilo ¿A menos qué?

El Secreto De La Sangre RosaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora