Síndrome de estocolmo (BTS-T/N)

Día 5

-Hobi-

    -Tú hazlo y yo te veo, ya me saldrá -puse atención a los pasos que estaba haciendo para bailar samba un chico al que había conocido recién, él sólo se me acercó muy entusiasmado y me preguntó si sabía bailar, le dije que no había practicado la samba pero si lo veía quizás podría intentar -con eso.

    Davi: ¡Eso! -me dejó la calle libre.

Yo creo que era mi turno, comencé a sentir el ritmo del grupo que estaba tocando justo detrás de nosotros y cuando abrí los ojos tenía personas a mi alrededor animandome y aplaudiendo, en un segundo se unieron para bailar conmigo.

    -¡Que gente! -le dije a Davi refiriéndome al cálido ambiente.

    Davi: Así es Brasil -reímos y seguimos bailando, realmente hacía calor y todos vestían para la ocasión,  algunos hombres solo llevaban camiseta de tirantes y las mujeres llevaban shorts o algo que les permitiera sentirse menos acaloradas, aún no iniciaba el carnaval pero ya estábamos preparándonos, Namjoon ya había pagado para que tuviera el mejor lugar reservado pero no iba a esperar todo aburrido ahí y sentado, por eso decidí salir hasta que diera la hora y cada esquina que pasaba me encontraba gente danzando o maquillandose para ir con el ambiente de carnaval, yo me había comprado un antifaz muy colorido que no me había puesto aún -¿En dónde piensas sentarte? -nos alejamos un poco de los músicos.

    -Ya tengo un lugar -alzó las cejas algo sorprendido.

    Davi: Reservar un lugar es muy caro.

    -¿Qué tanto puede costar? -rió y yo me avergoncé- no quise decirlo así, realmente no lo sé, fue un regalo -comprendió y asintió.

    Davi: Me iba a decepcionar, eres excelente bailarín, sólo te faltaba ser soberbio.

    -No, no, yo no soy así.

    Davi: ¿No eres excelente bailarín?

    -Eso sí pero soberbio nunca -sonrió.

    Davi: Siempre hay que mantener los pies en el suelo o si no...bueno, la vida se va a encargar de arrodillarte.

    -Definitivamente, me gusta ayudar  mientras puedo -cuando recién sali de mi habitación para llegar aquí me habían pedido dinero varias personas en situación de calle, les di lo suficiente para ayudar.

    Davi: Te ves como un buen tipo, seguro lo eres.

    X: ¡Davi! Hola hermano -volteamos y se saludaron, era un tipo de color bastante alto y fortachon -me miró sonriente esperando a que me presentara.

    -Hobi, mucho gusto -estrechó mi mano amablemente.

    Davi: Lo acabo de conocer -le dijo refiriéndose a mi.

    Jose: Mucho gusto, mi nombre es jose, que bien hablas brasileño.

    -Gracias, algo de práctica funciona.

    Davi: ¿Cómo me encontraste?

    Jose: Iba pasando y te vi, ahora si fue mera casualidad.

    -¿ahora si? -rieron y yo sonreí por inercia.

    Davi: Una vez el loco me siguió porque no encontraba un dulce que me había pedido, me regresó como tres veces y salió para ver si de verdad había ido a diferentes tiendas a buscar.

    Jose: Lo siento pero no podía confiar en ti, sé lo flojo que eres.

    Davi: ¿cuando te he fallado un favor?

    Jose: Cuando te pedí que me pasaras la sal.

    Davi: Porque estaba más cerca de ti que de mi -rodó los ojos y le dió un zape amistoso.