Antes de Perderte | Enzo x Julián

Capitulo Doce

Estaba por abordar el avión hacia Argentina. La reunión que iban a tener con los demás jugadores era al día siguiente y de solo pensarlo sentía que estaba cerca de empezar a temblar.

Mientras esperaba a que lo llamarán para abordar su vuelo algo llamo su atención. En el noticiero se podía ver la foto de dos chicos besándose, en lo que parecía un boliche y abajo un titular que decía

¡Enzo Fernández besándose con un hombre en un bar!

Su mente tardo unos segundos en procesar lo recién visto. Desde que se mudó se obligó a si mismo a no pensar como sería la vida amorosa o sexual de Enzo en la actualidad, claramente no esperaba que hubiera estado ese tiempo solo o esperándolo pero, de igual forma, le resultaba un tanto desagradable imaginárselo estando con alguien más.

Agarró su celular para empezar a buscar información sobre eso en redes, todo el mundo estaba debatiendo si el de la foto en realidad era él, además de quién era el otro chico, ya está salía un tanto movida y no se podía ver con claridad.

Julián no estaba seguro, aún que estuvieron bastante tiempo separados podría asegurar que lo reconocería dónde fuera pero tampoco confiaba mucho en que su mente no le juegue en contra y le quiera hacer creer que ese chico no era su ex novio, ya que tenía que aceptar que ciertamente eran bastantes parecidos.

Antes de que pudiera seguir dándole vueltas al asunto una voz femenina sonó por los parlantes anunciando que su vuelo estaba por despegar así que debía ir a la puerta indicada con anterioridad para poder ingresar al avión.

Decidió dejar el tema pasar, de igual forma no podría ingresar a redes arriba del avión.

Aún que segundos después se avergonzó de si mismo al encontrarse sacándole captura de pantalla a la foto de los dos chicos. No es que le agradará mucho ver una foto de su posible ex novio y otro chico besandose pero la curiosidad le estaba ganando y necesitaba saber sí el chico era en realidad Enzo o no.

También estaba un poco procurado de como se lo tomaría la gente si confirman que es él. No quería que el contrario sufra o reciba mensajes de odio por eso.

De igual forma decidió dejar el tema de lado por un tiempo, después de todo faltaba poco para verlo y supuso que si ocurría algo se iba a enterar en ese momento.

...

Ya era el momento. Estaba al frente de la puerta donde se concretaba la reunión.

Supuso que ya todos se encontraban adentro puesto que llegó bastante más tarde del horario pedido, sus ganas de atrasar el momento del reencuentro le hicieron tomarse un poco más de tiempo en todas sus actividades. Eso significaba que lo más probable es que él ya esté allí, sabía que era una persona bastante puntual.

Sentía su pulso acelerado y sabia que si esperaba un poco más iba a empezar a transpirar así que con todo el valor que pudo juntar tomo la manija de la puerta abriéndola, trato de actuar lo más normal posible, no quería que el resto de sus compañeros notaran algo raro en él. Busco por toda la habitación, la mayoría ya se encontraba allí, solo quedaban tres asientos libres, el que supuso que era para él, el que creía que era para Enzo, ya que este no se encontraba en la habitación y uno más al lado de los dos anteriormente dichos.

No sabía si se sentía aliviado o más nervioso todavía, ahora estaba empezando a dudar de si lo iba a ver puesto de que ya había pasado bastante tiempo de la hora de iniciación a la reunión y sabía que, aún que no lo pareciera, Enzo era una persona a la que le gustaba llegar a horario a los lugares.

Aún que ahora ya no estaba tan seguro, había mucho tiempo que no lo veía, no sabía cuánto podría haber cambiado.

Decidió ir a sentarse, sabía que se veía medio raro el haberse quedado parado al lado de la puerta mirando un punto fijo sin siquiera saludar a los presentes.

Al terminar de ingresar a la habitación, dio un saludo general, pidió perdón por la tardanza y se fue a sentar a uno de los lugares que estaban vacíos, justo quedó al lado de Dybala.

Empezó a conversar con este, no iban más allá de las preguntas básicas pero de igual forma creyó que le sirvió un poco para distraerse.

Al prestar un poco más de atención al lugar se dio cuenta de que la otra persona faltante era Lautaro Martínez, se habían visto un par de veces antes pero no hablaron mucho, solo lo justo y necesario para decir que eran conocidos.

Se quedó unos segundos pensando en él y justo cuando Paulo le iba a preguntar si todo estaba bien, se escuchó una fuerte risa al otro lado de la puerta. Sintió que su corazón se aceleraba, reconocería ese sonido donde fuera, había sido su sonido favorito durante un tiempo y si dejaba de negarselo a si mismo podría decir que lo seguía siendo.

Antes de que pudiera seguir pensando en eso, la puerta se abrió, se sorprendió de primero ver a Lautaro, no sabía que ellos eran amigos a tal punto de venir juntos pero dejo todos sus pensamientos atras cuando lo vio, estaba casi igual que cuando se fue, se lo notaba un poco más maduro pero nada más.

Al entrar su mirada no recayó en él, primero recorrió toda la habitación saludando a los demás, hasta que se tuvo que ir a sentar y lo noto. Sus miradas chocaron, algo cambio en el otro, por más que lo trato de disimular y para los demás era prácticamente impersibible, el lo notó. Tanto tiempo mirándolo a la cara, estudiando cada una de sus facciones, perdiendose en esos ojos que antes lo miraban con un cariño inmenso y que ahora solo era una mirada dura, no quedo rastros de aquello que creyó conocer, se miraron por tan solo unos segundos que para él se sintieron horas. El otro corto el contacto y se fue a sentar dejando una silla entre medio de los dos, sin volver a mirarle.

Lautaro se sentó entre medio de los dos y lo saludo con felicidad, se notaba que no tenía idea de nada de lo que había pasado entre ellos.

Durante la reunión no se hablaron y Enzo ni siquiera lo miro, era como si no existiera para él. De igual forma lo conocía bien, podía ver como una de sus manos se la pasaba jugando con su collar y cada tanto con su pelo, además de que no dejaba la pierna derecha quieta. Era algo que siempre hacía cuando estaba incómodo o nervioso y como Enzo era una persona bastante sociable, la cual no se ponía así por una reunión con sus nuevos compañeros de equipo, supuso que la razón era él.

No estaba seguro de como iba a ser de ahora en adelante pero si sabía que no iba a ser fácil.