"𝐈 𝐅𝐞𝐞𝐥 𝐘𝐨𝐮"-𝐄𝐝𝐝𝐢𝐞 𝐌𝐮𝐧𝐬𝐨𝐧 𝟐- 𝐒𝐓

Capítulo 50: Lo hare.

Después de lo que parecían ser 20 minutos aún podía escuchar los pasos apresurados corriendo tras los míos. Sabía que se trataba de él pero aún así seguí corriendo.

-¡ROBERTS!-gritó a la distancia haciéndome girar mi cabeza un poco para verlo.

Las lágrimas se deslizaban sobre mis mejillas intentando retenerse a ellas. El susurro de la noche llegando a mi costado me hacía sentir vacía e inútil pero de alguna forma viva.

No era más rapida que él y eso lo sabía, sin embargo, cuando aquella orilla del lago se divisó a mi reojo no dudé en esconderme tras el árbol más cercano haciéndolo perderme de vista.

Justo como esperaba paró en medio de bosque con la frustración reflejada en su rostro. Observé el anillo reposando sobre mi dedo anular por unos segundos para luego mirarlo.

-¡ROBERTS!- había juntado ambas manos creando un gran eco.

Unas aves más allá levantaron vuelvo gracias a la impresión, su mirada giró a todos lados antes de que se escuchara un estruendo a la distancia.

Solté aire por la boca mientras lo observaba desviarse hacía el sonido con rapidez. Al perderlo de vista corrí hacía la orilla del lago dejando a un lado mis zapatos escondiendolos tras el arbusto más cercano. Introduje los dedos de mis pies entre la tierra humeda y fría, haciéndome sobresaltarme.

Mi miedo a nadar me arrasó como una ola alta.

-Solo es agua...-susurré antes de dejarme caer dentro del agua. Me sostuve en la rama más cercana y observé a unos metros la otra orilla junto al muelle a lo lejano; este pertenecía al club de pesca.

-¡T/N!- volteé rápidamente mi cabeza hacía el bosque reconociendo la voz de Steve. Gire hacía el muelle y luego hacía el bosque, repetí aquello un par de veces antes de tomar aire y soltarme de la rama introduciendo mi cuerpo entero en el agua.

Cuando mis pies tocaron la ultima porción de tierra que me mantenía en la superficie, dudé.

-¡ROBERTS!-se escuchó a lo lejos haciéndome voltear pensando en toda mi vida en aquel momento, me faltaban respuestas y cada día parecía estar más lejos de la verdad-¡NENA!-se escuche una vez más su voz antes de avanzar hundiéndome completamente de pies a cabeza.

La profundidad me tragó como un simple insecto y mi desesperación volvió a tomar mi cuerpo. Así que, en mi lucha voraz por salir superficie mi cuerpo se hundió más.

El aire en mis pulmones desaparecía mientras era reemplazado por el agua clara del lago. Allí...mientras me hundía y luchaba por mi vida, el pequeño reflejó de mi vida acabando pasó frente a mis ojos.

Un pequeño flash de rendición se atravesó indicándome que aquello no era más que el fin. De repente un pensamiento se atravesó por mi mente como si hubiera estado allí en el rinco...esperando por aparecer.

"Si mueres todo acaba"

La lucha por salir de allí acabó llevándome así a hundirme cada vez más hacía las profundidades de aquel lago. El halo de luz del atardecer que había estado cayendo mientras corría por el bosque había desaparecido como había aparecido...en un santiamén.

Mi cuerpo cayó golpeó el fondo mientras mis ojos se cerraban y mi mente intentaba luchar aún más.

"Déjate ir"

Era lo que mi cerebro había susurrado antes de hacerme cerrar los ojos gradualmente.

No fue hasta entonces que la tierra había empezado a levantarse a mi alrededor, flotando en dirección hacía la superficie. Había estado inconsciente como para notar que aquello sucedía y aún más...que sucedía gracias a mí y aquellos habilidades que no podía controlar.